Enfrentar a Brasil siempre es una pesadilla, pero a la vez una motivación extra para los rivales que, como en el caso de la Selección Colombia, sueñan con la victoria.
Mañana más que nunca están dadas las condiciones están dadas para hacer realidad esa ilusión. Los pentacampeones vienen atravesando un bajón en su rendimiento y sumado a ello, el técnico Diniz no dispondrá de cuatro de sus figuras.
La ausencia del estelar Neymar, estaba confirmada desde la jornada anterior de la eliminatoria para el Mundial de 2026, cuando se confirmó su lesión de rodilla.
Al astro se sumaron el golero Ederson, el volante y capitán Casemiro y el delantero Gabriel Jesús, quienes no viajaron a Barranquilla para el duelo de esta noche a partir de las 7:00 en el Metropolitano, por la quinta jornada del clasificatorio al Mundial de Estados Unidos, México y Canadá.
Caso contrario al de los brasileños, Colombia recupera al golero Camilo Vargas, quien heredó el puesto de David Ospina; el lateral Daniel Muñoz, el central Jhon Lucumí y el volante Jefferson Lerma.
El gran ausente será Jhon Arias, quien cuando actúa en su posición natural, la de extremo por derecha, es fundamental. Su lugar lo ocuparía Luis Sinisterra o Rafael Santos Borré podría ir a esa posición y dar paso como atacante central a Jhon Córdoba.
“Siempre hay una primera vez para ganar, creo que es un buen momento. Convengamos que Brasil tiene jugadores en los mejores equipos del mundo, de mucha categoría, vamos a tener que hacer un esfuerzo grande para equiparar esa categoría. Ojalá que podamos lograr esa primera victoria en Eliminatorias”, reconoció el técnico Néstor Lorenzo.
Añadió que “es un buen momento porque es ahora, simplemente por eso. Cualquier récord está para superarlo y siempre tenemos esa mentalidad de ganar. Hicieron alusión de que nunca les hemos ganado, pues es un buen momento. No podemos ganar si no hacemos un buen partido, ojalá se nos dé”.
Con cautela
Si bien es cierto que es el momento de pensar en que a Brasil se le puede ganar, también lo es que hay que ser cautelosos y en significa que el partido se tenga que plantear defensivamente.
Sin embargo, Lorenzo si debe corregir el funcionamiento del cuarteto posterior y tener cuidado con la salida de los laterales porque así Brasil no llegue en su mejor momento, tiene delanteros rápidos y hábiles.
También preocupa el funcionamiento de la primera línea de volantes en la que Lerma cumple como recuperador y Mateus Uribe hace la doble función, la de quitar y empezar a gestar juego ofensivo, solo que el antioqueño no ha tenido buenos partidos últimamente.
La creación nuevamente estará a cargo de James Rodríguez, mientras que Luis Díaz será el extremo por izquierda.
Colombia también deberá mejorar en su rendimiento en los primeros 45 minutos una asignatura pendiente desde la anterior eliminatoria.
“Tiene que ver un poco con el poco tiempo de trabajo y la planificación. Hay que imaginar mucho en la Selección. Acá hay jugadores que todavía no entrenaron, jugaron el domingo, el martes recuperaron y ayer fue su primer entrenamiento. El equipo de Colombia no se dice de memoria (...) de pronto pasa un poco por ahí, no es que yo corrija muy bien o resuelva nada, ellos también van cogiendo un poco más de confianza”, explicó Lorenzo.
Las ganas están, la mentalidad ganadora también, todo es cuestión de que las cosas salgan como Lorenzo las planifique para que Colombia cumpla su sueño de derrotar a Brasil por la eliminatoria mundialista.
El rival
Brasil ha vivido en esta eliminatoria una situación especial. Tras un arranque auspicioso, fue frenado por Venezuela en su propia casa y luego cayó frente a Uruguay.
No obstante, eso no es extraño en el fútbol, lo que sí lo es el funcionamiento como equipo. Las dudas se han ido acrecentando y Diniz, quien está como técnico encargado, buscará recomponer el andar.
