Viva Air nació en el año 2012 y Ultra Air en el 2022. Ambas se acabaron en el 2023. San Andrés Islas es parte de Colombia desde 1822. En ese momento como Sexto Cantón de la Provincia de Cartagena. Hoy no es más que otro territorio olvidado e inhóspito de la República de Colombia.

Se lamentan de la ausencia histórica de turistas en la Isla esta Semana Santa. Ausencia extensible además a toda Colombia. ¿Y se preguntan el por qué? ¿El mar de los siete colores ya no atrae?  Ok… La isla ha tenido mala fama últimamente: criminalidad, narcotráfico, cero oferta hotelera, pésimo aeropuerto y terrible conectividad y comunicaciones entre otros. No sé cuántos hoteles ni siquiera cuentan con agua dulce para bañarse.

¿Y se preguntan el por qué? Ok… San Andrés Islas como producto turístico debería estar a la altura de Cancún o Los Cabos en México Lugares de talla internacional hechos a la medida de lo que exige el turista norteamericano y europeo. ¿San Andrés Islas está hecho a la medida de quiénes?  

Sin embargo, ¿la culpa del poco turismo en la Isla es de dos aerolíneas que hace una década no existían? La culpa es del Estado colombiano a quien ancestralmente le ha interesado ejercer soberanía sobre territorios inhóspitos, pero nada más. Ni siquiera hemos sido capaces de proveer los servicios de ayudas a la navegación aérea (entre otros el control del tráfico aéreo) sobre el Mar Caribe en ruta hacia San Andrés Islas. Esos servicios hoy los presta Panamá siendo territorio colombiano.

Si no hay mercado (en el caso de las aerolíneas) y no es atractivo para el ciudadano (en el caso del turista) nadie tiene la obligación de operar o visitar San Andrés Islas. Es el gobierno quien debe rehacerla y convertirla en un producto turístico atractivo. No la gente ni las aerolíneas. Y si se vuelve atractiva pues habrá demanda de turistas y en consecuencia las aerolíneas verán en dicha Isla un mercado interesante.

La aviación comercial no es solidaridad como hoy dice el eslogan de una querida entidad pública. La aviación comercial es un negocio. Las aerolíneas no tienen por qué volar sillas vacías y aire en carga simplemente por solidaridad. Así no funciona. Distinto es el caso de las frecuencias adicionales que hizo Avianca en Semana Santa. Vuelos llenos. Pero si hubiera querido no los hace y punto.

San Andrés Islas me recuerda la historia de Panamá, Pepe Botella y el Mocho Huertas en el prolegómeno de la separación del Istmo de Colombia. Un territorio inhóspito al momento de su separación. Olvidado por el gobierno central. De cuyo potencial y maravilla jamás se percató Colombia. O sí, pero tarde. ¿Quién sí estará viendo las maravillas de San Andrés Islas? O más claramente ¿quién será el Philippe Jean Bunau-Varilla esta vez? ¿Nicaragua?

La culpa de la desolación de San Andrés Islas no es de Viva Air ni de Ultra Air ni de ninguna otra aerolínea que no quiere operar allá.  Es del Estado colombiano, pero desde 1822…

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