Un nuevo 'traspie' ha tenido el debate de la reforma a la salud en Plenaria de Cámara, a pesar de que se pasó 5 horas en el parlamento, no se abordó ningún artículo del proyecto de ley, solo se presentó votación de impedimentos en cinco bloques diferentes.

Y es que este articualdo no ha podido avanzar por diversos obstáculos, como la existencia de una ponencia negativa por parte de la oposición.

En la jornada se presentó un retraso pues estaban únicamente 6 representantes, hasta que no hubo garantía de quórum no se inició el debate.

Se dio inicio con la votación de impedimentos, donde incluso bancadas de la oposición aseguraron que este proceso es una alternativa para "entorpecer" la discusión.

Por otro lado, el representante del directorio conservador Ape Cuello, solicitó que el día se hoy solo se votara por los impedimentos y no por la reforma a la salud, pues los diversos escándalos del gobierno Petro frenan el proceso, tal y como lo habían informado el presidente de la Cámara, David Racero. Dicha solicitud no fue tenida en cuenta.

Cabe recordar que una de las razones que bloquearon el curso de esta iniciativa en el segundo debate, que comenzó el jueves 1° de junio, fueron los impedimentos votados por un grupo de congresistas que se resiste a su aprobación por considerarla “retrógrada” e “ilegítima”.

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La recusación a David Racero, presidente de la Cámara de Representante e integrante del Pacto Histórico, se ha convertido en otro motivo de retraso. Dicho recurso fue interpuesto por Enrique Gómez Martínez, director de Salvación Nacional, argumentando que familiares de Racero tienen vínculos con el sistema de salud.

“Presento la presente recusación, por cuanto los contenidos regulatorios y normativos en general del proyecto de ley, cuya discusión en plenaria inicia, generan beneficio económico directo y ostensible a su favor y el de sus familiares hasta en segundo grado de consanguinidad, como unos de los principales deudores morosos del sistema y a la vez, y de manera inexplicable, unos de los mayores prestadores de servicios de tratamiento oncológico al Sistema General de Seguridad Social en Salud”, reza el documento presentado por Gómez Martínez.

En reiteradas oportunidades, quienes hacen oposición al proyecto plantean una discusión mucho más amplia, que incluya la participación de pacientes, gremios médicos y científicos para mejorar la iniciativa.

Y aunque reconocen que el sistema de salud requiere cambios estructurales, sugieren que dichas enmiendas se realicen de manera consensuada y sustentadas con argumentos técnicos y científicos, a fin de lograr un articulado que beneficie a toda la población.