Republicanos respaldan a Trump en sus denuncias sobre fraude | El Nuevo Siglo
LA JEFE de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, habló durante una conferencia de prensa junto al asesor general de la campaña de Trump, Matt Morgan, insistiendo en la tesis del fraude electoral
AFP
Lunes, 9 de Noviembre de 2020
Redacción internacional

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no está solo en su exigencia de que la justicia investigue si hubo fraude y otras anomalías en el conteo de votos de las elecciones de hace una semana para definir al titular de la Casa Blanca a partir del 20 de enero de 2021.

De hecho, ayer el mandatario y su equipo insistieron en que la carrera no ha termina y varios legisladores republicanos han pedido al Presidente que no reconozca su derrota.



Hasta ahora, oficialmente, no se ha declarado ganador al candidato demócrata Joe Biden. Su proclamación de victoria se hizo el sábado con base en las proyecciones de los medios estadounidenses, según las cuales el ex vicepresidente habría ganado las elecciones con 279 votos electorales, sobrepasando los 270 necesarios para su victoria. Sin embargo, oficialmente aún faltan varios estados por cerrar el conteo de votos, en tanto el equipo jurídico de la campaña de Trump prepara la impugnación a los escrutinios en varios de ellos.

Pensilvania nos impidió ver gran parte del recuento de boletas. Impensable e ilegal en este país”, trinó ayer el Jefe de Estado.

También indicó que “Wisconsin se ve muy bien. Necesita un poco de tiempo estatutariamente. ¡Sucederá pronto!”.

Agregó que “Nevada se está convirtiendo en un pozo negro de votos falsos… Están encontrando cosas que, cuando se publiquen, serán absolutamente impactantes”.

“La identificación del umbral de las boletas está resultando ser aún mayor de lo que se anticipó originalmente. Un gran número de boletas se ve afectado. ¡Manténganse al tanto!”, sostuvo en otro trino.

Ya el domingo Trump había alertado que desde cuándo los “Lamestream Media” (los medios de comunicación tradicionales o establecidos, en sentido irónico) llaman quién será nuestro próximo presidente? ¡Todos hemos aprendido mucho en las últimas dos semanas!”.

No hay derrota

De otro lado, ayer en la tarde la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, habló durante una conferencia de prensa junto al asesor general de la campaña de Trump, Matt Morgan, en la sede del Comité Nacional Republicano. Allí quedó claro que la Administración y la campaña de Trump continúan alertando sobre un posible fraude electoral generalizado en las elecciones del martes pasado.

“Queremos máxima transparencia, queremos cada voto legal contado y (que) todos los votos ilegales sean descartados", declaró McEnny. Sin embargo, varias de las cadenas de noticias de Estados Unidos (algunas señaladas por los republicanos de estar sesgadas a favor de Biden) interrumpieron la transmisión de la conferencia de prensa, alegando que la campaña del Presidente no estaba presentando pruebas del fraude.

La secretaria afirmó que el Partido Demócrata se opone a hacer una verificación de los datos como identificación, nacionalidad, legibilidad, firmas, residencia y que este mismo partido mantuvo a los observadores electorales (republicanos) fuera de los cuartos de conteo.



"A diferencia de nuestro oponente, no tenemos nada que ocultar", aseveró.

Uno de los casos que sacó a relucir es el de Pensilvania, en el que afirma que no se les permitió observar el conteo.

Asimismo, Jason Miller, asesor de la campaña de Trump, insistió en que "admitir la derrota ni siquiera está en su vocabulario ahora mismo".

En una entrevista con la cadena Fox News, Miller recalcó que la campaña Trump seguirá adelante "presentando demandas y recurriendo a todos los métodos de recuento posibles".

"Vamos a seguir exponiendo e investigando todos estos casos de fraude y abuso para garantizar que los estadounidenses pueden confiar plenamente en los resultados de estas elecciones", indicó.

Miller explicó que las autoridades electorales tendrán que llevar a cabo un recuento en Arizona y Georgia, algo que también podría suceder en Wisconsin.

Asimismo, la campaña de Trump convocó ayer a todo el equipo jurídico para trazar una estrategia con la mira puesta en "seguir luchando" contra los resultados electorales, según informaciones del diario “Politico”.

