¿Qué es lo que está pasando en la frontera con Venezuela? ¿Cómo explicar que en Cúcuta hace dos semanas explotó un carro-bomba en la brigada 30 del Ejército y el viernes pasado se registró un atentado contra el helicóptero en que viajaba el presidente Iván Duque y dos ministros, que bien les pudo costar la vida? ¿Quiénes están detrás de estos graves actos criminales? ¿Qué tanta relación tienen estos hechos con la delicada situación de orden público en el Catatumbo? ¿Hay conexión con el hecho de que el Eln, las disidencias y las reincidencias de las Farc tengan presencia activa al otro lado de la franja limítrofe, incluso con complicidad de la dictadura chavista?
EL NUEVO SIGLO habló con el consejero presidencial para la Seguridad Nacional, Rafael Giovanni Guarín, respecto a lo que está pasando en la frontera y qué implicaciones tiene el atentado al presidente Duque con la delicada situación en toda la región.
EL NUEVO SIGLO:- ¿Qué se sabe del atentado contra el helicóptero del Presidente el pasado viernes en Norte de Santander?
RAFAEL GUARÍN: Al Presidente lo quieren matar porque es amenaza para el narcotráfico y por su firme decisión de enfrentar los grupos armados organizados. Lo ocurrido es de máxima gravedad. Al menos 6 puntos del helicóptero fueron impactados con balas de fusil en el momento en que la aeronave descendía hacia el aeropuerto de Cúcuta. Aparentemente, fueron tiradores profesionales, apuntaron al rotor y a un motor para derribarlo. Este atentado sólo fortalece la voluntad de lucha contra el narcotráfico y el terrorismo que tiene el Presidente y quienes lo acompañamos en el Gobierno.
Esperemos con la Fiscalía se determine pronto quienes están detrás y que paguen por su delito conforme a la ley. No olvidar que él ha sido, además, el más vigoroso defensor de la democracia en Venezuela y contradictor de la dictadura de Maduro. Son varios los que tienen interés en quitarlo del camino.
ENS:- ¿Cómo combatir a un enemigo que tiene la retaguardia estratégica en territorio de otro país?
RG:- La lucha contra ETA en España cambió en los años noventa cuando lograron trabajar conjuntamente con Francia y se acabó el uso que los terroristas hacían de ese territorio para salvaguardarse. El problema acá es que el régimen que impera en Venezuela es una dictadura, no una democracia. Además, el Eln y las disidencias de Farc, línea Márquez, son apéndices del régimen de Maduro. Se convirtieron en verdaderos aparatos al servicio de esa dictadura y elementos importantes en su estrategia de defensa, para enfrentar una imaginaria acción militar foránea en su contra.
En ese contexto, se deben combinar la diplomacia y la fuerza. La primera, para emplear todos los medios políticos y jurídicos. La segunda, para afectar las estructuras que delinquen en territorio colombiano y golpear los nodos de esas redes criminales que estén a nuestro alcance.
ENS: ¿Habrá alguna relación entre el presunto abatimiento de 'Santrich', los combates entre la llamada “Segunda Marquetalia” y las disidencias de las Farc en Apure con el ataque con carro-bomba en Cúcuta?
RG:- Absolutamente. Se llama narcotráfico.
ENS: ¿El Gobierno Nacional tiene la certeza que alias “Santrich” sí murió en ataques entre las disidencias de las Farc y la llamada “Segunda Marquetalia”?
RG.- La información de organismos de inteligencia señala que ‘Santrich’ está muerto. Cayó en su ley, como un simple narcotraficante, como caerán ‘Márquez’, ‘El Paisa’ y ‘Antonio García’.
Coca del Catatumbo
ENS: El Catatumbo es una de las zonas más densas en Colombia en materia de narcocultivos ¿Toda esa coca sigue saliendo por Venezuela?
RG:- Totalmente. La franja de frontera en Venezuela es un gigantesco aeropuerto de tráfico de cocaína, con el entusiasmo del régimen de Maduro, el narcotraficante Diosdado Cabello y el cartel de los soles.
El crecimiento de los cultivos ilícitos en Catatumbo se debe, precisamente, porque a pocos kilómetros, en territorio venezolano, se sacan toneladas de cocaína a través de aviones de todos los tamaños, sin restricción alguna. La mafia tiene todos los incentivos para expandir los cultivos en esa región.