Han pasado menos de dos semanas desde que director técnico hizo historia al llevar al Fluminense a ganar por primera vez la Libertadores y empezó a ser considerado a sus 49 años como un ídolo de la hinchada del Tricolor Carioca.
Pero aún con el festejo vivo deberá fruncir el ceño y conseguir mejores resultados con la ‘Seleção’ en el camino al Mundial de 2026 antes de traspasarle el bastón de mando a Carlo Ancelotti a mediados del próximo año.
Las herramientas cambian según el sitio de trabajo para un entrenador que prioriza la rotación de posiciones dentro del campo y el buen juego con el balón.
Cuando llega a la ‘Verdemarelha’ Diniz extraña al goleador argentino Germán Cano, máximo anotador de la Libertadores, y pena por encontrar un artillero de esa categoría que dé alegrías a todos los brasileños.
Diniz le cobró el flojo desempeño a Richarlison y lo dejó fuera de la lista de convocados. Ahora apuesta por el joven João Pedro, en buena racha con el Brighton inglés, y el prodigio Endrick, que por primera vez integra la selección de mayores.
Diniz sabe más que nadie que Colombia extrañará al extremo Jhon Arias, ausente por acumulación de tarjetas amarillas.
Clave en el Fluminense por su labor incansable en la banda derecha, el socio ideal de Luis Díaz desde que Lorenzo asumió la selección colombiana deja un vació difícil de llenar.
Partido difícil, pero ganable. Habrá que ver si Lorenzo logra que desde el vamos Colombia funcione y no deba esperar para recomponer en el entretiempo.
Uruguay, exigencia extrema para el líder Argentina
La selección uruguaya que conduce Marcelo Bielsa en alza y con el regreso del goleador Luis Suárez, es para Argentina, líder de la clasificatoria al Mundial-2026, un examen extremo.
El centenario clásico del Río de la Plata captura gran parte de la atención en la primera jornada de la doble ventana de eliminatorias, en un duelo que incluirá el reencuentro entre el astro argentino Lionel Messi y el ‘Pistolero’ Suárez, amigos y excompañeros en el Barcelona.
La Albiceleste, acorde con su condición de campeón del mundo, arrancó el camino hacia el Mundial de Norteamérica de 2026 pisando a fondo el acelerador, con cuatro victorias al hilo y sin haber recibido goles. Con 12 puntos en cuatro partidos, tomó buena ventaja sobre los escoltas Uruguay, Brasil y Venezuela (7).
Entre tanto, Chile buscará en Santiago olvidar sus fracasos recientes y levantar vuelo en el premundial. Enfrente tendrá a Paraguay que viene de conseguir su primer triunfo, pero sólo anotó un gol en clasificatorias.
Los chilenos sufrieron una dolorosa goleada por 3-0 en su visita a Venezuela, mientras que los guaraníes consiguieron un triunfo 1-0 contra Bolivia en Asunción.
El duelo se disputará en el estadio Monumental de Santiago, con el arbitraje del argentino Fernando Rapallini, acompañado por su compatriota Silvio Trucco en el VAR.
Así mismo, una ilusionada Venezuela enfrenta a un Ecuador golpeado por bajas de hombres clave como Enner Valencia, con el objetivo de extender su prometedor arranque en la clasificatoria sudamericana hacia el Mundial de 2026.
La selección venezolana afronta este partido casero en el Estadio Monumental, en Maturín, después de sumar siete puntos en las primeras cuatro fechas premundialistas, igualada con Uruguay y Brasil, escoltando a la campeona mundial Argentina, que lidera con pleno de 12 unidades.
Ecuador llega con cuatro puntos, con idéntico récord que su rival, pero arrastrando una sanción por la inclusión indebida de Byron Castillo en la eliminatoria a Catar-2022.
Finalmente, Bolivia recibirá a Perú en La Paz, en un choque de colistas y ambos urgidos de puntos para soñar en aterrizar en el próximo ecuménico de fútbol en 2026.
El encuentro está fijado para en el estadio Hernando Siles, a 3.650 metros sobre el nivel del mar, y será dirigido por el árbitro ecuatoriano Guillermo Guerrero.