Bótox: guía para resolver sus dudas sobre este tratamiento “antiedad” | El Nuevo Siglo
La toxina botulínica tipo A, conocida popularmente por uno de sus nombres comerciales, es un veneno neurotóxico muy efectivo que inhibe la transmisión de la señal en la placa neuromuscular, produciendo una parálisis muscular.
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Jueves, 27 de Enero de 2022
Agencia Europapress

Cada vez se oye más la palabra bótox y su uso está más extendido, ya que quienes lo han probado no dudan en confesar que es su secreto para lucir una piel tersa, en la que el paso del tiempo se ha detenido de modo “milagroso”. Pero, ¿sabemos qué es, para qué está indicado y si es compatible con otro tipo de tratamientos estéticos?

Si tiene dudas con respecto al bótox, continúe leyendo y no se pierda esta completa guía para convertirse en un “experto” en uno de los tratamientos “antiedad” más populares del momento, del que la doctora Paloma García nos da todas las claves.

La toxina botulínica tipo A, conocida popularmente por uno de sus nombres comerciales, bótox, es un veneno neurotóxico muy efectivo que inhibe la transmisión de la señal en la placa neuromuscular, produciendo una parálisis muscular que tiene un impacto directo en la formación de arrugas y líneas de expresión.



¿Para qué necesidades está indicado el bótox?

Arrugas de la frente, arrugas periorbitarias o conocidas como pata de gallo y párpado inferior, arrugas del labio superior o “código de barras” y del labio inferior, elevación de las cejas y glabela, arrugas de la nariz, sonrisa gingival, bandas plastismales o arrugas del cuello, mentón con celulitis o mentón empedrado, surco nasogeniano o surcos que nacen en la comisura de la boca.

¿Tiene otras finalidades, además de la estética?

Sí, se emplea en medicina como opción terapéutica para tratar la sudoración excesiva (hiperhidrosis), el estrabismo, la distonía, el bruxismo, el dolor miofascial, los problemas de vejiga hiperactiva y las cefaleas crónicas.

Si ya hay arruga, ¿sirve de algo recurrir al bótox?

Absolutamente. Siempre sirve de algo recurrir al bótox para reducir arrugas que han aparecido por lo signos de expresión. Aunque estas lleven mucho tiempo marcadas.

Es cierto que el grado en el que esa arruga se va a reducir dependerá de su profundidad y de la potencia muscular previa al tratamiento. Hay arrugas finas que desaparecerán por completo y otras más pronunciadas que se aplanarán considerablemente, pero no llegarán a eliminarse.

¿Cuánto dura el resultado?

La toxina botulínica tiene una duración aproximada de entre cuatro y seis meses. No obstante, a medida que se realice el tratamiento estos tiempos normalmente se alargan, pudiendo llegar a tener el efecto hasta el doble de tiempo.

¿Cómo se personaliza el tratamiento de bótox?

Para lograr los mejores resultados estéticos con la toxina botulínica, el profesional debe tener un conocimiento total de la estética facial, así como su musculatura completa. Y en su aplicación se debe diferenciar el sexo y la edad del paciente para ajustar la dosis que se pondrá, ya que de ello dependerá que el resultado final sea natural o se perciba antinatural y, por lo tanto, antiestético.

¿Existe alguna contraindicación?

Como cualquier tratamiento médico, existen contraindicaciones para su aplicación: miastenia grave, debilidad o fatiga muscular, enfermedades neuromusculares, alergia a la toxina botulínica, dismorfofobia, embarazo o lactancia.

Además, hay ciertos efectos adversos que pueden estar presentes, aunque no es lo normal, tras la aplicación de la toxina botulínica, que son: dolor de cabeza, dolor, inflamación o picor en la zona donde se ha inyectado el producto o náuseas.

Además, el bótox es compatible con otros tratamientos, tanto inyectables como más superficiales.