Partido con el Presidente

De otro lado, el líder de la mayoría republicana del Senado, Mitch McConnell, mantuvo ayer su apoyo al presidente Trump y afirmó que el mandatario "está en su derecho" de investigar las denuncias de irregularidades en las elecciones.

"El presidente Trump está en su derecho al 100% a investigar las denuncias de irregularidades y a sopesar sus acciones legales", indicó McConnell.



El republicano que dirige la bancada mayoritaria dijo que "si esta vez se hubiera producido una irregularidad de una magnitud que afectara el resultado, entonces todos los estadounidenses deberían desear que éstas sean expuestas".

"Si los demócratas se sienten confiados en que esto no ha ocurrido, entonces no tienen ninguna razón para temer un escrutinio adicional", agregó McConnell.

"El presidente tiene todo el derecho a investigar las denuncias y pedir un recuento, según lo que dice la ley", insistió y luego pidió a los demócratas que no "den sermones" sobre cómo el presidente debería aceptar inmediatamente y con alegría los resultados preliminares de las elecciones. Esto lo hizo acusándolos de haber pasado cuatro años "negándose a aceptar la validez de los resultados de la última elección (la de 2016)".

"Un par de indagaciones legales del presidente no implican el final de la república", concluyó. 

Ya el domingo, Lindsey Graham, uno de los republicanos más prominentes de Senado, instó a Trump a "luchar duro" y a no reconocer su derrota ante Biden.

Asimismo, Graham dijo que las acusaciones de fraude del Presidente deben ser investigadas. Otros republicanos han dicho que se debe permitir que los procesos legales se lleven a cabo.

"Trabajaremos con Biden si gana, pero Trump no ha perdido", dijo Graham, senador por Carolina del Sur, a Fox News.

"No ceda, presidente. Luche duro", dijo. Asimismo, el senador aseguró, sin presentar pruebas, que hubo irregularidades en votos enviados por correo, un método utilizado por un gran número de personas en las elecciones del martes debido a la pandemia.

¿Y el conteo?

Como se dijo, pese a que Biden fue declarado el sábado ganador de las elecciones presidenciales por los medios de comunicación, ayer cuatro estados permanecían todavía en disputa: Carolina del Norte, Georgia, Arizona y Alaska.



- Arizona

Atribuye 11 votos electorales. Biden registró allí el 49,5% de los votos, contra el 49% de Trump, una ligera diferencia de 16.985 votos, según el conteo del 98% de las boletas.

El canal Fox News y la agencia AP dictaminaron la noche del 3 al 4 de noviembre que el demócrata había ganado este estado occidental, desencadenando la ira de Trump.

El equipo del presidente consideró el anuncio prematuro y pidió a Fox News que se retractara, sin éxito. Otros medios, como el New York Times o CNN han tenido cuidado de no declarar un ganador en este estado clave, que tradicionalmente se inclina por los republicanos.

- Georgia -

En este estado del sureste del país que desde 1996 siempre ha optado por los republicanos, hay 16 votos electorales en juego.  Con más del 98% de los votos escrutados, Biden está al frente desde la noche del 5 del noviembre, con más de 10.350 sufragios de diferencia a su favor, llegando a un total de 49,5% de los votos, contra 49,3% para el presidente.

- Carolina del Norte

Hay 15 votos electorales en juego en este estado del sureste tradicionalmente republicano. Con 98% de los votos escrutados, Trump aventaja a Biden por unos 75.000 votos (50 a 48,6%).

- Alaska

Otorga tres votos electorales. Se ha contado el 56% de los votos, pero la victoria de Trump es prácticamente un hecho: cuenta ya con el 62,9% de los sufragios. Ningún demócrata se ha impuesto en este estado desde hace décadas.



Pero no es el único asunto pendiente de los comicios de hace una semana. La elección del Senado todavía no se ha definido, ya que quedan algunos escaños por determinar.

Es más, en su cuenta de twitter, Trump insistió ayer, en referencia a lo que será la definición de los dos escaños al Senado en el estado de Georgia (que deben ir a segunda vuelta en enero al no lograr ningún candidato más del 50% de los votos), que “¡Georgia será una gran victoria presidencial, ya que fue la noche de las elecciones!”.