En estas dos semanas se definirán los nombres a la Vicepresidencia que acompañarán a los candidatos a la Presidencia de la República en las elecciones de este año, pues el plazo para inscribir las fórmulas vence el próximo viernes. Aunque los tres aspirantes que resulten triunfadores en las consultas interpartidistas del 13 de marzo podrán hacerlo hasta el 18 de este mes.
A pesar de que la inscripción de candidatos a la Presidencia de la República se abrió el pasado 29 de enero, como casi siempre ocurre dejaron para los últimos días para hacerlo.
Mientras tanto, los aspirantes se han dedicado a desarrollar una campaña con furor por diferentes regiones del país, presentando sus propuestas de gobierno, asistiendo a foros y debates, así como concediendo entrevistas. En este lapso casi nadie habló de quién lo acompañará a la Vicepresidencia, como si se tratara de un tema secundario.
Pero no lo es y todos los aspirantes definitivamente lo saben, pues en varios casos en anteriores comicios se ha visto que el nombre que se escogió fue determinante para que el candidato presidencial subiera sus acciones o, si la decisión fue equivocada, enterrara sus ilusiones.
El hecho de que hasta ahora se empiece a hablar en forma de aspirantes a la Vicepresidencia se explicaría en primer lugar como una estrategia de campaña, pues los candidatos prefieren en las primeras de cambio consolidarse ante la opinión pública y no correr el riesgo de soltar un nombre que les pueda hacer sombra.
En segundo lugar, si bien entre enero y febrero de este año poco se habló de fórmulas a la Vicepresidencia, es claro que tras bambalinas los candidatos hicieron consultas y contactos para escoger el mejor nombre que les podría acompañar en su carrera a la Presidencia.
El primero en soltar prenda sobre su fórmula a la Vicepresidencia fue Juan Manuel Galán, quien en enero pasado dijo que “les anuncio que mi fórmula a la Vicepresidencia de la República será una mujer que defienda las causas y los derechos de las mujeres”.
No obstante, el primero en atreverse a dar nombres fue el exalcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández.
En ese sentido en febrero pasado lanzó el ‘anzuelo’ y le echó flores a Íngrid Betancourt. “(Es) una mujer interesante que toda la vida ha tenido una posición férrea contra la corruptela. (…) Yo le digo a la doctora Íngrid que se adhiera a mi candidatura, que no la voy a defraudar”, dijo.
No obstante la invitación de Hernández no pasó de ahí porque Íngrid Betancourt es la candidata presidencial del Partido Verde Oxígeno, tras romper cobijas con la coalición Centro Esperanza por sus diferencias con Alejandro Gaviria.
Rodolfo Hernández siguió entonces con su búsqueda y convenció a la periodista Paola Ochoa para que lo acompañara a la Vicepresidencia. Pero apenas tres días después la comunicadora desistió de su aspiración porque dijo tenía problemas familiares por resolver que le impedían continuar.
En días pasados el candidato presidencial por firmas anunció un nuevo nombre que lo acompañará como su fórmula, el de la ingeniera industrial caucana Marelen Castillo, quien se ha desempeñado en la academia.
De esta forma, Hernández honró su promesa de no aliarse con políticos.
Más nombres
El martes pasado el candidato presidencial del Movimiento Salvación Nacional, Enrique Gómez Martínez, confirmó que su fórmula es el empresario Carlos Cuartas.
El miércoles anterior, Gómez Martínez y Cuartas se escribieron ante la Registraduría Nacional, convirtiéndose de paso en la primera fórmula a la Presidencia de la República que se registra oficialmente para las elecciones del 29 de mayo próximo.
En tanto que el pasado jueves, el candidato a la Presidencia por el Partido Centro Democrático, Óscar Iván Zuluaga, anunció que Alicia Eugenia Silva es su fórmula vicepresidencial.
La dirigente santandereana cuenta con una amplia trayectoria política y además respaldó la campaña del actual presidente Iván Duque en 2018.
Silva colaboró durante los dos periodos de Antanas Mockus como alcalde de Bogotá, es doctora en Desarrollo Económico y Sociología Rural de la Universidad de Wisconsin, cuenta con una maestría en Economía de la Universidad de Stanford y es psicóloga de la Universidad de Boston.
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Mientras que el viernes pasado el precandidato presidencial Enrique Peñalosa anunció que invitó a la directora del Partido de la U y exgobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, a que lo acompañe como su fórmula a la Vicepresidencia.
“Ganando la consulta del Equipo por Colombia del domingo 13 de marzo, invitaré a Dilian Francisca, quien tanto hizo como gobernadora por el Valle, a que sea mi Vicepresidente”, dijo el aspirante.
Peñalosa es el primero de los 15 precandidatos de las tres coaliciones que escogerán sus respectivos candidatos presidenciales únicos el próximo 13 de marzo en consultas interpartidistas, que lanza un nombre para que lo acompañe a la Vicepresidencia.
Algunos consideran que puede ser una estrategia del exalcalde de Bogotá dar el nombre de Toro antes de la consulta, en su intención de ganar el tiquete de la coalición Equipo por Colombia y estar en el tarjetón presidencial en los comicios de mayo venidero.
No faltan los pulsos
En el caso de las coaliciones, encontrar un nombre a la Vicepresidencia de la República ha sido motivo de polémica, especialmente en el Pacto Histórico, en donde algunos de sus integrantes consideran que debe ser quien ocupe el segundo lugar en votación de los precandidatos en la consulta interpartidista del próximo 13 de marzo, entre el exgobernador Camilo Romero, el pastor Alfredo Saade, el senador Gustavo Petro, la dirigente social Francia Márquez Mina y la dirigente indígena Arelis María Uriana Guariyú.
Mientras que otros opinan que la fórmula a la Vicepresidencia la debe escoger el candidato que resulte ganador en esta consulta.
Hay quienes aseguran en el Pacto Histórico que de antemano había un acuerdo sobre la forma como se escogería el candidato a la Vicepresidencia. El senador Alexánder López, presidente del Polo Democrático, dijo que “el acuerdo de partidos en el Pacto fue que el segundo sería el candidato a la Vicepresidencia y como Francia Márquez es la candidata del Polo, si ganamos este acuerdo va”.
Por su parte, Camilo Romero piensa que “ese tema vicepresidencial a mi modo de ver es de mecánica electoral al interior del Pacto, que tendremos que conversar. Hay que darle espera, será un tema de lectura del momento del país”.
A su turno, el pastor cristiano Alfredo Saade dijo que “si el segundo gana con un millón de votos o con 500 mil o 600 mil, ¿cómo se le desestimula a ese segundo y decirle, ‘no es que esos votos guárdeselos y siga haciendo campaña para que sean para el que ganó’”.
Incluso las conversaciones de Gustavo Petro en días pasados con el jefe del Partido Liberal, César Gaviria, hacen pensar a algunos que un eventual apoyo a su candidatura de esa colectividad implicaría supuestamente que un liberal sea la fórmula vicepresidencial, lo cual es probable que no sea de buen recibo por varias de las fuerzas políticas que integran el Pacto Histórico.