MAURICIO BOTERO MONTOYA | El Nuevo Siglo
Lunes, 19 de Agosto de 2013

Las cosas que desaparecerán

 

Se acabó la época en la que las personas estaban en un solo sitio a la vez. También se liquidó la filatelia excepto para cultivadores de antigüedades. No hay correo ni estampillas. El correo inmediato logró acabar la pequeña dicha de la carta esperada. Un compañero de generación que no claudica ante la tecnología predice algunas cosas que quizás veremos desaparecer durante el curso de nuestras vidas.

La Oficina de Correos.Prepárense para imaginarse viviendo en un mundo en donde no exista una oficina de correos. Los correos de todos los países están sufriendo problemas financieros que probablemente no puedan ser sostenidos a largo plazo. Los correos electrónicos, Federal Express, el UPS y otros servicios similares casi han acabado con el ingreso mínimo necesario para mantener las oficinas de correos con vida.

El Cheque.Se están sentando las bases para acabar con los cheques. Las tarjetas plásticas de crédito/débito, al igual que las transacciones en línea causarán su eventual desaparición.

Los Diarios.Las nuevas generaciones simplemente han dejado de leer diarios. Ya no se suscriben a la edición impresa. Esta costumbre desaparecerá al igual que desapareció el lechero a domicilio.

Los libros.Actualmente, ustedes pueden navegar por una librería en línea, e incluso leer un capítulo del libro que les guste antes de comprarlo.

El Teléfono Convencional.La mayoría de las personas simplemente mantienen el teléfono convencional porque siempre lo han tenido, pero deben tener en cuenta que están pagando un precio doble por un servicio que ahora es extra.

Música.La industria de la música está sufriendo una muerte lenta. No sólo debido a descargas ilegales desde la computadora, sino también a la falta de música nueva e innovadora que pueda llegar a la gente que quiera escucharla. La “música” de hoy no tiene la armonía, la melodía, la orquestación, la letra, el romanticismo de la música de antes.

Televisión.La gente está viendo programas de televisión y películas en sus computadoras. Y, además, divirtiéndose con juegos computarizados y haciendo un montón de otras cosas que ahora ocupan el tiempo que antes lo pasaban frente al televisor.

Las “Cosas” que ustedes poseen.En la actualidad, sus computadoras tienen un disco duro y ustedes pueden guardar ahí fotos, música, películas y documentos. Su software está en un CD o en un DVD. Todo esto está cambiando. Apple, Microsoft y Google están en el proceso de completar sus últimos “servicios en la nube”. Cuando se encienda una computadora estarán ligados directamente a la Internet. En ese mundo virtual, ustedes podrán acceder a su música, sus libros, o sus cosas favoritas. Esa es la buena noticia. Pero, ¿serán ustedes los dueños reales de cualquiera de estas “cosas”, o todas estas cosas podrán desaparecer en cualquier momento con un gran “PUUF?”

La Privacidad. Desapareció hace mucho tiempo. Hay cámaras en la calle, en la mayoría de los edificios, e incluso incorporadas en sus computadoras y en sus teléfonos celulares. Ya no estamos en un solo sitio pero nos espían en todos.