Las autoridades estadounidenses están muy pendientes de la estructuración y arranque de la nueva agencia de Inteligencia nacional que reemplazará al cuestionado DAS. Según trascendió, la idea es una vez la entidad arranque se renueve la cooperación de alto nivel entre ésta y varias de las principales agencias de seguridad norteamericana. Sin embargo, para que ello sea posible, la Casa Blanca necesitaría primero una especie de ‘visto bueno’ previo del Congreso, toda vez que allí el tema de que el DAS habría utilizado dineros y recursos tecnológicos aportados por E.U. para perpetrar las chuzadas, aún sigue causando mucha polémica y prevención.

Lo está pensando

Y hablando de nuevas entidades, esta vez de la resurrección del Ministerio de Trabajo, las hipótesis de los gabinetólogos apuntaban ayer a que el presidente Santos ya le habría ofrecido la cartera a un dirigente nacional, quien pidió algunos días para dar una respuesta definitiva. Es claro que el agitado ambiente laboral, con paros y protestas a bordo, y el inminente arranque de temas tan complejos como una reforma pensional o la negociación del alza salarial para el próximo año, debe poner a pensar a cualquiera a quien le ofrezcan montarse en un caballo tan brioso como será el nuevo Ministerio.

Cumbre urgente

La posibilidad de que antes de terminar este mes los presidentes Santos y el venezolano Hugo Chávez se puedan reunir, parece abrirse camino. Es más, en círculos políticos y periodísticos en Caracas se rumora que Chávez es el más interesado en que se concrete esa cumbre, e incluso que la misma se pueda dar en la capital venezolana o en la frontera, pues el Palacio de Miraflores urge enviar a la ciudadanía, más aún a un año de las elecciones, una señal de que el Jefe de Estado, pese a la enfermedad que lo aqueja, ya retomó su agenda internacional y con un tema de primera línea, como lo es la relación con Colombia.

Oyen pero no acatan

En los pasillos de la Casa de Nariño circula la versión de que el presidente Santos y sus principales asesores ya denotan preocupación por la forma en que los senadores y representantes que pertenecen a la Unidad Nacional han puesto muchos peros y trabas a proyectos que, se suponía, habían sido discutidos y “bendecidos” en el pleno de la coalición gubernamental pero que una vez empiezan a ser analizados en las comisiones y plenarias parlamentarias comienzan a evidenciar múltiples fisuras y contradicciones de fondo. Incluso en el Congreso se afirma que hay más de un partido tratando de ‘medirle el aceite’ al Ejecutivo. ¿Será?

‘Refundación’ valluna

Un veterano dirigente político valluno, que hace pocos años decidió retirarse a sus cuarteles de invierno, considera que la crisis de legitimidad electoral y de representación democrática en su departamento es tan grave, que ya no se puede enfrentar con pañitos de agua tibia, sino que exige una especie de refundación. “… Aquí se rasgan las vestiduras quejándose de que la mafia infiltró la política, pero no se detienen a ver que esta es apenas una minoría frente a los centenares de miles de votos que elección tras elección escogen a los mismos con las mismas”, precisó el dirigente, que pidió no ser identificado.