A LA crisis que muestra la mesa de negociación del Gobierno y el Eln por el anuncio de esa guerrilla de que volverá a secuestrar, se suma una especie de guerra verbal con señalamientos de lado y lado, inclusive personales, en que ha sido a relucir el presidente, que de seguir en esa tónica podría entorpecer el curso del proceso o llevar a su rompimiento. El profesor Alejo Vargas, consultado por EL NUEVO SIGLO, considera que esto es una muestra de que las partes han perdido confianza.
Mientras que el analista Pedro Medellín interpreta que los señalamientos de alias ‘Antonio García’, jefe del Eln, buscarían romper las conversaciones, pues ya no sería conveniente para esa organización mantener la negociación con un Gobierno que afronta tantos problemas en el país en diferentes frentes.
Precisamente, ‘García’ en medio de la discusión con el Gobierno que le exige al Eln honrar el compromiso que hizo en el VI ciclo de conversaciones en La Habana (Cuba), en febrero pasado, de suspender los secuestros extorsivos, le recordó al alto comisionado para la Paz, Otty Patiño, su pasado en el M-19.
“Ahora a Otty se le dio por hablar de las retenciones económicas que volverá a realizar el Eln, pero se le olvida las que él y el M-19 hacían. Le recuerdo que en la retención de Camila Michelsen, capturada en 1985, ya habían iniciado negociaciones”, escribió alias ‘Antonio García’ en la red X.
Sobre el particular, el comisionado Patiño dijo ayer a W Radio que “el señor ‘García’ discute con un Otty Patiño que ya no existe, que vivió el M-19, pero uno que superó ese pasado a través de un proceso de paz y de una constituyente en la que participé”.
‘Antonio García’ no se quedó ahí, pues también lanzó dardos al jefe de Estado: “Hablando de economías ilegales, de las que le gusta hablar a Gustavo Petro, recuerdo que en la mitad de la década de los 80, siendo apenas él un dirigente regional del M-19 en Santander, nos solicitó que ‘lo lleváramos’ en unos impuestos que el Eln estaba cobrando al transporte”.
Agregó ‘García’ que “efectivamente lo llevamos, y les entregamos un ‘billete’ de un impuesto cobrado. Él (Petro) y su tropa se gastaron ese ‘billete’ en trago y francachelas, no en la lucha. Desde luego que los siguientes meses tuvimos que cortar esa contribución a las farras”.
El presidente Petro dijo de este señalamiento que “en los 80 primero viví en el Bolívar 83, barrio pobre de Zipaquirá, después, viví en la cárcel y después en el piso de las casas de la gente del pueblo que me ofrecían su abrigo y refugio. Nunca fui tan pobre y tan libre como en esa época. A la desmovilización militar del M1-9, que no era política, llegué en 1989 con dos blue jeans y tres camisas y volví a dormir en el piso de la cocina de un apartamento en Bogotá. No me arrepiento. A las insurgencias les hace mucho daño la gran riqueza, les afecta las ideas, se vuelven opresoras o enloquecen. Se olvidan del bien más preciado de un pueblo que es la paz”.
Hay desconfianza
Alejo Vargas Velásquez, profesor del Departamento de Ciencia Política de la Universidad Nacional y estudioso del conflicto interno, dijo a este Diario sobre la guerra verbal en los últimos días entre el Gobierno y el Eln, “creo que eso es un reflejo de la crisis de la mesa, pero no creo que eso en esencia vaya a agravar la situación de la mesa, que ya de por sí es bastante complicada. Creo que lo que eso refleja es la pérdida de confianza, y eso sí me parece que es importante que cada vez pareciera que hay menos confianza entre las partes”.
El académico señala que las afirmaciones de ‘García’ en los últimos días también se explicarían por “una campaña que ha habido de funcionarios del Gobierno, pero también de los medios, hay que decirlo, de desconocer el rol de ‘Antonio García’ y decir «ese no importa porque lo que importa es lo que diga ‘Pablo Beltrán’, que es el jefe de la mesa». Cualquiera sabe que esa delegación depende de la dirección y del COCE (Comando Central)”.
Vargas considera que esta guerra verbal entre el Gobierno y el Eln no llevará a que se rompa el proceso, pues ya hay un camino avanzado en las conversaciones, sin embargo, pone de presente que sí es un paso atrás.
En tanto que el politólogo y analista Pedro Medellín dijo a este Medio que “creo dos cosas: uno, que no me cabe duda que la plata que le dio el Eln al M-19 se la gastaron en farra. Segundo, tampoco me cabe duda que ‘Antonio García’ lo que está haciendo con esas declaraciones es buscar romper la conversación con el Gobierno. Es decir, el Gobierno está en una posición tan maltrecha en todos los frentes, que el Eln no parece dispuesto a desgastarse en ese proceso de negociación, a debilitarse en ese proceso de negociación”.
Agregó que “el Eln está viendo que no tiene mucho sentido estar en esa negociación, y está dando todo tipo de declaraciones para levantarse de la mesa”.
Ruta de crisis en la negociación
Varias controversias fuertes se han registrado en los 18 meses que llevan las conversaciones del Gobierno y el Eln, que incluso algunas han puesto a tambalear la continuidad del proceso.
Cese el fuego:
El presidente Petro aseguró el 31 de diciembre de 2022 que “hemos acordado un cese bilateral con el Eln, la Segunda Marquetalia, el Estado Mayor Central (las disidencias); las AGC (Autodefensas Gaitanistas de Colombia o también conocidas como Clan del Golfo) y las Autodefensas de la Sierra Nevada, desde el 1 de enero hasta el 30 de junio de 2023, prorrogable según los avances en las negociaciones”.
Sin embargo, el mandatario fue desmentido por el Eln al señalar que su delegación de diálogos “no ha discutido con el gobierno de Gustavo Petro ninguna propuesta de cese el fuego bilateral”.
Por este hecho se tuvo que convocar una reunión extraordinaria de la mesa en Caracas, en donde se acordó que el cese el fuego se discutiría en el segundo ciclo en México.
Mando del Eln:
En mayo del año anterior hubo una segunda crisis en el proceso porque el presidente cuestionó el poder de mando de las estructuras del Eln. El grupo armado calificó de “irrespetuosas” las declaraciones.
Secuestros
En junio del 2023 comenzó el pulso que se mantiene por los secuestros extorsivos, pues si bien el Eln en el acuerdo del ciclo de La Habana manifestó su intención de suspender esa práctica, ‘Pablo Beltrán’ dijo luego que “las operaciones de finanzas se empezaron a discutir” pero no hubo acuerdo, y que por tanto seguirían secuestrando.
El Gobierno planteó entonces un fondo para financiar el sostenimiento de las tropas del Eln si deja de secuestrar. En febrero pasado, el presidente Petro se refirió a un fondo multidonante: “Son muchos países o entidades, organizaciones extranjeras, que colaborarían con el esfuerzo de la paz en el caso del Eln”. Sin embargo ‘Pablo Beltrán’ dijo sobre esto que no ha pasado de un titular de prensa.
En noviembre pasado se registró otro tremor en la negociación por el secuestro de Luis Manuel Díaz, el padre del futbolista Luis Díaz. Tras 9 días de cautiverio fue liberado por el Eln, al tiempo que el Gobierno exigió a ese grupo eliminar esta práctica.
Frente Comuneros
La más reciente discusión que no se ha resuelto data de febrero pasado por las conversaciones que adelanta el Gobierno con el frente Comuneros, el cual señala que ya no hace parte del Eln. No obstante, esta guerrilla acusa a la Administración Petro de buscar negociar por fuera de la mesa con algunas de sus facciones.