LUEGO DE que se diera a conocer que el Gobierno, a través embajador en EE. UU., Daniel García Peña, le solicitó al presidente del país norteamericano, Joe Biden, el indulto para el exjefe guerrillero Ricardo Palmera, alias ‘Simón Trinidad’, quien se encuentra cumpliendo una condena de 60 años por el secuestro de tres ciudadanos norteamericanos, la procuradora general, Margarita Cabello, aseguró que no es necesaria la liberación del excabecilla y que es una decisión que le compete a la soberanía de Estados Unidos.
“Simón Trinidad fue extraditado a Estados Unidos y fue condenado, ya se encuentra condenado a 60 años de prisión por algunos delitos graves, incluyendo los delitos de secuestro de tres ciudadanos estadounidenses”, indicó la procuradora.
Es importante mencionar que la solicitud hecha por el Ejecutivo, busca la participación de Palmera en los procesos que adelanta la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), lo que lo supone como un posible gestor de paz.
En ese sentido, EL NUEVO SIGLO consultó con 4 expertos la viabilidad de esta petición. Camilo González Posso, presidente del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), afirmó que es muy difícil predecir lo que puede hacer en estas semanas el gobierno de Biden.
“No le alcanza el tiempo y tampoco está entre las prioridades, no veo qué pueda ganar ese gobierno (el de Petro) que está más preocupado por las guerras que quiere dejar de herencia. Tampoco es muy claro exactamente a qué vendría a colaborar ‘Simón Trinidad’, lo que sí es cierto es que el asunto de narcotráfico por el cual fue juzgado y condenado en los Estados Unidos es un asunto bastante extraño, enrarecido, sin muchas pruebas, pero sobre todo ya puede darse como pena cumplida o con beneficios posibles por buena conducta”, puntualizó.
A su turno, María Victoria Llorente, directora ejecutiva de la Fundación Ideas para la Paz (FIP), enfatizó que tiene dudas sobre la situación.
“Lo primero es que el gobierno americano de Biden ha sido más bien cauto en apoyar a ese gobierno en el proceso de paz. El gobierno de Gustavo Petro le ha pedido varias veces, por ejemplo, que apoyaran la mesa con el Eln y el gobierno de Biden no ha dicho nada en contra, pero siempre han sido cautos y han dicho que hasta que no lo vean más claro, no van a mandar un enviado especial. El presidente Biden tiene en estos momentos problemas mucho más graves como toda la situación en Ucrania que se está volviendo mucho más compleja y se está escalando de una manera muy peligrosa. Por último, durante el proceso de paz en La Habana esa fue una petición grande que hicieron las Farc. Si en ese momento donde había gran respaldo del gobierno del presidente Obama al proceso de paz en Colombia y había interés en apoyar y no se logró hacer, no veo realmente cuál sería el incentivo que tenga el gobierno del presidente Biden en este momento para hacer eso”, explicó.
Un ambiente complejo
Jorge Yarce Tamayo, analista internacional de la Universidad Central indicó que, si bien el indulto presidencial casi no tiene límites en el marco de la Constitución de los Estados Unidos, es decir, el presidente de los Estados Unidos saliente puede dar indultos a casi cualquier persona; existen consideraciones que se hacen alrededor de los indultos que se conceden, dependiendo de la gravedad, lesividad e interés público de los delitos cometidos.
“En esa medida es donde los delitos por los cuales se juzgó y condenó a ‘Simón Trinidad’ en los Estados Unidos, se vuelven uno de los principales obstáculos para que el indulto presidencial pueda ser concedido, puesto que está involucrada de por medio la vida, la libertad y el patrimonio de ciudadanos norteamericanos y de instituciones privadas de los Estados Unidos”, afirmó.
Por último, Jaime Andrés Wilches, analista político del Politécnico Grancolombiano, explicó que “en estos momentos con un ambiente complejo donde han aumentado los cultivos ilícitos, donde hay evidencias de disidencias de las Farc que han venido golpeando distintos territorios en Colombia y con una Jurisdicción Especial para la Paz en donde las Farc no han sido del todo claras en reparar y contar la verdad para las víctimas, no es un ambiente que permita comprender o entender que habría alguna posibilidad de que ‘Simón Trinidad’ viniera a Colombia”.
Asimismo, aseveró que el gobierno de Petro hace esta solicitud como una construcción de confianza de lo que puede llegar a suceder en el futuro con los diálogos con el Ejército de Liberación Nacional.