Hugo Quintero Bernate | El Nuevo Siglo
Martes, 25 de Noviembre de 2014

The Black List

 

El nombre de esta columna corresponde al de una exitosa serie de televisión, en la que, Raymond Reddington, uno de los criminales más buscados de los EE.UU. se entrega al FBI y acuerda su libertad a cambio de entregarles a los otros criminales más buscados. Para Reddington es un excelente negocio, pues resuelve sus problemas legales, decide quiénes están en la lista y se quita la competencia, todo por el mismo precio.

La de los colombianos es la "Lista Clinton", una extensísima relación de personas y empresas, supuestamente vinculadas con el narcotráfico o con el terrorismo, en la que, como en un mal matrimonio, es más fácil caer que salirse. Y a veces, como en el cuento de la olla, es peor estar afuera por haber estado adentro.

La más reciente actualización de la "Lista de la OFAC" que data del 19 de noviembre de 2014, "incluyóal Envigado FC, Alias Envigado Fútbol Club S.A." (página 279) como una "Entidad Especialmente Designada" por vínculos aparentes con actividades de narcotráfico. Como la Corporación América de Cali en una época o el Cortuluá, ahíva nuestra liga.

La "Lista Clinton" es la prueba plena de la clase de colonia que seguimos siendo de los EE.UU. Como bien lo advierte el texto de ese acto administrativo que emite la Oficina del Tesoro, es una lista de referencia para advertir a los ciudadanos de las acciones de "congelamiento" de bienes que allíse han adoptado. Se trata -sigue explicando la propia OFAC- de alertar, a partir de la fecha de la inclusión, del peligro legal que entraña mantener relaciones de cualquier tipo con quienes allífiguran.

Todo muy bien con la tal lista, que es un ejercicio soberano del gobierno de EE.UU. hasta cuando por allá, en un país tercermundista, donde la característica nacional más acusada es la lambonería, cae en manos de fiscales y policías cuya mayor aspiración es que los inviten a los cocteles de la embajada gringa.

 

En ese país, la “Lista Clinton”se convierte en un arma de destrucción masiva de vidas, honras y bienes. A pesar de que el fundamento filosófico de la lista es informar al público en general de la fecha y nombre de quienes allíingresan, allíla vuelven retroactiva e intemporal.

En aquella colonia, los fiscales empiezan a encarcelar gente y a congelar bienes con la muy discutible tesis del "deber de saber". Tratándose del club de fútbol Envigado, probablemente el primer productor de jugadores del país, quiera Dios que ahora no le déa uno de esos genios que abundan en la Uncla por ordenar la captura de Dorlan Pabón, Fredy Guarín, Guio Moreno o James  Rodríguez porque alguna vez recibieron pagos de ese equipo de fútbol. O contra los directivos y socios del Real Madrid, Banfield, Inter, Porto o Mónaco por hacer negocios, directa o indirectamente, con el Envigado.

Muy peligroso todo en esta colonia donde toda autoridad es más papista que el Papa.

@Quinternatte