Hasta hace poco, la riqueza estaba representada en tierras, edificios, bienes, títulos valores, etc. Hoy la riqueza está concentrada en el “conocimiento”. Las ideas mueven al mundo. Estas bullen en el cerebro, en las personas y en las operaciones de los ordenadores. A medida en que los sectores de los servicios y de la información crecen y el mundo se “informatiza”, la riqueza cambia de sustancia.
Los expertos explican cómo la riqueza antes beneficiaba a unos pocos con exclusión de las inmensas mayorías, en la época moderna el “conocimiento” en forma milagrosa e instantánea, invade el “universo-mundo”, gracias a la cultura virtual. El “conocimiento” es, pues, una poderosa riqueza inagotable, que a la vez tiene la virtud de producir o generar, nuevos y maravillosos conocimientos.
La nueva riqueza nace de la comunicación, combinación y distribución instantánea de datos, números, informaciones, ideas, imágenes y símbolos, a través de medios electrónicos.
Nada simboliza tan cabalmente el conocimiento como el libro. Un volumen es luz, claridad, riqueza en todos los órdenes, avance y progreso. Las revoluciones, los cambios, las grandes transformaciones del mundo se originaron en las ideas innovadoras de los libros. Primero fueron los pensadores de la revolución francesa con sus ideas - fuerzas y luego las armas que convirtieron en realidades distinta la vida de los pueblos.
En el caso concreto de Colombia, Bolívar, Camilo Torres, Nariño, con las ideas “republicanas”, recibían de Francia, concientizaron y movilizaron a las nuevas naciones para implantar la democracia representativa. Las comunidades han sido sacudidas por libros como el Contrato social de Rousseau, El Capital de Carlos Marx, en lo político. En lo religioso, la Biblia y el Corán produjeron mentalidades nuevas. ¿Quién puede negar la fuerza humanística y literaria de textos como La Vorágine, La María o Cien años de Soledad?
La importancia de los libros es un alta y un encumbrado linaje. Todos amamos los libros. Nos enriquecen prodigiosamente. Nos personalidad, seguridad y trascendencia. ¿Que sería la universidad, la academia y el avance de las repúblicas, sin los libros?
Constituye gran orgullo de países privilegiados ser autores de libros como El Quijote, la Biblia, La Iliada y tanto volumen luminoso que han dejado profunda huella en el alma de las comunidades.
Otros libros, de jerarquía diferente y de proyección distinta, representan significativos aportes culturales, como los que editan nuestras empresas editoriales. La Universidad Santiago de Cali, que tanto significa en el terreno de la ciencia, ha puesto en circulación una obra de enorme interés con la autoría de exmagistrados de la H. Corte Suprema de Justicia y reconocidos tratadistas.
La publicación se llama “Estudios jurídicos en honor de Gustavo Gómez Velásquez, exmagistrado de la Corte Suprema”. Incluye el volumen estudios de gran fuerza doctrinaria y jurídica de los maestros: Gustavo Gómez Velásquez, Jorge Enrique Valencia, Horacio Gómez Aristizábal, Pedro Lafont, José A. Bonivento Fernández, Mario Salazar Marín, José Iván Palacio, Álvaro López Dorado, Álvaro Salgado Gonzáles, Edgar Saavedra Rojas, Eudoro Echeverry Quintana, Fredy Herrera. Mil congratulaciones a la meritoria Universidad, dirigida por Carlos Andrés Pérez Galindo.