Tras la designación de ponentes comenzará esta semana en forma el estudio de la reforma tributaria en las comisiones terceras y cuartas, atendiendo el mensaje de urgencia que presentó el Gobierno, con la cual espera obtener al menos $25 billones para financiar su agenda social. EL NUEVO SIGLO consultó a parlamentarios de estas células legislativas, sus impresiones sobre este proyecto clave para el país.
Partido Conservador
La senadora Liliana Benavides Solarte indicó que “si bien entiendo y entendemos como bancada de Partido, la necesidad de construir una reforma tributaria para la financiación de las iniciativas de cambio que busca el nuevo Gobierno, también consideramos que es preciso poner en discusión y en consideración ciertas medidas, las cuales podrían llegar a producir efectos contrarios a los esperados”.
En ese sentido explicó que “nos preocupa el efecto que podría generar el aumento del impuesto a los dividendos, el cambio al esquema de zonas francas, las variaciones en el ICA y el aumento de impuesto a la renta en el sector empresarial. Los efectos que más nos inquietan son la posible fuga de capitales de inversión, el desestimulo a la creación de empresa y con ello el consecuente aumento en los índices de desempleo”.
Por ello, Benavides considera pertinente reconsiderar ciertas posturas con el fin de proteger o estimular al sector empresarial. “En últimas, si lo que se busca es la consecución de recursos para la financiación estatal y si estos tienen origen en la inversión privada, lejos de ahuyentarla de nuestro país, debemos estimular la colocación de ésta en nuestro territorio”.
Subrayó que no se puede perder de vista que estamos en medio de una economía de mercado y con ello, “existen muchas facilidades en la región para trasladar capitales de un país a otro. Así pues, al posicionarnos con unas tasas de tributación mucho más altas en comparación con la región, terminaremos por perder ciertos capitales que podrían contribuir con sus impuestos al desarrollo de los planes del Gobierno y el país”.
Finalmente, dijo la Congresista conservadora, “nos preocupa especialmente el impacto que podrían generar los llamados ‘impuestos saludables’ en el consumo de los hogares. Es cierto que el espíritu de esta medida es loable”, sin embargo, “debemos reconocer que estos productos son de poca elasticidad, es decir, son difícilmente reemplazables, y en consecuencia los colombianos no tendrán otra opción más que seguir consumiéndolos, pero con un precio más alto producto del impuesto”.
Pacto Histórico
La exministra y actual senadora de la Comisión Tercera, Clara López, dijo que “antes de decir que se le puede ajustar, lo que tenemos que garantizar es dentro del principio de la progresividad que se consigan los recursos, objetivo que son los $25 billones dentro del criterio del ministro”.
Consideró la Congresista del Pacto Histórico que “cualquier ajuste debe traer la compensación para que no se vaya a desbalancear el monto buscado”.
Consultada López sobre si tiene alguna propuesta para incluir en el proyecto, dijo que “tenemos varias propuestas, pero obviamente que prefiero discutirlas dentro de la comisión de ponentes antes de lanzarlas así huérfanas”.
No obstante adelantó que “he estado pensando, puede ser a futuro, no necesariamente en esta reforma, que se planteara algo que existió en la legislación colombiana, que es un impuesto al exceso de utilidades, para que la progresividad sea más pronunciada en esas épocas de auge en aquellos sectores que consiguen unos niveles de utilidades muy por encima del promedio, para así tener un balance desde el punto de vista de equidad y reducción de la desigualdad, que está haciendo mella hasta en el crecimiento económico”.
Partido Liberal
El senador Juan Diego Echavarría, quien hace parte de la Comisión Tercera, expresó que “pienso que es muy necesaria actualmente la reforma tributaria, los $25 billones, para cubrir los programas sociales del presidente Gustavo Petro. Y es una reforma fundamental en la equidad, es decir, que quien tiene más paga más y quien tiene menos paga menos. La idea es gravar a quien tiene más”.
Agregó el Parlamentario del Partido Liberal que le haría algunos ajustes al texto de la iniciativa.
“Excluiría las bebidas azucaradas y los alimentos ultraprocesados porque eso directamente tocan la clase baja y tocan prácticamente la canasta familiar”.
Por su lado el representante liberal, Julián Peinado, de la Comisión Tercera, dijo que “me preocupa mucho la situación de las transferencias hasta por $10 millones. Entiendo que hay que hacer un esfuerzo por controlar la evasión, pero en un país que tiene tantas arandelas al sistema financiero y los pagos para las empresas, pues ponerle más límites como un régimen de sospecha puede llevar a una desconfianza mayor, inclusive alterar los mercados”.
Peinado ve con buenos ojos los impuestos saludables a las gaseosas y las comidas ultraprocesadas, sin embargo dijo que le preocupa “que eso no tenga un régimen de transición, entendiendo que son las cosas de las que echa mano el pueblo colombiano”.
Agregó que también le preocupa la reformulación de las zonas francas, “creo que también tienen que entrar en un régimen de transición”.
Centro Democrático
Por su parte el senador Miguel Uribe Turbay, quien integra la Comisión Tercera, dijo que “en primer lugar esta es una reforma que golpea a la clase media y a los hogares de bajos ingresos, va a destruir el empleo y desestimular la inversión, va a empobrecer a los pensionados y no tiene claridad el Gobierno para qué necesita la plata y en qué la va a gastar”.
