Un grupo de especímenes de fauna silvestre retornó a su hábitat natural luego de finalizar con éxito su proceso de recuperación en el Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre de la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena, CAM.
Los 13 ejemplares que volvieron a su medio natural pertenecen a las especies Guacharaca, Guara, Perico bronceado, Tortuga estuche, Zarigüeya y serpiente.
La liberación de estos animales de la vida silvestre se logró como resultado del trabajo articulado entre la CAM y el Grupo de Monitoreo Área Protegida de Santa María Huila-APSH, iniciativa comunitaria que acompañó el proceso de reintroducción de estas especies a la zona. Ellos velaran por la conservación de estos individuos y del área en la cual fueron liberados
Guacharaca
Una Guacharaca (Ortalis columbiana) llegó a la Corporación gracias al trabajo articulado que la CAM realiza con Policía Ambiental de Neiva. El ave fue rescatada en las calles del oriente de la ciudad después de escapar del cautiverio en el que la tenían personas inescrupulosas que habían mutilado su plumaje de alas y cola para que no volara.
Una vez llegó a la Corporación, la Guacharaca fue valorada por el equipo de médicos veterinarios y biólogos quienes le establecieron una dieta especial para que su plumaje creciera nuevamente. Se le brindaron las condiciones biológicas necesarias en un entorno para que lograra recuperarse. Finalizado este proceso y con un plumaje nuevo, esta ave fue liberada en su medio silvestre.
“Recordemos que esta especie es endémica para nuestro país, esto quiere decir que su distribución es exclusiva para Colombia. Lastimosamente sus poblaciones se han visto drásticamente disminuidas por la cacería, pérdida de hábitat y prácticas culturales como peleas de gallos. Recordemos que esta especie está protegida y su caza o tráfico acarrea sanciones legales y monetarias”, explicó Camilo Andrés Charry, médico veterinario de la CAM.
Guaras
Tres Guaras (Dasyprocta punctata) también volvieron a su hábitat natural luego de concluir su proceso de recuperación en el CAV de la CAM. De las tres Guaras, dos eran pequeñas crías provenientes del municipio de Santa María, noroccidente del Huila, las cuales quedaron huérfanas luego que su madre fuera víctima de la cacería ilegal.
El otro individuo hembra fue rescatado en un predio de Neiva, en el cual lo tenían en engorde para ser sacrificado y destinado al consumo humano.
Cabe resaltar que estos individuos cumplen un papel biológico importante dentro del ciclo regeneracional de los bosques, pues son considerados “jardineros”, debido a que ocultan frutos y semillas bajo la tierra, que luego olvidan y posteriormente germinan en frondosos árboles.
Pericos bronceados
Tres Pericos bronceados o comegeneros (Brotogeris jugularis) fueron rescatados cuando permanecían encerrados en pequeñas jaulas metálicas al interior de una vivienda en la zona urbana de Neiva.
Estas aves ingresaron al Hogar de Paso de la CAM en Neiva con deficiencias nutricionales que se evidenciaban en el mal estado de su plumaje y presentaban un deficiente estado corporal. Los especímenes recibieron atención veterinaria y fueron dispuestos en una jaula de vuelo que permitió la conformación de un grupo de individuos de la misma especie.
Allí se les manejó una dieta específica similar a la reportada en su ecosistema y poco a poco fueron adquiriendo su destreza para volar, hasta que fueron aptos para su liberación.
Tortuga estuche
Dos Tortuga estuche (Kinosternon leucostomun) ingresaron a la CAM gracias a la buena voluntad de un joven ciudadano del municipio de Santa María que los rescató en una vía nacional y se encargó de su cuidado hasta su arribo al Hogar de Paso de fauna silvestre en Neiva.
Tras su valoración por parte del personal de la CAM y al confirmarse que reunían las condiciones tanto biológicas como veterinarias para ser reincorporados a su medio acuático natural, estos ejemplares fueron reintroducidos a su hábitat.
Zarigüeya
Tres ejemplares de Zarigüeya (Didelphis marsupialis) llegaron al Centro de Atención y Valoración-CAV de la CAM provenientes del municipio de Santa María cuando apenas eran unos bebés, pues al parecer su madre fue asesinada por habitantes del lugar, esto debido a las erróneas creencias que se tiene de esta especie.
Una vez llegaron al CAV se les estableció una dieta específica para neonatos bajo condiciones de control de temperatura con ayuda de incubadora artificial, poco a poco fueron creciendo y así desarrollaron su comportamiento natural, hasta que se optó por su liberación.
“Debemos resaltar el papel tan importante que cumplen las zarigüeyas como controladoras de algunas serpientes venenosas, pues estos individuos presentan inmunidad al veneno, además recordemos que son de los pocos marsupiales que tenemos en Colombia, es decir poseen una bolsa donde guardan a sus crías mientras éstas se desarrollan y pueden salir a vivir al mundo exterior”, resaltó el veterinario de la CAM.