Cada vez se conocen más detalles del escándalo de Mintic, después que se revelaran los testimonios de algunos de los llamados testigos clave del proceso. Ayer se supo que Guido Nule Amín y Mauricio Galofre Amín –quienes hacían parte del denominado Grupo Nule- habrían colaborado activamente con la estructuración y posterior presentación de la propuesta ante el Ministerio. Los empresarios habrían tenido un acercamiento al tema por medio de su familiar, Alfredo Amín Jesús.
De esta manera, no solo estuvo Emilio Tapia, uno de los testigos estrella, quien junto con los Nule también participó en el sonado caso del Carrusel de la Contratación que dejó en la cárcel al exalcalde de Bogotá, Samuel Moreno.
La Fiscalía indicó que Alfredo Amín fue pieza fundamental en la obtención de las pólizas falsas a nombre del Banco Itaú y la carga de los documentos al sistema para participar en el proceso licitatorio a nombre de la unión temporal Centros Poblados para proveer internet a escuelas rurales.
Entre los tres habrían organizado la estrategia para la presentación de la oferta y así resultar beneficiados con el contrato por 1.3 billones de pesos.
Congresistas señalados
Pero, sin duda, la movida por este escándalo fue más fuerte en el ámbito político. El senador Armando Benedetti fue denunciado ante la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia por estar, presuntamente, vinculado en la pérdida de los 70 mil millones de pesos del adelanto del contrato celebrado entre el Ministerio de las TIC y la Unión Temporal Centros Poblados para el suministro de internet.
La denuncia también involucra a los congresistas Mauricio Gómez Amín, del Partido Liberal, y Daira Galvis, de Cambio Radical, que fue presentada por la Red Nacional de Veedurías Ciudadanas Bien Común. Ahora la misma será estudiada por el magistrado Misael Rodríguez Castellanos.
La denuncia la presentó el presidente de esta Red, Pablo Bustos. En la misma se le pide a la Corte investigar si los congresistas habrían ejercido presiones para que no se revocara el billonario contrato.
“Para que se investigue a los parlamentarios que pudieron haber estado incursos en la negociación espuria en la celebración del contrato, su ejecución o la determinación de su configuración en la etapa precontractual”, dijo el abogado.
Por su parte el senador Benedetti siguió defendiéndose de los señalamientos y descargando argumentos contra la exministra Karen Abudinen. De acuerdo con el Congresista, todo este asunto es obra del abogado Jaime Lombana, con quien dijo que tiene problemas personales.
Aseguró también que “trata de poner a la prensa a distraerse conmigo, lo mismo pasó con lo de Odebrecht, con las chuzadas. Esto es obra de un ‘abogaducho’ que se llama Jaime Lombana, que él tuvo unos problemas con mi hermana, la levantó a puño y descalabró a mi sobrino, ese señor está obsesionado y lleva cinco años inventando cuanta cosa en los medios”.
Actualmente, Lombana es el abogado de la exministra Abudinen en el escándalo de Centros Poblados y de los $70 mil millones embolatados.
“Es el abogado ahora de Abudinen y le vendió esa estrategia a esta ministra tonta, porque ahora me voy a poner en la tarea de investigar para decir quiénes son los verdaderos responsables de este desfalco que le han hecho a la Nación”, dijo Benedetti.
Por otra parte, Gómez Amín ha sido mencionado en medios de comunicación como uno de los congresistas que habría presionado para que el contrato fuera adjudicado a Centros Poblados, acusación que él ha negado.
- Relacionado: Emilio Tapia acusado de corrupción con EMCALI
Tapia señalado en Cali
Emilio Tapia también fue señalado de estar presuntamente involucrado en un posible caso de corrupción con Empresas Municipales de Cali (Emcali).
La denuncia fue dada a conocer por la emisora Blu Radio, presentando un audio con el empresario Jorge Alfonso Molina, donde acusó a Tapia junto a Juan José Laverde, que sería un amigo muy cercano a él y haría parte del hecho.
Molina es uno de los testigos clave con los que cuenta la Fiscalía para desenredar todo este escándalo de Mintic.
Según lo dicho por Molina, el empresario tenía aparentemente dos contratos con Emcali, de los cuales contaba con garantías bancarias en la entidad Itaú, cuyos cupos fueron hechos por el mismo denunciante. “Esos cupos deben estar dirigidos a esta empresa, me envió los datos de la empresa, con estos niveles de cupo y los formatos para que salgan deben ser estos”, explicó Molina.
Sin embargo, reveló que estos certificados de cupo de crédito presentados para obtener dos contratos con Emcali son falsos.