Pese a que las directivas de este partido insisten en que en las elecciones regionales y locales les fue muy bien, lo cierto es que esa colectividad tiene varias crisis internas, algunas de las cuales podrían afectar su potencial político y unidad de acción en el corto plazo. De un lado, están las denuncias graves del senador Armando Benedetti contra el actual director del partido, Juan Lozano, a quien acusó de haber feriado avales en los pasados comicios a cambio de apoyos para ser reelegido al frente del cargo en las próximas semanas. Benedetti también dijo que está indagando sobre el manejo del presupuesto del partido para establecer si ha sido absolutamente transparente.
Mala hora de La U (II)
La segunda crisis que asoma en La U tiene que ver con el proceso de reunificación del Partido Liberal, que tiene en la mira la posibilidad de reenganchar a varios de los congresistas que hoy militan en la colectividad uribista. Si bien la estrategia ya se sabía de antemano, lo nuevo es que desde las toldas rojas se cursó formal invitación a varios parlamentarios de La U para que asistan a la constituyente liberal que se llevará a cabo en diciembre. Aunque Lozano descarta que La U vaya a sufrir deserciones hacia el liberalismo, lo cierto es que varios parlamentarios del uribismo podrían asistir, en calidad de observadores, al cónclave liberal. No hay que olvidar que ex presidentes como Samper y Gaviria han sugerido que el proceso de reunificación liberal bien podría ser liderado por el propio Santos, quien fundó La U por encargo del ex presidente Uribe, pero, al igual que éste, es de clara estirpe liberal.
Mala hora de La U (III)
No para allí el preocupante panorama de La U. Es claro que el pulso político entre el ex presidente Álvaro Uribe y el mandatario Juan Manuel Santos por manejar la colectividad es cada día más duro. Si bien el titular de la Casa de Nariño ha logrado maniobrar para mantener alineada la bancada, en los pasillos del Congreso es vox populi que Uribe tiene línea directa con varios senadores y representantes, y que éstos han encabezado varios conatos de rebelión a las directrices del Ejecutivo, sobre todo en materia de proyectos clave. Es más, el propio Santos les ha terminado advirtiendo a varios de los integrantes de la bancada de La U: se está con el Gobierno o contra él.
Mala hora de La U (IV)
El tempranero debate por la puja presidencial en 2014 también está empezando a generar roces en el interior de la colectividad. Es claro que las tendencias santista y uribista en La U tienen posturas distintas al respecto. La primera es partidaria de impulsar desde ya la posibilidad de que el Jefe de Estado repita en el cargo, mientras que la segunda ha dado muestras de querer un relevo en la Casa de Nariño y se sabe que Uribe ya tiene una baraja de posibles candidatos que apoyaría, entre ellos uno de sus ex ministros. Además, a los uribistas no les gustó para nada que fuera Rafael Pardo, ex jefe único del liberalismo y ahora ministro de Trabajo, quien primero pusiera sobre la mesa la necesidad de evaluar la reelección de Santos. Incluso, el propio Uribe calificó esa designación en el gabinete de “hostil” al uribismo.