LA INTELIGENCIA artificial apunta a que será protagonista en las elecciones presidenciales y legislativas del 2026, con aspectos positivos en la estrategia de campaña como, por ejemplo, que el candidato con base en la data de anteriores comicios defina de mejor forma el segmento del electorado al que le debe llegar; pero también con el peligro implícito que mal usada puede emplearse para generar información falsa, entre otros.

En los últimos años, tanto en las elecciones nacionales (presidenciales y Congreso) como en las regionales, las redes sociales irrumpieron con fuerza porque los candidatos aprovecharon las plataformas Facebook, Twitter, Instagram y TikTok para hacer propaganda llegando a públicos masivos, sin los costos y dificultades que implica la campaña en plaza pública.

Sin embargo, en este propósito las redes sociales también mostraron una mala cara porque algunas campañas y candidatos las emplearon sin escrúpulos para propagar noticias falsas de sus competidores o, incluso, publicar encuestas con resultados maquillados o sin ningún sustento técnico en la forma como se realizaron.

En las elecciones de 2026 se cree que las redes sociales no perderán protagonismo para hacer propaganda; sin embargo expertos consultados por EL NUEVO SIGLO indican que la inteligencia artificial es un paso más allá y se impondrá por las múltiples posibilidades que ofrece para diseñar la estrategia de campaña, en cuanto a formas y comportamientos que debería seguir el candidato; escoger los temas que sería mejor presentar como sus banderas; así como definir de manera certera el electorado al que se debe llegar, entre otros.

Un aspecto también positivo de la inteligencia artificial es la ayuda que puede dar a la Registraduría Nacional para cualificar el proceso electoral, desde la organización del mismo hasta llegar a las votaciones.

La inteligencia artificial se define como la capacidad de las máquinas de imitar a partir de grandes conjuntos de datos algunas capacidades que tienen los seres humanos como razonar, aprender, crear, planificar y resolver problemas.

Las ventajas y desventajas

Alfonso Portela, exregistrador delegado para lo Electoral en la Registraduría Nacional y fundador de Tyse (Tecnología y Servicios Electorales), dijo a este Medio que la aplicación de la inteligencia artificial en esta materia presenta aspectos positivos y negativos.

“En el de influenciar a los electores a través de creación de contenidos, de imágenes y una serie de elementos que son propios de inteligencia artificial, pues es nocivo para el elector porque se distorsiona la realidad, se entromete con la voluntad del elector, se influencia mucho la decisión, se mandan mensajes negativos y una serie de eventos que van en contra de la transparencia de un proceso”, explicó Portela.

Añadió que “si lo vamos a mirar desde el punto de vista de aplicación tecnológica para mejorar el procedimiento electoral, pues es positivo. En la aplicación de muchos de los procedimientos es importantísimo tener los avances de inteligencia artificial para la transparencia, para la agilidad, para la claridad del proceso”.

Ante los temores de que la inteligencia artificial sea usada de manera maliciosa en las próximas elecciones en Colombia, Portela recordó que “hace poco hicieron un lanzamiento el GPT, en una evolución, y ya por lo menos se podían crear contenidos como si la persona que los estuviera transmitiendo fuera el verdadero titular”.

Agregó que “eso es completamente nocivo porque no solo se utiliza la imagen de una persona, se utiliza ya la voz, la sacan de manera tal que sea exacta. Entonces eso confunde al elector porque uno que mire eso en redes sociales, pues inmediatamente le va a endilgar el mensaje positivo o negativo a esa persona sin haberlo elaborado”.

Por ello, Portela dijo que “se pide unos mínimos de regulación frente al uso de esas herramientas en materia de la distorsión de la voluntad del ciudadano”. No obstante, apuntó que es difícil controlar este asunto “porque hay que entender el contenido y la capacidad de cada elemento y de cada herramienta. Si usted no lo conoce y no lo interpreta, pues difícilmente puede crear una fórmula que le permita ejercer unos mínimos de control”.

En ese sentido consideró que lo principal “en el ciudadano es entender los mensajes, entender qué es lo positivo y qué es lo negativo, a qué se debe atener y qué es lo que va a encontrar en un momento determinado. Entonces, en lo que tiene que ver con el mensaje político, el mensaje al elector por parte de los candidatos, ahí se tiene que ejercer mucho control y mucho filtro”.

Miguel Jaramillo Luján, consultor y asesor en comunicación política y de gobierno, dijo a este Periódico que “la campaña política o el ejercicio del liderazgo político pospandémico se ha visto transformado por una gran revolución que es de las inteligencias artificiales. Hoy la industria del marketing político y de la estrategia política desarrolla en las campañas una serie de hitos donde hay grandes retos y grandes preguntas por diferentes temas, el primero es el que tiene que ver con la información falsa”.

Añadió que la campaña política es un ejercicio de generación de opinión pública, frente a lo cual llamó la atención porque “la diseminación de noticias falsas a través de diferentes tipos de herramientas de inteligencia artificial generativa puede llevar a una distorsión de la realidad que es nociva para la toma de decisiones de los ciudadanos”.

Dijo también Jaramillo que esa inteligencia artificial generativa permite “poner en juego la reputación, la vida, la integridad del candidato, de su familia, de los votantes y de las personas alrededor, sobre todo en tiempos de tan alta polarización y de tanta exacerbación de sentimientos negativos como la que hay actualmente”.

Explicó que la inteligencia artificial ya le hace posible a los candidatos en Colombia “el manejo adecuado de la ciencia de datos que permite la homologación, geolocalización, ubicación de gustos a través de los píxeles de redes sociales con el acceso a los datos de las personas debidamente certificado, para poder conocer los comportamientos electorales de micronichos, y de esa manera poder hipersegmentar la campaña política”.

Agregó el experto que las inteligencias artificiales neuronales (que no necesitan tanto una instrucción) permiten la automatización del control electoral. “Gracias a la inteligencia artificial se puede detectar rápidamente mesas donde hay impugnaciones, tendencias. Incluso, la forma en que se pueden robar unas elecciones, puede haber tendencias que la inteligencia artificial puede detectar y ayudar a controlar”.

Algunos casos

Hay denuncias por el uso inadecuado de la inteligencia artificial en campañas políticas. El año anterior, el expresidente Donald Trump subió a redes una parodia burlándose del lanzamiento que hizo Ron Desantis de su campaña a la presidencia.

Trump utilizó inteligencia artificial recreando las voces de personalidades como Elon Musk, George Soros y Hitler para burlarse del gobernador de La Florida, que en ese momento prometía pesar en la campaña.

Por otro lado, un reciente informe dio cuenta que en Europa los partidos políticos acuden frecuentemente a la inteligencia artificial. ‘AI Forensics’ examinó las redes sociales de 31 partidos franceses entre el 1 de mayo y el 28 de junio, durante las elecciones europeas y la primera vuelta de la campaña legislativa francesa, encontrando 51 casos de imágenes producidas con esa tecnología.