RESPETO A VOLUNTAD POPULAR. La crisis venezolana por el denunciado fraude electoral en los comicios presidenciales del pasado 28 de julio, que dieron como ganador al jefe del régimen dictatorial Nicolás Maduro, cuyo triunfo ha sido puesto en duda por la oposición y la mayoría de la comunidad internacional, continúa siendo el centro del debate en todo el continente. Por ejemplo, el cardenal de Venezuela, monseñor Diego Padrón, y el exprocurador Fernando Carrillo, vicepresidente del Grupo Prisa, hicieron parte de un foro al respecto. El jerarca católico inició la disertación expresando que lo que se dio el pasado 28 de julio fue la auténtica soberanía popular. Sobre la contienda entre Maduro y el candidato opositor Edmundo González Urrutia, el cardenal señaló que “no hay otra verdad, la mayoría del pueblo no tiene duda, ni confusión sobre los resultados de dicha elección”. Acotó que la verdad no puede ser objeto de discusión académica, ni de negociación política, en detrimento de la voluntad popular.
CREAR CONFUSIÓN. El cardenal Padrón sostuvo que la confusión la pretende crear el gobierno chavista y algunos aliados internos y externos al no reconocer los resultados conocidos de las actas de las mesas de votación publicados por la oposición ganadora. Recalcó que la ciudadanía ha tenido un comportamiento cívico y electoral ejemplar. Insistió el máximo jerarca de la Iglesia Católica en Venezuela que “el Tribunal Supremo de Justicia pudiera anular la elección y los ciudadanos opositores perderían su voto”.
BRUTALIDAD Y AUTORITARISMO. Para el exministro, exprocurador y exembajador Carrillo resulta claro que la fragilidad o la debilidad de la democracia no la supera la brutalidad del autoritarismo. Indicó que este no es un tema que está metido dentro de la polarización, ni tampoco es un tema de derechas contra izquierdas, tampoco un asunto de conservadores contra progresistas. “Esto es un asunto de democracia contra anti-democracia, de defensa de la dignidad humana, las libertades, los derechos fundamentales, la ética, de la defensa de la verdad frente a la mentira y las verdades a medias”, dijo.
TERROR COMO ARMA POLÍTICA. Para el exministro Carrillo la institucionalidad democrática de Venezuela ha sufrido uno de los peores golpes, ha sido cooptada y destruida. “Se creyó que aquí no iba a haber ninguna negociación y que Nicolás Maduro iba a entregar el poder pacíficamente, que iba aceptar la voluntad del pueblo venezolano. Eso no se dio y la regla es el miedo, el hostigamiento, la violencia y el terror como arma política”, agregó. Concluyó el vicepresidente del grupo Prisa que esta situación invita a una gran reflexión de la izquierda. “Gabriel Boric, presidente de Chile, se ha desmarcado de la situación de Venezuela, en cambio los presidentes de México, Colombia y Brasil creen en la negociación y el diálogo. No sabemos de qué tipo, no sabemos si vaya a presentarse otro para hacerle ‘conejo’ al diálogo, como se lo hizo Nicolás Maduro a los Estados Unidos en las conversaciones de Barbados, como se lo hizo también a la comunidad internacional”.