Continúan las labores de atención en varias zonas del país que fueron azotadas en las últimas horas por fuertes lluvias y vendavales, que ya dejan miles de personas damnificadas, de acuerdo con la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo.
Una de las zonas donde se presentó mayor afectación fue en Chocó, en los municipios de Condoto, por vendaval, y en Juradó, por mar de leva. En la primera población dan cuenta de por lo menos 4.200 personas afectadas y unas 800 casas destechadas, mientras que en la segunda, al menos 591 familias se vieron afectadas por el fuerte oleaje en la región.
Los habitantes de estos municipios piden al Gobierno nacional que ponga en marcha el plan de ayudas, puesto que hasta el momento la atención no ha sido oportuna.
Por otra parte, en el departamento de Antioquia al menos unas 390 casas perdieron sus techos por las fuertes lluvias acompañadas por vendavales, que tienen en vilo a por lo menos 970 personas en el municipio de Valdivia, en el norte del departamento.
Las víctimas de estos hechos están siendo ubicadas en albergues temporales. En las próximas horas una comisión interinstitucional conformada por miembros de la Cruz Roja, la Defensa Civil y el Dapard llegarán a esa población para atender la emergencia y adelantar un censo de los afectados.
En Amazonas, la Ungrd también informó que ha venido entregando asistencia humanitaria tras el desbordamiento del río Amazonas, consistente en kits de mercado, cocina, noche, con el objetivo de beneficiar a 1.168 familias afectadas por la primera temporada de lluvias 2015, adicional a dichas ayudas, particularmente en Leticia y Puerto Nariño, se ha hecho entrega de materiales para la reparación de viviendas (láminas de zinc, tablas, listones, entre otros). También se fortalece la sala de crisis del Departamento y las operaciones de asistencia en Leticia, con la entrega de un bote, destacando una inversión superior a los 835 millones de pesos en esta operación de atención a la emergencia.
En el departamento de Antioquia continúa el proceso de recuperación de los municipios de Andes y Betania, afectados por la creciente súbita del río Tapartó. Las acciones consisten en la construcción de 40 viviendas en el municipio de Andes y dos en Betania. Así mismo la recuperación de dos puentes peatonales que resultaron averiados por esta creciente. En total la Unidad destinó 1.800 millones de pesos para esta intervención.
Los incendios también han puesto en alerta a las autoridades de socorro. Recientemente fueron controlados dos en Isla Salamanca, Magdalena y Santa Elena en Antioquia. Todavía persiste uno en el municipio de San Calixto, Norte de Santander.
Mina Caldas
De igual forma, la Unidad indicó que continúan las operaciones de búsqueda y rescate de los 10 mineros que aún se reportan como atrapados tras la inundación de la mina El Túnel. Para esto, la entidad ha estado acompañando el proceso de coordinación de la operación y ha dispuesto de implementos y equipos como motobombas para agilizar el proceso de rescate de estas personas.
“Se adelantan obras de contención a la orilla del río Cauca con el fin de evitar filtraciones de agua al interior de la mina. Esto es complementario al trabajo que se ha realizado durante esta operación con 22 motobombas, que han succionado el agua de los socavones de la mina y dos plantas generadoras de energía de alta potencia”, dice.
Las acciones en la mina El Túnel continúan y se mantienen de forma permanente las 24 horas del día, todo esto bajo los parámetros técnicos de seguridad estipulados por la Agencia Nacional Minera -ANM-. El trabajo es adelantado por 37 socorredores mineros, 20 de estos de la comunidad, avalados por la ANM.
El Director de la Unidad, Carlos Iván Márquez, entregó la Asistencia Humanitaria de Emergencia -AHE- a las familias de los mineros fallecidos ya rescatados, a las familias de las personas que aún se encuentran atrapadas y a los 20 mineros que voluntariamente apoyan las labores de búsqueda y rescate.