Gente. Dubian, el aserrador que ahora evita que talen bosques | El Nuevo Siglo
DUBIAN JIMÉNEZ pasó de talar árboles a cuidar 14 hectáreas de bosque en San Luis, Antioquia. /Fotos Archivo particular
Viernes, 1 de Diciembre de 2023
Redacción Medio Ambiente

NUNCA LE pasó por la mente que un día iba a guardar la que era su compañera inseparable, su sierra, para dedicarse a cuidar los bosques que antes talaba para ganar el sustento. Esto aconteció con Dubian Albeiro Jiménez Murillo, quien desde hace ocho años inició el proyecto con tres hectáreas y hoy ya tiene 14, por lo que recibe una compensación por servicios ambientales.

“El BancO2 es una iniciativa de protección de bosques que beneficia a familias que están en el campo. Es una forma de proteger el medio ambiente, especialmente lo que son las zonas boscosas”, explica este hombre que dice que “antes mi profesión era aserrador y oficios varios”.

Añade que “mi economía dependía del aserrín, pero me metieron al programa BancO2 con el fin de que dejara de talar los bosques. Esa es una gran ayuda para los campesinos porque en la parte rural la economía es muy difícil. Con eso se dio la oportunidad de formar unos proyectos, que me cambiaron la vida”.

Dice que “lo que es el bosque se recupera mucho y las grandes beneficiadas son las fuentes hídricas y la fauna. Prácticamente yo dejé el aserrín y ahora cuido los árboles”.

“La protección de los bosques y en general del medio ambiente es importante porque purifican el aire, generan oxígeno, tenemos las fuentes de agua que se van enriqueciendo y genera bienestar para la fauna”, asevera.

Señala que “definitivamente cuidar la naturaleza es una forma de vida. En el país hay unas 3.000 familias que lo han entendido así y participan del proyecto que, en mi caso, es impulsado por Cornare y cuenta con el apoyo de la empresa privada, entre otras de EPM y de particulares.

Indica que la idea de trabajar en defensa del medio ambiente “surgió debido a la deforestación. Eran mucho los árboles que se talaban y el daño que se causaba. Con BancO2 pago por servicios ambientales, auspiciado por la empresa privada a través de Cornare y Más Bosques se han logrado recuperar muchas hectáreas y restaurar otras tantas”.

Explica que “BancO2 es una estrategia de pago por servicios ambientales de carácter voluntario, implementada desde 2016 a través de la cual se entrega un incentivo a las familias campesinas que tengan dentro de sus predios, ecosistemas estratégicos y estén dispuestos a conservarlos”.

 

En San Luis

El predio de Dubian está ubicado en el municipio de San Luis, vereda La Josefina y es una zona de vida de bosque húmedo tropical, a una altura de 875 metros sobre el nivel del mar.

“El proyecto conmigo inició en el 2015, de ahí en adelante hemos estado trabajando en el cuidado del bosque, pero, además, adelantamos actividades alternativas. Se cultivan peces, se levantan cerdos, pollos de engorde, marranas de cría y una extensión de caña en mediana escala y una parcela de jagua y café”, manifiesta Dubian.

Explica que “la motivación que tuve para dejar de aserrar fue la ayuda de BancO2 que nos brindó esa oportunidad con unas bonificaciones de pago por servicios ambientales, entonces ya se cambió toda la actividad de aserrío por una sana para el medio ambiente”.

“En mi predio hay ocho fuentes de agua, nacimientos que no son muy grandes, pero que surten en la parte baja a una población de aproximadamente 20 familias. Si talamos los árboles esos nacederos van a desaparecer y el daño es para todos”, dice.

Agrega que, en su predio de 18 hectáreas, 14 de ellas intocables, “hay árboles de abaco, dormilones, majaguas, algo de cedros, siete cueros…, son muy diversas las especies, también hay cominos”.

 

Satisfacción

Comparte que: “La satisfacción más grande que me ha dado este trabajo es que cambió totalmente mi vida. Atrás quedó la actividad de aserrío. Pasé de estar explotando todos los bosques, de aniquilarlos con la tala a cuidarlos. Me cambió totalmente la vida porque ya no volví a usar la sierra y me convertí en conservador del medio ambiente, cuidador de los bosques, ya buscando otros recursos que son viables más amables con la naturaleza”.

Dice que “decepción no hemos tenido en el desarrollo de esta labor. Por el contrario, me ha dado la satisfacción de hacer algo por la naturaleza, por el bienestar de la población actual y para que el futuro de nuestros hijos sea sano, tengan agua y disfruten de lugares tan bellos como los bosques que cuido”.

Reconoce que el apoyo “de Cornare, Más Bosques, EPM y los privados, es fundamental. De pronto un poquito triste porque más empresas y el mismo Estado deberían ayudar más decididamente el cuidado del medio ambiente. Los campesinos que están protegiendo los bosques necesitan de esa ayuda porque a uno esa labor se le vuelve es una tenencia de algo que no genera recursos, no da ingresos de nada porque no se puede explotar la madera, eso deberían valorarlo”.

Expresa que en su caso “son 14 hectáreas de bosque, con diversidad de especies de fauna, a la que le estamos dando un hogar y el paisaje es hermoso, pero solo nos quedan cuatro hectáreas para explotar en las actividades alternativas que tenemos, eso es poco. Sin embargo, creo que vale la pena”.

“No hay nada más satisfactorio que observar la montaña, ver que es un lugar sano, que se respira aire puro, que los animales tienen un hábitat y que la población tiene su agua cristalina”, expresa.

Añade que la sierra que lo acompañó en muchas faenas y con la que derribó muchos árboles para convertirlos en madera, “seguirá archivada. Lo mío ya no es la economía del aserrín. Cuidar los bosques y el medio ambiente es un estilo de vida y me gusta”.

“El proyecto de BancO2 se adelanta en varias regiones del país y ojalá siga creciendo y cada día se vinculen más empresas a apoyarlo, porque así revertimos la deforestación y le garantizamos un ambiente sano a nuestras familias”, insiste.

Recuerda que “este es un programa que se está replicando en el Perú y seguramente lo van a implementar en otros países porque son muchos los beneficios para el medio ambiente”.