Tras haber cumplido con su cometido de sacar a José Néstor Pekerman de la Selección Colombia, los directivos de la Federación debieron haber tenido un plan de contingencia, al fin y al cabo, si el fin último era que Pekerman no continuara, asumiría uno que ya le tenía remplazo, pero no, pasan los días, las semanas y los meses y la Selección sigue sin tener un seleccionador serio, con experiencia y apto para guiarnos a Catar 2022. ¿Será que se están ahorrando un dinero para contratar un “súper” técnico?
La situación en la Federación no es precisamente un cuento de hadas, las diferencias entre unos y otros se hacen cada vez más evidentes, la lucha de poderes está acabando con la aparente calma que había antes del Mundial en junio, no hay unidad en la toma de decisiones y al final el gran perjudicado es el fútbol.
Semanalmente los directivos de la Federación se encargan de filtrar nombres de “posibles” técnicos que podrían llegar a la selección, se valen de sus amigos en los medios para que la marea baje y la mala imagen que quedó tras la salida de Pekerman vaya pasando, dando nombres de técnicos que jamás han contactado.
Y claro, algunas personas, con intereses de por medio, que se cansaron de hacerle campaña a sus amigos y tienen la necesidad de llamar la atención, se la pasan desde la mañana dando cátedra sobre posibles nombres con los que supuestamente la Federación ha tenido contacto.
Qué pensarán estos personajes que salen a gritarle a los cuatro vientos que Dunga es candidato a llegar a la Selección, o que Roberto Martínez fue contactado, cuando los propios adiestradores han salido a desmentir esos supuestos acercamientos.
La semana pasada por ejemplo en medio de la gala de “The Best”, el galardón que entrega la FIFA, un colega de Directv Sports, Luis Fernando Restrepo, charló con Roberto Martínez. Cuando le pregunto al español sobre su posible llegada a la Selección, este respondió: “Nadie me ha contactado, no he tenido ningún tipo de contacto con Colombia, no está en mis posibilidades, tengo contrato con Bélgica”.
Luego de que el mismo Martínez acabara con los rumores y mentiras de algunos, empezaron a hacer sonar el nombre de Dunga, el ex seleccionador de Brasil, no tardó mucho el rumor, pues el mismo técnico se encargó de desmentir la versión que indicaba que llegaría a la Selección Colombia.
También dijeron que Gustavo Alfaro era el gran candidato para llegar al banquillo de la Selección, pues se supone que conocer todo el proceso de los equipos nacionales por haber estado al lado de Caracol Televisión, transmitiendo las eliminatorias, amistosos y mundiales, sin embargo el mismo Alfaro confirmo que nadie de la Federación se había contactado con él.
El holandés Guss Hidink, era uno de los fuertes candidatos que manejaba el ente rector del fútbol nacional, sin embargo, el holandés tiene un contrato vigente con la Federación China de Fútbol y no piensa romperlo. Y esto solamente por nombrar algunos de los que diariamente aparecen en la radio y la televisión como “CANDIDATAZOS” a la Selección.
Lo cierto es que no pasa nada con el tema del técnico, se vienen los amistosos contra Costa Rica y Estados Unidos y decidieron que Arturo Reyes siguiera al mando de la Selección, terrible error, no por Reyes, que al fin y al cabo lo único que puede hacer es caso, sino por la falta de gestión y organización al interior de la Federación. Estos partidos amistosos, no solamente sirven para llenarse los bolsillos, sino para ir viendo cómo deber ser el esquema de juego, la ideología y la meta que se tendrá durante los próximos cuatro años de cara al Mundial de 2022.
Eso sí, mientras en la Federación no saben qué hacer, al que le hicieron campaña sus amigos para que fuera el sucesor de Pekerman, el hoy técnico de Paraguay, Juan Carlos Osorio, se la pasa ofreciéndose sin importarle el vínculo que tiene con la selección guaraní.
Lo que Osorio no ha querido ver es que en Colombia al menos de momento no es bien recibido, los amigos que hizo mientras dirigió Atlético Nacional no fueron capaces de convencer a los dirigentes y al país que él debía ser el seleccionador nacional, algo de razón tuvo José Luis Chilavert cuando le respondió a Osorio luego de una rueda de prensa diciendo: “A Osorio no lo quieren ni en Colombia”.
Mientras tanto, al hombre que sacaron por la puerta de atrás de la Federación lo quiere todo el mundo, hasta el presidente Iván Duque elogio su trabajo y le entregó el Pabellón Nacional, cosa que nunca sucedió con los antecesores del argentino.
Es entendible que las directivas no estén pensando en el futuro de la selección, pues por el momento están preparando su defensa ante la FIFA y los entes de justicia nacionales por las diferentes acusaciones que han recibido. A esta historia aún le hace falta un pedazo, y grande, ya se fue el Superintendente, a quien querían callar con una tutela improcedente, pero, ¿será que van a callar a los hombres de la FIFA?, ¿a los entes judiciales? Llevaron un político a que los defendiera y hasta ahora los está toreando, pero vuelvo y repito, a esto le falta mucha tela por cortar.