Tres son las grandes apuestas que tiene el Gobierno para redoblar la efectividad de la lucha antidroga en el año y medio que le resta de mandato.
De un lado, está a la espera de poder reiniciar antes de mediados de este año la fumigación aérea con glifosato sobre los narcocultivos. De hecho, ya el Ministerio de Justicia publicó días atrás el borrador del decreto que regula el control de los riesgos para la salud y el medioambiente en el marco de la erradicación de cultivos ilícitos mediante el método de aspersión aérea.
Como se sabe, desde el segundo semestre de 2015 la aspersión aérea con este herbicida fue prohibida por el gobierno Santos, aduciendo un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre un riesgo cancerígeno. Desde la campaña el gobierno Duque había insistido en retomar esta herramienta, sobre todo porque recibió en agosto de 2018 más de 200 mil hectáreas de narcocultivos, que aumentaron exponencialmente desde 2013, cuando se habían reducido a 43 mil hectáreas.
Tras más de dos años de gestiones y mediando un auto de la Corte Constitucional, que fijó una serie de condiciones para poder reanudar las fumigaciones, el Gobierno, por fin, tiene el borrador del decreto, que ahora está sujeto a comentarios y podría ser emitido en las próximas semanas.
Aunque los ministros de Defensa y Justicia consideran que antes de mitad de año podría darse vía libre, lo cierto es que la puesta en marcha del Programa de Erradicación de Cultivos Ilícitos con Glifosato (Pecig) depende de la próxima publicación de estudios del Ministerio de Ambiente y el Instituto Nacional de Salud. A ello se suma que hay varios sectores que consideran que todavía falta mucho camino para poder volver a fumigar e incluso recomiendan al Gobierno que se resigne a que en el año y medio que le resta de mandato no podría activar esta herramienta.
Una segunda estrategia contra el narcotráfico fue lanzada el pasado 16 de febrero atrás por el nuevo titular de la cartera de Defensa, Diego Molano. Se trata de un Plan de choque de 100 días contra el Microtráfico, para realizar múltiples operaciones contra este delito, especialmente contra las denominadas “ollas”.
La estrategia se activó simultáneamente en 52 puntos del país y tiene tres ejes diferenciales de control y disuasión en parques y entornos escolares, apoyo con participación cívica y el desarrollo de operaciones para la reducción del delito. Mediante grupos de operaciones especiales se busca identificar y erradicar expendios, realizar investigaciones exprés para desarticular estructuras y reducir el tráfico de estupefacientes. Así mismo, la Fiscalía dispuso de 126 fiscales para la judicialización de estas estructuras delincuenciales.
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El Conat
La tercera estrategia activada este año en el marco de la lucha antidrogas se concretó ayer. El presidente Iván Duque lanzó el Comando contra el Narcotráfico y Amenazas Transnacionales (Conat), una fuerza élite que tiene como propósito golpear, doblegar y someter a las organizaciones del narcotráfico y del terrorismo.
En el Fuerte Militar de Tolemaida, donde tuvo lugar la presentación de este nuevo comando, el jefe de Estado resaltó que esta fuerza, conformada por 7.000 hombres y mujeres del Ejército, “nace con el propósito de doblegar, de golpear y someter las estructuras del narcotráfico y las amenazas transnacionales, ligadas a la explotación ilegal de minerales; al tráfico de especies, de personas, y, por supuesto, a cualquier forma transnacional del terrorismo”.
El Mandatario enfatizó que el Conat “irá sin contemplación a desmantelar las estructuras del narcotráfico del Eln, de la ‘Narcotalia’, las disidencias de las Farc, la ‘Oliver Sinisterra’, la ‘Dagoberto Ramos’, de ‘Los Pelusos’, de ‘Los Caparros’, del ‘Clan del Golfo’, y de cualquier forma de criminalidad”.
