Marzo 12: Día D | El Nuevo Siglo
Sábado, 24 de Febrero de 2018

Al día siguiente de las elecciones para el Congreso, el 12 de Marzo, las fuerzas políticas se reacomodaran para decidir el tiquete presidencial. Es el momento de los estadistas, de los grandes estrategas, quienes deberán superar la natural tendencia al predominio de sus banderías y pensar en cómo se libra a Colombia del populismo que,  impulsando la lucha de clases, ha conducido a la miseria y a la desolación las naciones que gobierna. Es, también, persecución y cárcel para los hombres libres que denuncian los sufrimientos de su pueblo. Cuba y Venezuela son la prueba de la duración y la magnitud de esa tragedia.

La izquierda colombiana de hoy está bien atrincherada y pretende colarse al poder por entre las grietas del evidente deterioro de las instituciones. Sí, hay desconfianza generalizada en los partidos y en los congresistas, en el gobierno, en la justicia. El fenómeno no se puede ocultar. Corresponde, más bien, insistir en el diálogo abierto con el pueblo. Nuestro sistema democrático, con todo y sus defectos, tiene mucho que mostrar. Colombia es un país que progresa lenta pero constantemente. Los bienes públicos se extienden y son mejores cada día. Hay menos pobreza, menos miseria y menos desigualdad. La justicia cojea pero llega. Se investiga la corrupción de cuello blanco y a los culpables se les manda a La Picota. La fiscalía de Néstor H Martínez es ejemplo de eficiencia y prontitud. Los solapados de las Farc recibirán las penas que se merecen por sus incumplimientos del Acuerdo de Paz. La economía ha sido manejada con juicio y no hemos padecido las grandes caídas de Brasil, Argentina y Venezuela. Se administra con cuidado nuestra escasa riqueza petrolera. Ahora, el campo empuja el crecimiento nacional. Hay, pues, en nuestro andar histórico razones para el optimismo. Y eso debe concitar el entendimiento de quienes tienen la obligación de proteger nuestra democracia.

Preocupa, sin embargo, el razonamiento facilista según el cual quien pase a segunda vuelta presidencial entre Vargas Lleras y el ganador de la consulta Marta Lucía – Duque recibirá los votos de los movimientos afines para asegurar el triunfo. Pero, las encuestas de los últimos seis meses señalan que los punteros son Petro y Fajardo. Es una realidad que podría variar si somos capaces de sembrar nuevas esperanzas. Estas nacerían de la unión total de la centro- derecha. ¡Muy difícil, eso es imposible antes de la primera vuelta!, nos replican. Sí, difícil, muy difícil, pero necesario. Recordad Bizancio.

Gustavo Petro no se anda por las ramas y está proponiendo un Estado rupturista y agresivo que compromete el futuro de la Nación libre y soberana que hemos forjado. Su aprovechamiento dialectico de las falencias del régimen, que es propio de las contiendas democráticas, puede y debe responderse con altivez, coraje y verdad. En ese campo hay mucha construcción de historia.

El título de esta nota propone que el 12 de Marzo empiecen los acercamientos entre los líderes de la centro-derecha, incluyendo al expresidente Gaviria, jefe del Partido Liberal. Lo apropiado es  una concertación de amplio horizonte como la que lograron los chilenos para salir de la dictadura de Pinochet. Toca hacerlo en la Colombia de hoy para evitar el totalitarismo populista.

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P.S: •Muy significativo el repunte de Duque.

•Inesperado el rezago de Vargas Lleras.

•Petro retrocede y rabia en Medellín.