EN EL marco del foro sobre la reforma pensional: “Garanticemos el derecho de la fuerza laboral”, el presidente del Congreso, Iván Name Vásquez, en su intervención indicó que se pretende hacer una reforma pensional que garantice los derechos de los actuales afiliados y las generaciones futuras las cuales requieren de un debate técnico que atenúe discusiones sobre el modelo pensional que sería el más adecuado para solucionar los problemas de baja cobertura, inequidad e inestabilidad financiera.

También resaltó que estos encuentros no son solo escenarios de discusión, sino espacios donde las reformas se debaten y se moldean con el calor de la empatía mutua.

Aunque al foro estaban invitados la ministra de Trabajo, el ministro de Hacienda y Crédito Público, el ministro de Salud y Protección Social y el presidente del Comité autónomo de la regla fiscal (CARF); no todos los panelistas del sector gobierno asistieron.

“Lamento la ausencia de Gloria Ramírez, ministra de Trabajo. Me acaba de llegar su excusa, anoche estuvimos trabajando todo un equipo con ella hasta tarde, hoy debió ser una circunstancia superior a su voluntad para que haya decidido no acompañarnos en este foro de la propia esencia de su cartera”, sostuvo Name.

Asimismo, recordó la riqueza que aporta a Colombia la diversidad de sus regiones y al mismo tiempo, puso de relieve los desbalances regionales presentes en el sistema pensional. Informó que, actualmente, el sistema cuenta con 1,9 millones de pensionados, de los cuales el 51% se concentran en las principales ciudades: Bogotá, Medellín y Cali. Así mismo, señaló que la posibilidad de pensionarse está fuertemente ligada a la formalidad laboral.

En un análisis más detallado, el presidente del Senado proporcionó estadísticas relevantes. Hasta julio del 2023, la proporción de informalidad laboral en las principales 13 ciudades corresponde al 41%, mientras que, en centros poblados y áreas rurales dispersas, esta cifra asciende al 84%. Estas disparidades evidencian la necesidad de abordar las inequidades regionales en el acceso a la pensión.

Finalmente, Name Vásquez cerró su intervención recordando la importancia de estar dispuestos a convencer y ser convencidos, resaltando que este elemento humano es crucial para la construcción de un sistema pensional equitativo y sostenible.

También invitó a todos los participantes del foro a trabajar juntos para labrar un futuro lleno de oportunidades y justicia para todos.

¿Propuestas financieramente viables?

Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda y Crédito Público, afirmó que en la reforma pensional no hay ajustes de los regímenes especiales y efectuados que son los que tienen el impacto fiscal del país.

“Eso quiere decir que no se está reformando el régimen de los empleados públicos que ya está marchito en el Fondo de Pensiones Públicas del Nivel Nacional de Colombia (Fopep) ni en el Fondo Nacional de Pensiones de las Entidades Territoriales (Fonpet). Tampoco está incluido el régimen de la Caja de Retiro de las Fuerzas Militares (Cremil), la Caja de Sueldos de Retiro de la Policía Nacional (Casur) ni el Fondo del Magisterio (Fomag)”, afirmó.

Explicó que esos cinco regímenes pensionales le representan a las arcas públicas 3 puntos del PIB. “Ninguno de ellos tiene fondo acumulado, es decir, que lo que recaudan por cotizaciones no les alcanza para pagar pensiones y el Estado pone la diferencia que es prácticamente todo”, sostuvo.

Agregó que en el proyecto como está radicado por el Gobierno con un umbral de tres salarios y el cálculo del costo fiscal que se tiene, hasta el año 2070 la reforma generaría ahorros para el Estado.

“Decimos que de aquí al 2070, o sea en 40 años, el fondo que se cree va a hacer todo el ciclo: va a crecer, llegará a su cumbre y en el 2070 comenzará a agotarse. Por ende, en ese momento otro Gobierno deberá hacer otra reforma, ninguna reforma es infinita”, concluyó.