La estructura
El ministro Molano reveló que el Conat priorizará su accionar en "áreas identificadas como de gran influencia del narcotráfico como el Catatumbo, Cauca y Putumayo".
Insistió en que en Colombia las amenazas transnacionales comprenden, entre otras, el narcotráfico, la explotación ilícita de yacimientos mineros, extorsión, secuestro, tráfico de armas, municiones y explosivos, migración irregular y tráfico de migrantes, así como la presencia de grupos armados organizados (GAO), grupos delincuenciales organizados (GDO) y delincuencia organizada transnacional (DOT).
Por lo mismo, el nuevo Comando, que estará al mando del brigadier general Juan Carlos Correa, integra la División de Aviación de Asalto Aéreo, y está compuesto por unidades élite con capacidades distintivas para desarrollar operaciones militares especiales en todo el territorio nacional. Tres Brigadas Contra el Narcotráfico serán las encargadas de planear y conducir Operaciones Terrestres Unificadas (OTU); una Brigada Contra la Explotación Ilícita de Yacimientos Mineros, contribuirá en la protección y defensa del medioambiente y los recursos naturales renovables, y finalmente la Fuerza de Despliegue Contra las Amenazas Transnacionales será la encargada de combatir la extorsión, el secuestro, el tráfico de armas, municiones y explosivos y la migración irregular y tráfico de migrantes.
Más resultados
Duque señaló que el “narcotráfico es esa fuerza perversa que asesina líderes sociales, a quienes están en proceso de retorno en la legalidad y es la que pretende volver a sembrar horror, por eso hoy, la Fuerza Pública irá sin contemplación a destruir las estructuras del narcotráfico”.
El Presidente hizo un recuento de los resultados desarrollados por la Fuerza Pública en la lucha contra el narcotráfico durante su Gobierno, entre los cuales mencionó la incautación de más de 500 toneladas de droga, la erradicación manual de cerca de 130 mil hectáreas, la destrucción histórica de más de 830 laboratorios y la reducción exponencial de cultivos ilícitos.
Ya esta semana el jefe de Estado, al exponer ante la comunidad internacional, representada en el cuerpo diplomático acreditado en Colombia, lo que llamó 'Las 10 realidades’ en la implementación de la Política de Paz con Legalidad, Duque había redundado sobre los resultados antidroga de su mandato.
“El programa de sustitución de cultivos voluntario también ha hecho parte de nuestra agenda; una agenda que no tiene una visión única. Una agenda que es variada, donde tenemos la erradicación manual, el desarrollo alternativo, la sustitución, y donde nunca hemos dejado de contemplar la aspersión con precisión donde sea necesario”, dijo el Mandatario.
A ello se suma, según lo explicó esta semana el Ministerio de Justicia, que gracias a la política “Ruta Futuro” -creada para enfrentar el problema de las drogas- el Gobierno logró frenar la tendencia al aumento de las áreas afectadas por cultivos ilícitos, las cuales crecieron un 358% entre 2012 y 2017. Como ya se dijo, en 2020 la erradicación de este tipo de cultivos registró una cifra histórica de 130.147 hectáreas.
A mediados de este mes, esa misma cartera había anunciado que este año ya la productividad en erradicación de cultivos ilícitos ha aumentado un 83%. Incluso, con corte al 11 de febrero, se habían erradicado 7.234 hectáreas de cultivos ilícitos, más del doble que en el mismo periodo de 2020. También se han incautado 72.615 kilogramos de cocaína, 51% más respecto al mismo periodo del año pasado (48.093). En cuanto a narcolaboratorios, en mes y medio de 2021 se destruyeron 747, es decir 55% más respecto a 2020 (482).
A la fecha se encuentran en operación 96 Grupos Móviles de Erradicación (civiles contratados), 74 pelotones de soldados y policías que erradican manualmente y 10 pelotones del Programa de Erradicación de Cultivos Ilícitos mediante Aspersión Terrestre con Glifosato.