Un trabajo continuo a través de la experimentación artística es lo que hace la pintora Tina Samper con su creación Paisajes, en donde los colores y materiales que usa la presentan como una experiencia refrescante que estará en el salón J.N. Gómez del Museo de Arte Moderno, Mambo, hasta el 30 de este mes.

“Mi trabajo es la continuidad de la renovación de la acuarela, la ruptura de las ideas tradicionales, el quebrantamiento de los prejuicios sobre el papel. Experimento con diferentes materiales y herramientas para crear distintas texturas y sensaciones, y manejo colores saturados que yo misma preparo. La base de la acuarela es el blanco del papel. Este refleja la luz y se convierte en un medio para armonizar los colores. He ahí la esencia de mi trabajo”, señala la artista bogotana.

Las pinturas que componen la muestra están, como su nombre lo indica, inspiradas en las observaciones paisajísticas que hace Tina de su entorno real, imaginario y su psiquis. “Los paisajes me han inspirado para mi obra actual y parten de lo que observo desde mi ventanal, pero rápidamente se trasladan a otros lugares de mi imaginación y de mi mundo interior”, comenta.

Al mismo tiempo, la artista señala que hizo un cambio fuerte cuando decidió dedicarse al arte paisajístico, pero también asegura que estuvo motivada por una fuerza interior que no puede explicar. “Es algo nuevo para mí. Estoy dando un paso nuevo cada día, moviendo mis pinceles, explorando un nuevo género que me emociona”, señala.

Samper siente fascinación por las tonalidades de luz que se plasman en los paisajes montañosos del territorio colombiano, ha experimentado matices y tonos que van desde los más claros y luminosos hasta los más profundos y oscuros. Ella explica que esa luz en el paisaje forma movimientos, relaciones de color, equilibrios y desequilibrios al organizar zonas claras y luminosas, espacios densos y sombras.

La libertad es un elemento fundamental en el trabajo de Samper que siempre está en busca de la experimentación y nuevas dimensiones para su arte: “Trabajo con plena libertad, busco la composición con trazos grandes, amplios, y dejo obrar el sentimiento del momento, que para mí es como una resonancia interior, es un proceso muy personal”, afirma la artista de su labor creativa.

Algo muy especial del trabajo de Samper es que la totalidad de las obras que se exhibirán en el Museo de Arte Moderno son hechas en acuarela, técnica que en la actualidad no es tan usada como otras, pero que en manos de la bogotana  adquiere un nuevo valor por la capacidad de reinterpretar el material y los colores, elaborando ella misma sus pigmentos y explorando su aplicación en diversas superficies.

Samper llegó a la acuarela tras una larga experimentación que partió de la fotografía, labor que durante muchos años realizó y de la que debió retirarse por una serie de impases, para pasar por otras técnicas como el grabado, el dibujo y las ilustraciones.

 “Los colores son mis palabras y  la acuarela, mi autobiografía” concluye la artista.

Los amantes del arte y los paisajes podrán encontrarse con una obra que plasma de forma perfecta el sentido que tienen los colores, la luz y los tonos que da el ambiente, además, es una oportunidad para disfrutar el trabajo de una de las artistas más vanguardistas del país.