Muerte de niños por desnutrición es una irresponsabilidad: Hoyos | El Nuevo Siglo
Sábado, 2 de Abril de 2016

La responsabilidad sobre la muerte por desnutrición de los niños no solamente es del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, es de todo el Estado en su conjunto, del Gobierno, de los alcaldes, de las gobernaciones. Así lo señaló la procuradora delegada para los temas de infancia, Ilvia Miriam Hoyos. La Procuradora explicó de la misma manera que el programa de alimentación escolar en Colombia es una bomba de tiempo.

 

EL NUEVO SIGLO: ¿Qué responsabilidad hay en el tema de la muerte de los niños por desnutrición?

ILVIA MIRIAM HOYOS:El tema de la desnutrición evidencia una vez más la difícil situación de los derechos de la infancia en Colombia, no se trata exclusivamente de un departamento, del departamento de La Guajira, sino que hay otros departamentos del país que también están en una muy difícil situación en relación con la desnutrición que tiene que verse como un problema de salud pública, un problema complejo, que también esconde la pobreza, la inequidad, la injusticia en este país. La desnutrición va unida a su vez a condiciones que impiden el ejercicio de derechos fundamentales en especial de la población indígena en Colombia.

 

ENS: ¿Qué se concluye?

IMH:La responsabilidad es compartida, es responsabilidad del Estado, de las gobernaciones, de los alcaldes, que en sus planes de desarrollo no han logrado advertir la urgencia de este tema, pero también del Gobierno nacional que no ha logrado unas políticas coordinadas entre las diversas instancias que tienen que ver con la garantía y protección de los derechos de los niños. No es una responsabilidad exclusiva del Bienestar Familiar, es también la responsabilidad del ministerio de Salud, es también la responsabilidad del Ministerio de Cultura, en relación con los planes que corresponden a la alimentación. También los padres de familia tienen su responsabilidad por el abandono que tienen de sus hijos, aunque a veces las causas de pobreza, de desempleo llevan a muchas personas a desatender a sus hijos. Pero también hay otras situaciones culturales.

 

ENS: ¿Qué departamentos le preocupan?

IMH: El país ha puesto los ojos en el departamento de La Guajira, no puedo dejar de significar la magnitud, de la situación que se vive en ese departamento evidenciado en la resolución de la Comisión interamericana de Derechos Humanos. Pero también hay una situación crítica en el departamento del Chocó, en el departamento del Putumayo, en los departamentos de la Costa Atlántica, Bolívar, Magdalena, Nariño, en el Cauca.

 

ENS: ¿Qué llamado le hacen al Estado?

IMH: Hemos hecho llamados de diferentes índoles, planteándoles en primer lugar, que debe existir una coordinación y una articulación entre las diversas entidades del Estado, que tienen que ver con la garantía y protección de los derechos de los menores de edad, estimamos que la situación  que se ha evidenciado se da también en la ciudad de Bogotá, incluso en el propio departamento de Antioquia, y tenemos que trabajar de una manera más articulada, todos los temas que hacen referencia a los derechos de los niños, en estos momentos hemos insistido mucho, para que en los planes de desarrollo que deben ser aprobados por los concejos municipales y las asambleas departamentales antes del 31 de mayo, incluyan estos temas de la infancia. Estos temas de la desnutrición implican varias causas, como las condiciones de salubridad, la ausencia de los servicios públicos, la falta del agua en algunos municipios, las condiciones dispersas de la población.  

 

ENS: ¿Qué opinión tiene del video de una docente en Aguachica, Cesar, sobre la mala alimentación que se les suministra a los niños?

IMH:Vi el video y las explicaciones que dan los operadores sorprenden, y lo dejan a uno más perplejo, manifestando que se trataba de una jornada pedagógica para que los niños pudieran utilizar en debida forma los utensilios que usan para la alimentación, con los niños no se puede jugar, es una vergüenza que si es verdad que es una jornada pedagógica, se está utilizando a los niños, pero también indignante ver las condiciones de las instituciones educativas. El programa de la alimentación escolar en Colombia  es una bomba de tiempo y desafortunadamente el Ministerio de Educación se ha lavado las manos, transfiriendo la responsabilidad a las entidades territoriales y no aplicar medidas, para que esta sea una política de Estado.