MUCHAS VECES las personas ven que su gato deja o no quiere comer, y como se sabe, estos animales son seres únicos, con un comportamiento muy diferente al de los perros, y esta conducta puede darse por diversas causas, que pueden ser simples o transitorias, y otras más graves que requieren atención médica veterinaria inmediata.
Por lo anterior, el Dr. Carlos Cifuentes, médico veterinario de Pet Food Institute explica los motivos simples y graves que pueden estar ocasionando esta situación:
Causas simples:
- Alteraciones en la dieta: A los felinos les gusta la rutina, por lo que cualquier cambio en su alimentación, como modificar la marca o tipo de comida, puede provocar que dejen de comer.
- Cambios de recipiente y lugar asignado para comer: A estos peludos no les gustan los cambios bruscos, por lo que si se va a realizar uno, debe darse de manera lenta y transitoria.
- Estrés: Al ser animales muy sensibles, cualquier alteración en su entorno, como la llegada de un nuevo miembro de la familia, un viaje o una mudanza, puede provocar que dejen de comer.
- Aburrimiento: Su instinto está en la caza y el juego, por lo que si carecen de suficiente estimulación, es probable que se abstengan de comer.
Causas graves:
- Enfermedad periodontal: Los problemas orales como la inflamación de las encías puede hacer que alimentarse sea bastante doloroso para el gato, incluso algunas veces, generan sangrado, pérdida o fractura de piezas dentales, por ende, paran de comer.
- Algunas enfermedades, como insuficiencia renal o hepática; de origen viral y cáncer: Pueden causar inapetencia, pérdida de peso y signos como vómito o diarrea.
- Intoxicación: Si el animal ha ingerido alguna sustancia nociva, puede disminuir el apetito o que deje de comer. Dentro de las plantas de interior más comunes y que deben mantenerse alejadas están el muérdago, acebo, amaryllis y lirios.
- Problemas gastrointestinales: Son aquellas patologías que afectan el tracto digestivo, como la gastritis o gastroenteritis causada por parásitos, virus o bacterias, que pueden causar inapetencia. Incluso, una obstrucción intestinal debido a la ingesta de partículas extrañas como hilos, juguetes y demás, no solo provoca que un gato deje de comer, sino que produce vómito, decaimiento, dolor abdominal y estreñimiento, por lo que se considera una urgencia médica.
¿Qué se puede hacer?
El experto asegura que en caso de que el peludo no coma durante más de 24 horas, es importante llevarlo de inmediato al médico veterinario de confianza para que lo examine, ya que solo él podrá determinar la causa de la inapetencia y recomendar el tratamiento adecuado.
Adicionalmente, se pueden seguir los siguientes cinco consejos para estimular el apetito de tu minino:
- Ofrecerle comida húmeda: Es más apetecible para los gatos en comparación con la comida seca.
- Dividir la ración diaria en pequeñas porciones: Ubicarlas en sitios altos para estimular su instinto de caza, de esta manera intuirá que el alimento es fresco y que no estará a su alcance todo el tiempo.
- Brindarle comida caliente: El alimento tibio es más atractivo que la comida fría.
- Agregar un poco de agua a la comida: Puede ayudar a que el alimento sea más sabroso.
- Probar con una dieta diferente: Si el gato no come la comida que le estás dando, es momento de explorar nuevas opciones, pero siempre bajo asesoría veterinaria.
Recuerde que ante cualquier modificación dentro de la rutina de la mascota, es importante consultar con un médico veterinario que brindará las mejores opciones de alimentación para este compañero de vida.