Crisis fronteriza, fabricada por Maduro: editorialistas | El Nuevo Siglo
Miércoles, 2 de Septiembre de 2015

Varios editorialistas internacionales han coincidido en que la crisis fronteriza, que ha llevado a que más de 10.000 colombianos radicados en Venezuela abandonen ese país, es un invento del presidente Nicolás Maduro para distraer la atención de los problemas de su gobierno.

Ayer convinieron en el tema los editorialistas de los rotativos norteamericanos The Washington Post y The New York Times, mientras que la semana pasada fue el diario madrileño El Mundo el que se ocupó del asunto.

El periódico de la capital norteamericana, “con la inflación y la delincuencia en alza, y los suministros de alimentos y medicinas en contracción, el gobierno populista de Venezuela parece encaminarse hacia una gran derrota en las elecciones legislativas previstas para diciembre, si el voto es libre y justo. Así que no es ninguna sorpresa que el presidente Nicolás Maduro esté recurriendo a los ataques a la oposición y las manipulaciones del sistema electoral que han sido un elemento básico del régimen creado por el fallecido Hugo Chávez”.

En ese contexto, consideró el Post, es que Maduro “ha recurrido a provocar una crisis” con Colombia.

“En realidad”, sostuvo el editorialista, “la ilegalidad y el contrabando son moneda corriente a lo largo de la frontera colombo-venezolana, pero el problema ha sido causado no por los colombianos sino por las políticas económicas desastrosas del gobierno de Maduro”.

Tras resaltar la reacción moderada del presidente Juan Manuel Santos, el rotativo se mostró pesimista, expresando que “es poco probable que” los deportados colombianos “sean las últimas víctimas de un régimen incapaz de arrestar a un descenso económico y social acelerando los que han sido expulsados. Este viernes se espera que concluya el juicio del líder opositor Leopoldo López. Los fiscales del gobierno han propuesto una sentencia de hasta 13 años por cargos descaradamente falsos. Estados Unidos y los gobiernos democráticos de América Latina deben advertirle al régimen Maduro ahora que una condena dañará las relaciones y producirá una respuesta significativa, incluyendo sanciones contra todos los funcionarios involucrados en el juicio”.

 

“Payasadas”

 

Por su parte, también ayer el diario neoyorquino manifestó que “todo es falso, una crisis fabricada por un presidente cada vez más impopular, que está desesperado para reforzar el apoyo de su partido antes de las elecciones parlamentarias previstas para el mes de diciembre”.

“A medida que las relaciones entre Washington y Caracas han mejorado marginalmente, el señor Maduro ha optado por desviar la atención de los problemas del país recogiendo peleas innecesarias con sus vecinos”, anotó el editorialista, recordando el pleito que casó Maduro con otro vecino de Venezuela, “Guyana, un pequeño país de cerca de 800.000 personas”.

“El señor Maduro luego volvió su atención a su frontera occidental, donde sus payasadas han interrumpido un importante corredor comercial, separado familias y desplazado a cientos de personas de sus hogares. Mientras las fuerzas de seguridad venezolanas comenzaron a buscar casa en casa a los colombianos, que el gobierno dijo que estaban en el país sin autorización, cientos de colombianos huyeron a pie a través de la frontera, algunos a través de un río fangoso, llevando unas pocas pertenencias encima”, escribió el editorialista neoyorquino.

También el Times elogió que las autoridades colombianas se hayan abstenido “de una guerra de palabras que podrían aumentar el fervor nacionalista en Venezuela”, señalando que Maduro “debe centrarse en la lucha real: en las urnas. Alienar aún más a sus vecinos sólo profundizará muchos problemas de Venezuela”.

 

 

Enemigo exterior

El sábado, El Mundo tituló su editorial diciendo que “Maduro vuelve a demostrar quién es en el conflicto que ha forzado con Colombia”.

El editorialista madrileño anotó que “el conflicto diplomático abierto por Venezuela con Colombia se está convirtiendo en una crisis humanitaria que además amenaza con desestabilizar la región y poner en jaque el proceso de paz con las Farc. La conocida estrategia del presidente venezolano, Nicolás Maduro, de buscar un enemigo exterior para esconder el fracaso de sus políticas domésticas está tensionando las relaciones entre los dos países bolivarianos hasta un punto peligroso”.

Al igual que hicieron ayer sus colegas norteamericanos, el editorialista hispano calificó de “sensata” la manera como Santos “trató en un primer momento de quitar hierro al asunto por la vía del diálogo con una estrategia que le costó duras críticas internas en un año electoral. Pero el discurso agresivo y las formas provocadoras a las que nos tiene acostumbrados Maduro han elevado la tensión hasta el punto de que los embajadores de ambos países han sido llamados a consulta”.

Sin embargo, la clave está casi al final del editorial de El Mundo: “Venezuela celebra elecciones parlamentarias en diciembre de este año y el enfrentamiento con Colombia además de dar alas al nacionalismo venezolano en favor del presidente, va a impedir que la oposición haga campaña en los municipios de la frontera en los que se han suspendido las garantías constitucionales de forma provisional”.