¿Cuánta atención les ponen las mujeres a sus manos? Además del lavado diario (ahora más después del Covid-19), usan desinfectante y se colocan una capa de esmalte. Inevitablemente llega el día en que el contraste entre el rostro bien cuidado y las manos ignoradas hace que usar guantes en todo momento sea una opción atractiva.
Por ello, aquí hay 10 formas de embellecer las manos con consejos expertos de Anthony Rossi, dermatólogo certificado en Memorial Sloan Kettering Cancer Center en la ciudad de Nueva York.
- Lavado y desinfección
Los cambios pequeños a la rutina pueden minimizar la resequedad, el enrojecimiento y la irritación que resultan del frecuente lavado y aplicación de alcohol. Primero, usar agua tibia, no caliente, y elegir un limpiador humectante, en vez de jabones antibacterianos que resecan. Luego aplicar inmediatamente una crema para manos ligeramente seca para que esta se absorba mejor. Luego, el desinfectante y, posteriormente, aplicar la crema inmediatamente después de que el desinfectante se seque.
- Que no falten los guantes
Son molestos, pero los guantes realmente protegen las manos contra los quehaceres ásperos y que implican usar agua, como hacer lavar la ropa, lavar platos, bañar al perro, lavar el carro, cocinar, hacer jardinería y limpiar el garaje o ático. La clave es encontrar guantes de trabajo que no sean demasiado voluminosos y que sean apropiados para estas tareas. Pruebe unos que sean con mangas ajustadas y más largas para lavar los platos o los forrados de algodón e impermeables con una textura antideslizante para cocinar con seguridad. También los hay con cerdas en las palmas y en los dedos para tareas que te ensucian como bañar al perro. En todo caso, es recomendable consultar al médico general o dermatólogo si se tiene algún sarpullido en las manos que no mejora.
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- Elegir una buena crema
Aunque los saludos con el puño y el codo casi han reemplazado el trato con la mano, tener las manos suaves y lisas todavía es buena idea. Los ingredientes y la textura son importantes, así que no agarrar cualquier crema vieja para manos que esté en oferta. Se debe buscar ingredientes como el ácido hialurónico y la glicerina que atrapan el agua para dar un aspecto de rocío y relleno; las ceramidas u oclusivas como la vaselina y la manteca de cacao para sellar la barrera de la piel, mantener las manos suaves y conservar la humedad; y emolientes como la manteca de karité, avena coloidal, vitamina E y ácidos grasos esenciales para calmar y suavizar.
- Exfoliación
Haga que la exfoliación sea parte de su estrategia; igual que con el cuidado de la piel facial. El desprendimiento de las células muertas en la superficie no solo refresca y suaviza las manos, sino que también facilita la aplicación y absorción de cualquier tratamiento tópico (como la crema para manos y el protector solar). Pero hágalo con cuidado, ya que la piel de las manos a los 50 años es aún más delgada que la piel facial y tiene menos glándulas sebáceas. “Aplicar retinol al dorso de las manos puede mejorar la apariencia fotoenvejecida”, dice Rossi.
- Mascarillas
Las especialmente designadas “noches de spa” son excelentes, pero las manos maduras a menudo se benefician de las mascarillas semanales o quincenales para aumentar la hidratación. Pruebe las versiones preparadas que se venden en farmacia o simplemente haga una mascarilla de noche en casa. Lo más recomendable es aplicar aceite en la cutícula de las uñas y en las manos, luego ponerse unos guantes blancos de algodón frescos para manicura. También se recomienda sumergir las manos en cera un poco caliente, la cual se endurece para formar una capa como cáscara, luego se meten 20 minutos en los guantes que retienen el calor antes de que la cera fría se agriete y como resultado se tiene unas manos súper suaves.