TRAS SU presentación en el primer debate de la Comisión Sexta del Senado, la propuesta para regular las plataformas digitales de transporte pasó a segundo debate, tras la conciliación entre la bancada ponente, el Gobierno y las asociaciones gremiales que hicieron parte de la discusión.
La propuesta presentada por el senador Julio Elías Vidal cuenta con 18 artículos en el que propone una coexistencia de los sistemas de transporte en vehículos particulares a través de plataformas como DIDI, Uber o Cabify, junto con el transporte tradicional, especialmente con el gremio taxista. En su ponencia, Vidal fue enfático en la importancia del proyecto y su avance en los debates, pues tras 19 intentos en legislaciones y gobiernos previos, esta medida nunca había podido avanzar, lo que sigue generando conflictos entre los diferentes sectores.
Dentro de las principales medidas de esta norma se encuentra la creación del Registro Único Nacional del Servicio de Movilidad Intermediado (RUNSMI) como parte del Registro Único Nacional de Tránsito (RUNT) y que sería regido por el Ministerio de Transporte para agrupar las plataformas de intermediación, los conductores, vehículos usados para la prestación del servicio y sus propietarios.
Además, la propuesta también pide documentar a sus conductores, incluyendo antecedentes judiciales y una actualización de los datos cada seis meses. También se pediría “la asociación con una compañía de seguros autorizada para operar en Colombia, pólizas de seguro de responsabilidad civil extracontractual que amparen los riesgos inherentes a la actividad de intermediación y prestación del servicio de movilidad. Estas pólizas deberán tener cobertura respecto a usuarios, conductores y terceros, quienes tendrán la calidad de beneficiarios de las mismas”.
Aunque la medida no fue del todo acogida por algunos congresistas y por parte del gremio taxista representado por Hugo Ospina, uno de los acuerdos a los que llegó la Comisión fue la creación de mesas técnicas para la participación de todos los actores involucrados en la búsqueda de ajustes para el robustecimiento de esta norma antes de su ponencia en segundo debate.
Finalmente, aunque se pidió el aplazamiento de la sesión, el proyecto pasó con ocho votos a favor y solamente dos en contra. Tras los ajustes, este proyecto debe ser sometido a tres debates más en Comisión Sexta de Senado y posteriormente pasará a Plenaria para determinar si será constituida como ley o no.