En el día mundial del árbol, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), dio a conocer que en el último año más de 3.100 hectáreas de ecosistemas estratégicos entre los que se cuentan bosque seco, bosque húmedo tropical, bosque alto andino, bosque premontano y páramo, fueron conservadas a través del programa BanCO2, un sistema de pagos por servicios ambientales que le apunta a aumentar la cobertura forestal y a proteger estos corredores ecológicos.
Marco Tibaquicha, profesional de la CAR y quien ha acompañado a las más de 132 familias vinculadas a este convenio durante el último año, manifestó que las hectáreas conservadas se distribuyen en 22 municipios de Cundinamarca, 2 de Boyacá (Ráquira y Saboyá) y 3 localidades rurales de Bogotá (Santafé, Usme y Sumapaz) donde las familias campesinas beneficiadas reciben un incentivo económico mensual a cambio de una labor de cuidado y conservación.
“Esta labor de preservación se traduce en frenar la expansión de la frontera agrícola apoyando en su lugar labores de siembra de árboles y conservación”, puntualizó el funcionario, quien además resaltó que gracias a esto se han podido combatir problemáticas como la erosión, la del aire, la escasez de agua e incluso la falta de alimento para la fauna silvestre.
- Le puede interesar: Científicos recurren a la humilde ostra para salvar las costas de California
30 mil árboles se cultivan en viveros forestales
Otra de las estrategias de la CAR para aumentar la cobertura forestal en su jurisdicción es la implementación de viveros forestales.
Con cerca de 60 viveros creados en trabajo con la comunidad de algunos municipios como Sibaté, Granada, Pacho, Zipaquirá, Cabrera, Albán, Supatá, Machetá, Chaguaní, Nilo y Viotá, la entidad se prepara para obtener al menos 500 plántulas por vivero, esto es alrededor de 30 mil árboles que una vez listos, serán plantados en ecosistemas afectados por explotación forestal ilícita y la deforestación.
Además, la entidad informó que adelanta un plan piloto con 7 empresas del sector floricultor, vinculadas a la Asociación Colombiana de Exportadores de Flores (Asocolflores), donde se instalaron bancos de propagación para contribuir al repoblamiento de especies nativas de flora en el territorio.