Por otro lado, resaltó, que el Ejecutivo “no hace ningún esfuerzo de austeridad y ahorro en el gasto. En otras palabras, esta es una reforma que va a golpear muy duro al empleado, al pensionado, al trabajador y que no hace ningún esfuerzo para mejorar el gasto del Estado”.
Señaló el Senador del Centro Democrático que “el principal error de esta reforma es que no hace ningún esfuerzo para ahorrar, en austeridad, lucha contra la corrupción, y tampoco tiene claridad para qué son los recursos”.
Uribe dijo que tienen muchas propuestas para incluir en esta reforma, sin embargo dijo que también “estamos promoviendo una audiencia pública donde vamos a escuchar a ciudadanos, empresarios, gremios, comerciantes y producto del trabajo que hemos hecho de estudio y de escuchar a los ciudadanos, vamos a presentar una serie de propuestas que busquen estar orientadas en una alternativa que no golpee a todos los colombianos y que adicionalmente promueva el sector productivo sin atropellarlo”.
En tanto que el representante Óscar Darío Pérez, integrante de la Comisión Tercera, dijo que “esta es una reforma que no tiene claridad con respecto al crecimiento económico ni claridad con respecto a la inversión, ni claridad con respecto a la inversión, ni a la generación de empleo, ni al estímulo, al ahorro y al consumo”.
Agregó que no se puede buscar en una reforma tributaria frenar el crecimiento económico de un país. “Habrá que hacer muchísimos ajustes para recaudar lo mismo sin dañar la economía. El tema de los dividendos, de las ganancias ocasionales, el tema del impuesto al patrimonio, afectar la inversión en exploración de hidrocarburos, el ponerle una sobretasa a la exportación de petróleo, de carbón y de oro es complicado”.
Añadió Pérez que también preocupa el impuesto a las pensiones, a las ganancias ocasionales, “que también lo vuelven renta. Es una cantidad de factores y deben ajustarse”.
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Cambio Radical
El senador Carlos Abraham Jiménez López, quien hace parte de la Comisión Cuarta, consideró que “esta reforma tributaria es antitécnica para la creación de empresas y va a ser muy grave para la generación de empleo. Creo que la visión que está teniendo este Gobierno en el mediano plazo nos va a pasar una factura enorme en el crecimiento del país, y está generando un incentivo catastrófico para que las empresas se queden en Colombia”.
En este sentido dijo que con la carga tributaria que viene, “vamos a volver a lo que nos sucedió hace 6 años hacia atrás, donde muchas empresas empezaron a cambiar su punto de maquila y se fueron de Colombia, y afectaron la generación de empleo”.
Mientras que el también senador de esta colectividad, Antonio Luis Zabaraín, dijo sobre sus propuestas que “en lo que respecta a qué se puede ajustar al proyecto de reforma tributaria, particularmente pienso que hay unos bienes exentos que pasan a ser excluidos, por nombrar solo tres: la carne, los huevos, la leche”.
Agregó el Congresista que ese es un tema que “consideramos complejo porque no es nada diferente a que el IVA que se pague en la producción de estos bienes, no será recuperable por el productor nacional; mientras que al traer bienes extranjeros el productor foráneo no tendrá que pagar IVA sobre esos insumos”.
Dijo también Zabaraín que en razón de lo anterior, lo que se debe hacer “es que el gravamen sea gradual para los bienes que hoy están excluidos o exentos” como, explicó el Congresista, lo propuso la comisión de beneficios tributarios.
Agregó que tampoco es prudente el impuesto a los dividendos, “eso estrangulará la inversión y conduce a la recesión. Un accionista de una empresa, cuando esa empresa está pagando unos impuestos por las utilidades del ejercicio fiscal, al tener que tributar por los dividendos que recibe está tributando dos veces por sus utilidades”.
Consideró Zabaraín que ese es “un pésimo mensaje a la construcción de valor, eso termina destruyendo valor, es el principio del fin”.
La U
El senador Juan Felipe Lemos, integrante de la Comisión Cuarta, expresó su opinión, pues advirtió que la bancada del Partido se reunirá en los próximos días para analizar el proyecto.
Dijo que hay que darles las herramientas a la DIAN para combatir con eficacia la evasión, y de esa manera mejorar el nivel de recaudo “que es uno de los más bajos del continente, está por el orden del 13% o 14%”.
Añadió sobre el proyecto que “tal como está hoy planteado, a mi juicio en el mediano o el largo plazo si eso se llegara a aprobar en el Congreso tal como viene, podría desestimular la inversión y generar más desempleo y además una fuga de capitales muy importante del país”.
Comunes
La senadora Imelda Daza, integrante de la Comisión Tercera, señaló que “he leído todo con cuidado, con detalle, y estoy de acuerdo en todo. Me parece que esta es una reforma que el país esperó durante muchos años para frenar, mermar, tanta inequidad, tanta desigualdad, y para que los impuestos definitivamente sean progresivos, que el que más tiene más aporte”.
Dijo que en su región, el César y La Guajira, “están rebeldes contra la suspensión del subsidio a la gasolina, igual han dicho los nortesantandereanos, los araucanos, los nariñenses, en Putumayo todos están en desacuerdo. Pero el desacuerdo es de quienes se mueven en el ámbito del comercio de la gasolina”.