Ernesto Rodríguez Medina | El Nuevo Siglo
Sábado, 22 de Noviembre de 2014

Salvando su legado

 

Hace seis años, cuando el joven Barack Obama llegó a la Presidencia de los Estados Unidos, lo hizo en la cresta de una inmensa ola de popularidad y en medio de grandes esperanzas y expectativas. Era una verdadera y auténtica revelación política. Le bastaron apenas diez años para convertirse en una celebridad mediática. Graduado con honores en Harvard, su gran activo era ser negro, pero a la vez era su gran pasivo. Muchos de sus compatriotas -que incluso le negaban origen norteamericano- nunca le han perdonado el color de su piel y todo el partido republicano ha jurado -y cumplido- hacerle invivible su presidencia. Quizás por ello no ha podido en estos 6 años mostrar realidades verdaderamente trascendentes.

A ello se ha sumado que ha sido de carácter débil y afanosamente complaciente, buscando quedar bien con todos. Algo parecido ocurre con el inquilino de la Casa de Nariño. De todas maneras lo único cierto es que ya con el sol a sus espaldas lo estamos viendo hacer esfuerzos por tratar de salvar su legado. Consciente de su poca impronta histórica está buscando arreglar las cargas y esto es precisamente lo que acaba de hacer esta semana con su paquete de medidas para formalizar y aliviar la vida de por lo menos 5 millones de inmigrantes ilegales que hoy viven escondidos en casi todos los Estados americanos.

Sus críticos no  le perdonan que haya desaprovechado sus mayorías demócratas en ambasd cámaras en los inicios de su mandato para haber impuesto una gran reforma migratoria de tipo estructural y que sólo lo hubiera hecho por decretos complementarios y periféricos que en su opinión solo alivian temporalmente las cuitas de los indocumentados. El propio Presidente confesó que sus medidas, ante todo, buscan frenar la deportación masiva que el mismo Obama ha realizado sistemáticamente. Con la nueva legislación unos cinco millones de migrantes salen de la clandestinidad y se podrán sumar-no sin un trámite engorroso- a la fuerza laboral. Desde luego esto es muy importante porque esos millones de latinos y asiáticos han venido siendo explotados y expoliados al margen de la ley por empleadores sin escrúpulos.

Los favorecidos son aquellos que tengan más de 5 años de permanencia y sean padres de niños nacidos en la Unión y quienes sean calificados laboralmente. A la vez el Gobierno está empeñado, mediante programas nacionales, a buscar la integración de los inmigrantes documentados y redoblara sus esfuerzos de vigilancia sobre la extensa frontera con México. Obama pues ha cumplido, quizá a medias, con una de sus promesas bandera. Lo irónico del cuento es que siendo Estados Unidos un inmenso ghetto y la mitad de su territorio de origen hispano, existe la percepción de que siempre ha tratado a estas minorías como a ciudadanos de segunda...

 

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Adenda

Es de esperar que la devolución de los últimos secuestrados, sanos y salvos, reactive y dinamice el maltrecho proceso de paz. Después del doloroso episodio, que puso de relieve la falta de criterio de algunos altos mandos militares, sería bueno centrar las soluciones en 

mejorar las comunicaciones y los protocolos de seguridad de nuestras Fuerzas Armadas.

ernestorodriguezmedina@gmail.com