ENS: ¿Esas ONG e instancias locales e internacionales que hace días denunciaron al Estado colombiano sobre violaciones a los DDHH en medio del paro, se pronunciaron sobre este ataque en la brigada 30?
RG:- No dudo que los auténticos defensores de derechos humanos repudian también toda forma de violencia, mucho más cuando se trata de un acto terrorista. Su pregunta es buena para que los ciudadanos siempre se la hagan y puedan distinguir con claridad quienes sí son realmente defensores de derechos humanos.
ENS: ¿Ve alguna relación entre este atentado y la decisión de la justicia y el Gobierno de viabilizar extradición de integrantes del Eln a Estados Unidos, sobre todo porque el carrobomba explotó cerca de la sede de la unidad de apoyo de Estados Unidos en la Brigada del Ejército Nacional en Cúcuta?
RG:- Es irrelevante, pues ni la sociedad colombiana, ni el gobierno del presidente Duque se someterán nunca ante actos de terrorismo.
Al respecto, aprovecho y le cuento: la Consejería para la Seguridad Nacional organizó en agosto de 2019 la visita de medio centenar de fiscales y otros funcionarios del Departamento de Justicia de los Estados Unidos. Durante dos días trabajaron con el presidente Duque, los ministros y el Fiscal General de la Nación en fortalecer la cooperación para procesar, capturar y extraditar a miembros del Eln por delitos asociados a narcotráfico.
El Eln está metido en las drogas como actividad principal y fuente de financiación para desestabilizar mediante actos de terrorismo e influir en la violencia a gran escala que se ha presentado en diversas ciudades estas semanas. Los esfuerzos para extraditar narcotraficantes del Eln se intensificarán.
ENS: ¿Qué efecto ha tenido la denuncia internacional colombiana contra la presencia de cúpula del Eln en Cuba y Venezuela?
RG:- Hay que trabajar mucho más en ese frente, pues no es sólo la presencia de dichos criminales en esos países, sino la abierta violación de la resolución 1373 de 2001 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que prohíbe el apoyo, la tolerancia, la protección, el refugio de terroristas.
En el caso de Cuba, el Gobierno sigue insistiendo en que la cúpula terrorista debe ser entregada a la justicia colombiana. Son responsables de múltiples asesinatos, entre ellos, el de 22 estudiantes en la Escuela General Santander, hace dos años. Eso no lo olvidamos.
ENS: ¿Definitivamente el Eln cerró las puertas a cualquier posibilidad de diálogo con este Gobierno?
RG:- Tiran la puerta con la extorsión, el asesinato, los atentados, el ataque a la población, el narcotráfico, la extracción ilícita de minerales, en fin, recorren de ida y vuelta el código penal diariamente. La paz en este momento para el Eln es retórica para incautos, en lo que están es en el crimen y el contubernio con el régimen venezolano.
ENS: ¿Teme el Gobierno una escalada de terrorismo urbano por parte de esta guerrilla?
RG:- Desde el llamado V Congreso, en 2015, ese grupo se propuso llevar a cabo acciones de alto impacto en las ciudades, éstas comprenden actos de terrorismo tradicionales y terrorismo de baja intensidad con la violencia a gran escala que hemos visto.
Las autoridades trabajan diariamente para prevenir tales actos. No es una tarea fácil, pero la comunidad de inteligencia y la Fiscalía todos los días evalúan información relevante conducente a desmantelar células operativas, afectar la financiación del terrorismo, la logística.
Apoyados en el Centro Integrado de Información de Inteligencia contra el Terrorismo, desde febrero de 2019 y hasta el día del atentado en Cúcuta, se logró que no se concretaran 452 intenciones terroristas detectadas.
No obstante, tengo que confesarle que lo ocurrido en la Brigada 30 es frustrante y requiere ajustes drásticos. No es posible que los criminales puedan ingresar un carro-bomba a un cantón militar de esa importancia. Una cosa es la sorpresa en un blanco de oportunidad, otra, muy diferente e inaceptable, la negligencia, la ineptitud o la corrupción de los encargados de la guardia. Será la Fiscalía la que determine qué fue realmente lo que sucedió.
