Si las protestas estudiantiles se continúan extendiendo y los desórdenes en algunos campus universitarios se agravan, la posibilidad de aplazar los semestres o incluso suspenderlos definitivamente empezaría a ser analizada al más alto nivel del Gobierno. Incluso, no se descarta que la Fuerza Pública tenga que ingresar de manera permanente a algunas instituciones para garantizar que los alumnos y profesores que quieren proseguir con el calendario académico no se vean afectados o boicoteados por los grupúsculos de encapuchados que encabezan las protestas y que en no pocas ocasiones, según lo sospecha el Gobierno, estarían infiltrados por milicias guerrilleras.
Carros incautados
La posibilidad de que muchas de las camionetas que les han sido decomisadas a los narcotraficantes y guerrilleros sean puestas al servicio de los congresistas es una de las propuestas que estudian algunos parlamentarios que buscan opciones para evitar que el Senado y la Cámara de Representantes tengan que abrir millonarias licitaciones para dotar de automotores a los 268 “padres de la Patria”. “Se buscaría que una firma privada especializada revisara las camionetas, las pusiera a punto y, con las garantías del caso, las entregara luego a las direcciones administrativas de las Cámaras”, precisó un parlamentario, que pidió la reserva de su nombre.
Firmes por el fuero
En “plantón firme y alineado”. Esa fue la idea que ayer un general retirado puso sobre la mesa para que los uniformados, de bajo y alto rango, que ya no están en servicio manifiesten ante el Congreso la urgencia de volver a fortalecer el fuero militar y redefinir la justicia penal militar. Se trataría de convocar a generales, almirantes, coroneles, mayores, tenientes, sargentos y otros ex integrantes de la Fuerza Pública para que en la Plaza de Bolívar hagan una especie de “parada militar”, silenciosa, ordenada e institucional, sin arengas ni pancartas, para enviar un mensaje a los senadores y representantes en torno de la urgencia de recuperar el fuero militar.
¿Mil presos?
Mientras que en el Congreso se abre paso el proyecto de ley que aumenta el castigo a los conductores ebrios, un senador, en conversación informal con algunos periodistas, advirtió que si una norma como la mencionada entrara en vigencia, entonces las más de mil personas que fueron multadas en un puente festivo reciente por dar positivo en los exámenes de alcoholemia y recibieron los respectivos comparendos e inmovilización de vehículos, “tendrían que haber ido presas… Dígame qué sistema carcelario podría resistir que en un fin de semana más de mil personas sean internadas… También hay que pensar con pragmatismo cuando se habla de elevar ciertas conductas a delitos”. Vea pues.
Firmas contra firmas
El pulso político y legislativo respecto de la penalización total del aborto, tal como lo propone un acto legislativo que impulsan congresistas conservadores y de La U, se podría escalar, luego de que algunos parlamentarios liberales y del Polo indicaron que así como la iniciativa prohibicionista recogió cinco millones de firmas para respaldarlos, los partidarios de autorizar la interrupción del embarazo en los tres casos señalados por la Corte Constitucional también podrían lanzarse a las calles para recaudar un número similar de firmas.