NO ES VIABLE. La sugerencia que hiciera el presidente Gustavo Petro, el lunes en la tarde durante la ceremonia de posesión de una magistrada del Consejo Superior de la Judicatura, en torno a que en Colombia podría evaluarse, tal como se acaba de aprobar en México, la elección popular de jueces, no cayó bien ni en las propias toldas del Pacto Histórico, en donde algunas voces consideran que la idea no tiene calado alguno en un país con una tradición institucional tan sólida en materia de separación de poderes. Incluso, se recordó que el gobierno del ahora expresidente Andrés López Obrador pudo pasar esa controvertida ley porque tenía mayorías legislativas, cosa que no ocurre con la Administración Petro.

VAGÓN DE EN MEDIO (II). Se le preguntó a un experimentado exdiplomático y profesor de relaciones internacionales en una prestigiosa universidad de la capital del país cuál creía que era la razón por la cual el tema Colombia no asomó en la campaña presidencial de Estados Unidos, que entró ya en la recta final en medio de un cabeza a cabeza entre los candidatos Donald Trump y Kamala Harris, que prácticamente no han mencionado una sola vez el nombre de nuestro país, pese a que sí han hablado del problema migratorio, la criminalidad asociada a este, el aumento de las muertes por drogas, la crisis venezolana y la necesidad de mantener la influencia geopolítica en América Latina, sobre todo para frenar la creciente presencia de intereses chinos.

VAGÓN DE EN MEDIO (II). “… No me sorprende para nada… Colombia ya no tiene el mismo peso geopolítico que en las últimas dos décadas del siglo pasado ni en la primera de este… Nosotros hablamos aquí de que Colombia es el principal socio geopolítico de la Casa Blanca en Suramérica y de la alianza de alto nivel entre Bogotá y Washington… Eso no es tan así… Las prioridades de Estados Unidos han cambiado aceleradamente en materia internacional, sobre todo por las coyunturas bélicas… Los problemas internos en Norteamérica en los que hay algún tipo de protagonismo o participación colombiana, son abordados más desde el punto de vista de contención de los efectos internos que en la óptica de atacar el origen… No solo Colombia, sino toda Latinoamérica están ahora en el vagón de en medio de las urgencias de la potencia estadounidense”, explicó el catedrático.

APAGÓN ESTRUCTURAL. Un ex viceministro de Minas les dijo a varios empresarios que era imperativo que fueran asegurando infraestructura y equipos de generación (solar o de plantas portátiles) para afrontar meses duros en materia de suministro del servicio. Les explicó que el problema de oferta y demanda energética es estructural, no coyuntural, razón por la cual no importa qué tanto llueva al cierre de 2023 o comienzos de 2024, o si hay perspectivas petroleras gasíferas y petroleras buenas o malas a mediano plazo, ya que el déficit es en el aquí y ahora. Incluso, el exfuncionario recomendó que aquellas empresas que tengan la capacidad de implementar planes de reconversión productiva, los aceleren lo más posible a corto plazo.