Post-it 1. Lo que le está pasando a Oscar Iván Zuluaga, a su hijo, y a su casi triunfante campaña de 2014 para la Presidencia de la República, nos deja a todos un mensaje póstumo: no hay nada oculto bajo el sol. Todo se sabe. No se puede confiar en nadie, ni siquiera en la “Sombra del Zorro”, porque si se comete algún error, por algún lado salta la liebre… así se trate de firmas “intocables” como Odebrecht, multinacional brasilera que creó una oficina de “Sector de Relaciones Estratégicas”, para montar todo un entramado de CVY (¿cómo voy yo?) con la idea de permear la política y a los políticos en cerca de una docena de países, como Angola, Mozambique (en África) y de resto en América, donde logró el mayor fenómeno de integración continental bajo la capa de la corrupción: Argentina, Brasil, Cuba, Ecuador, Guatemala, México, Panamá, Perú, República Dominicana, Venezuela y Colombia. Hasta “suicidios asistidos” ha producido, como en el caso del ex doblemente presidente peruano, Alan García (qepd).
Y faltan datos de otros municipios. De la última, discutida y triunfante campaña de Santos, aún no está escrito todo, ni repartidas todas las culpas. Tendrán que salir a la luz pública y empezar a conocerse las condenas a que haya lugar. Corolario: el delito no paga, Odebrecht sí, pero en la cárcel. No se puede hacer nada malo, porque siempre habrá un back-up oculto, dentro o fuera del confesionario, allí, expectante, en las tinieblas, buscando su principio de oportunidad en la vida.
Post-it 2. Gravísimo lo que está pasando en el Departamento del Cauca. Se lo están robando a mordiscos los indígenas que se creen dueños de toda la tierra. Y están obrando como brazo armado de la revolución petrista para acabar con los ingenios azucareros y castigar a la oligarquía colombiana, con apellidos como Ardila Lule, porque siempre lo han insinuado y les ha servido de caballito de batalla electoral. Se quieren apoderar de la mejor tierra cultivable de Colombia, seguramente para después sembrar hoja de coca, que es lo que mejor se vende. ¿Y dónde estarán la Fiscalía, la Policía y el Ejército?
Post-it 3. Hace varios días el inefable Presidente Petro ordenó al General Salamanca, Director de la Policía Nacional, “sacar a todos los policías a la calle”. ¡Craso error! ¿Acaso no sabe el primer mandatario que las calles están, por su culpa, muy peligrosas? Y lo que va a pasar es que los van a atracar y asesinar a todos, pues bien sabemos que tienen la orden de no disparar a ningún criminal que se les atraviese. Vaya táctica perniciosa.
Post-it 4. En épocas de Pastrana, el país estaba secuestrado por la guerrilla. Llegó AUV al poder para poner orden a las cosas vía Seguridad Democrática y la guerrilla quedó prácticamente borrada del mapa. Ahora, en tiempos del “Cambio” ha resurgido de sus cenizas y han nacido más grupos narcoterroristas. ¿Ahora, quién podrá salvarnos?
Post-it 5. Qué mala leche la de la Contraloría al declarar responsable fiscal a Fernando Panesso Serna, impoluto exgobernador de Antioquia y embajador, ex de todo, porque cuando fue representante legal de Coomeva EPS le tocó en suerte firmar unas declaraciones con unos supuestos errores contables que a nadie perjudicaron, pero queda en el patíbulo, como si él se hubiera robado un peso. Eso es lo más parecido a la injusticia.