Mayores amenazas
ENS: ¿Cuáles son hoy las mayores amenazas a la seguridad nacional en Colombia en estos momentos?
RG:- Estratégicamente, la destrucción del agua, la biodiversidad y el medio ambiente. Con los ministerios de Defensa y Medio Ambiente se viene trabajando muy duro para frenar la deforestación y desmantelar las redes que se enriquecen con los delitos ambientales.
Se preguntará por qué hablo de esto. La razón es que es una amenaza que afecta un recurso escaso y sobre el cual se anuncian conflictos internacionales por su control en las próximas décadas.
Amenaza del mismo nivel son los vacíos de institucionalidad o la precaria institucionalidad en ciertos territorios, junto el narcotráfico. Es la coca la que permitió que las Farc saltaran de 1.200 hombres en 1982 a más de 20.000 en los años noventa. Está claro, después de cinco años del Acuerdo de La Habana, que el problema no era realmente las Farc, sino el narcotráfico.
Y, tercero, hay un cambio de escenario que requiere nuevas herramientas y respuestas. La estrategia de confrontación violenta se trasladó a los centros urbanos. Se trata de movilización violenta no armada (casi siempre), pero muy violenta, de verdaderos comandos, entrenados, financiados, preparados para generar caos, zozobra y terror, como ha sucedido en Suba y Yomasa esta semana. Los componentes violentos comprendidos en la consigna “Primera Línea”, son eso. No son protesta, son delito. Esto, unido a un esfuerzo sistemático por deslegitimar las instituciones y legitimar la violencia.
ENS:- ¿Qué tanto preocupa al Gobierno Nacional el supuesto crecimiento en hombres, mujeres y menores de edad de las disidencias, “Segunda Marquetalia”, el Eln y otros grupos armados?
RG:- Mucho. Pero, repito, el problema central son las economías ilícitas. Los grupos armados se mantienen y reproducen no por razones ideológicas, sino puramente prácticas: son indispensables para que la economía ilícita funcione. Niños y jóvenes en regiones apartadas comienzan trabajando en los cultivos de coca y terminan con un fusil. Igual sucede con las economías criminales urbanas y los grupos de delincuencia organizada.
Por otro lado, en las ciudades se está dando enrolamiento en la violencia. Lo que se observa es un proceso de radicalización de jóvenes que deciden ejercer la violencia y que creen que se justifica matar o herir un policía, destruir un edificio público, quemar el sistema de transporte masivo o atacar a los ciudadanos. El extremismo violento, aupado por discursos políticos sectarios y que deshumanizan y estigmatizan a los policías, es uno de sus motores. Los extremismos todos, no importa si son de izquierda o derecha, contribuyen a desinstitucionalizar el país y a crear un ambiente propicio a la violencia. Esos políticos deben parar ya.
ENS:- ¿El Gobierno Nacional, las Fuerzas Militares y la Policía Nacional están preparados para enfrentar una eventual oleada terrorista de los grupos armados ilegales?
RG:- Es tarea de todos los días. El Presidente de la República y el ministro Diego Molano monitorean e imparten órdenes constantemente a la Policía Nacional y las FF.MM. para garantizar la protección de los ciudadanos. La Fiscalía a cargo del doctor Francisco Barbosa está haciendo un trabajo altamente eficiente para desarticular y judicializar estructuras terroristas.
Desde la Consejería también trabajamos con la comunidad de inteligencia y el aparato judicial para ese propósito, pero el terrorismo puede saltar en cualquier momento y en cualquier lugar. El Eln y las disidencias de las Farc tienen intención de repetir actos de terror.
Es importante que la ciudadanía sea consciente de que los delincuentes tienen la intención de repetir y mantener durante los próximos meses lo actos de violencia a gran escala, perpetrados bajo la sombrilla del paro nacional. El Gobierno respeta y garantiza la protesta, porque es un derecho sagrado, pero eso no es protesta, es delito.
ENS:- ¿Algún mensaje para los colombianos?
RG:- ¡Firmeza! Tengan la total certeza que el presidente Duque está haciendo lo correcto. El Gobierno no caerá en las voces del extremismo de derecha, ni de izquierda. Ha actuado con firmeza y con prudencia. Ambas virtudes, en un contexto muy complejo.