Durante varios años, la energía que consumían los cerca de 50 millones de colombianos provenía de hidroeléctricas a gran escala o de combustibles fósiles, los cuales, a causa de su extracción, producción y uso, impactaba de manera contundente en la salud de las personas y el medio ambiente en general. En esa línea, y a causa de la posible escasez de ese tipo de recursos, se comenzó a vislumbrar la posibilidad de extraerla mediante otras fuentes con una menor afectación ambiental.
En ese sentido, los países han iniciado un proceso de transformación para implementar y fomentar el uso de energías limpias, y Colombia, según datos del Banco Mundial, emite cerca de 77 millones de toneladas de CO2, pero justamente para hacerle frente, avanza en una transición energética hacia la inversión y puesta en marcha de tecnologías alternativas para la producción de esta con recursos renovables.
En medio de este largo camino, las empresas, sin importar el sector, habían sido reconocidas precisamente por ser una de las principales fuentes de producción de gases efecto invernadero, debido a su alto consumo de energía; pero en los últimos años y basados en su compromiso de con el medio ambiente, han sido un pilar fundamental en la implementación de alternativas para producir su propia energía.
“Se debe ser conscientes de que el país avanza en una transición energética y las empresas debemos ser los principales promotores e impulsadores de aquellos mecanismos que ayude a un mejor planeta. Esto no solo permite un crecimiento en la sostenibilidad de nuestro país, sino también en un alivio para el bolsillo de las empresas, puesto que a largo plazo se genera un aumento en la competitividad y disminución de costos en pago de energía”, explicó Giovanni Mancipe, coordinador de mantenimiento de Compensar.
De acuerdo con informes de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y la Agencia Internacional de Energía (AIE), el sector energético es el mayor contaminante en el mundo aportando el 76 % de los desechos y CO2. En esa línea y el compromiso con el medio ambiente, Compensar, la Caja de Compensación más joven de Colombia y que recientemente cumplió 45 años de funcionamiento, inauguró 160 paneles solares en dos de sus principales bloques de la sede principal en la carrera 68.
“En cada bloque se instalaron 80 paneles con los cuales se genera el 100 % de la energía de cada uno de ellos, aportando así a la estrategia que se viene desplegando desde hace siete años como parte de nuestro compromiso por el bienestar del medio ambiente. No solo son estos paneles, sino los que también se tienen para calentar el agua del hotel Lagosol, o con los que cuentan las 12 estaciones de carga para dispositivos que tenemos en seis de nuestras sedes”, agregó Giovanni Mancipe, coordinador de mantenimiento de Compensar.
Con la instalación de estos nuevos paneles, y gracias a la inversión que asciende a $250 millones, se disminuye de manera importante el impacto en el medio ambiente reduciendo la huella de carbono con el equivalente a 14 toneladas de CO2 al año, esto equivale a la tala de 700 árboles o a la energía generada por 30 hogares promedio en Bogotá. Adicionalmente tienen la mira puesta en el futuro, la entidad planea nuevas implementaciones en sus edificaciones para 2024-2025. La evaluación de costos y otros factores será crucial en la toma de decisiones.