Diferencias entre países ricos y pobres traban acuerdo climático | El Nuevo Siglo
Sábado, 13 de Diciembre de 2014

Las negociaciones de la ONU para contener el cambio climático continuaban en Lima con la esperanza de conseguir un compromiso consensuado entre 195 países, que allane el camino a un ambicioso acuerdo mundial en 2015 para luchar contra el calentamiento global.

La Conferencia de la ONU sobre el clima (COP20) ha visto una constante división entre países desarrollados y países en desarrollo que extendieron las discusiones que debían concluir la tarde del viernes.

Los delegados de los países, con rostros fatigados por debates que se extendieron hasta la madrugada de este sábado, retomaron las sesiones plenarias hacia las 11h00 locales con la intención de alcanzar acuerdos. 

"Quiero llevar este proceso a un punto de consenso para cerrar la COP20 de manera exitosa", dijo el presidente de la conferencia, el ministro de Ambiente peruano Manuel Pulgar Vidal, luego de llamar a consultas a los equipos de los distintos países para intentar limar las últimas diferencias.

"Si dejamos que lo perfecto sea enemigo de lo bueno en Lima lo lamentaremos por mucho tiempo", señaló el delegado de Estados Unidos, Tod Stern, al pedir al plenario un apoyo general al proyecto de texto. "El éxito de la COP en Lima esta en juego", insistió.

Los países ricos desean que los compromisos o contribuciones nacionales, se centren sobre la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, con una evaluación futura que se base en informaciones precisas y transparentes de los países sobre los pasos dados.

Por su lado, numerosos países del Sur, sobre todo de África, América Latina y pequeños estados insulares, no están dispuestos a compromisos precisos de reducción de emisiones sino existen garantías financieras de los países ricos que les permitan adaptarse, con nuevas tecnologías limpias, al calentamiento global y a su creciente impacto.

China e India, primer y cuarto emisores mundiales de carbono, se oponen a un sistema de evaluación que los constriña, y presionan a los países desarrollados para que contribuyan financieramente a la medida de su responsabilidad como los mayores generadores del calentamiento.

 

- Energías Limpias -

 

"Los países desarrollados sólo nos piden reducción de los gases a efecto invernadero (como contribución), pero eso es imposible para nosotros" sin inversiones en energías limpias, dijo a la AFP Seyni Nafou, vocero del grupo África.

Las países deben anunciar en los próximos meses sus compromisos para lograr que las emisiones globales se reduzcan entre un 40 y 70% hasta el 2050, una necesidad para poder limitar a 2°C el incremento de la temperatura del planeta.

Más allá de ese umbral, los científicos estiman que los impactos serían graves e irreversibles y pondrían en peligro a numerosas poblaciones.

Los países en vías de desarrollo, especialmente aquellos sin litoral, están desfavorecidos y se ven afectados de manera desproporcionada por los efectos del cambio climático, dijo el representante de Paraguay, uno de los países de la región que este año se vio seriamente afectados por inundaciones que dejaron cientos de miles de afectados.

 

- Acciones ambiciosas -

 

Los representantes internacionales subrayaron que es necesario adoptar el texto por consenso bajo el riesgo de que la COP20 no haya podido cumplir sus propósitos, a pesar que Lima debe ser una etapa hacia el acuerdo que comprometa al conjunto de países en el objetivo de controlar y hacer frente al inédito calentamiento del planeta.

El texto presentado el sábado "insta con insistencia" a los países desarrollados a tomar "acciones ambiciosas de reducción y adaptación, en especial hacia los países más afectados por el cambio climático".

Esa mención, que hace referencia a los financiamientos, debería poder dejar satisfechos parcialmente a los países del Sur, que esperan sin embargo una hoja de ruta más clara para alcanzar los 100.000 millones de dólares de ayuda anual en 2020, algo que temen no se cristalizará.

Las primeras reacciones de las ONG sobre este nuevo proyecto de texto, juzgadas muy ambiciosas, han sido negativas. 

"Este texto no aporta prácticamente nada para los países más pobres y vulnerables", estimó Harjeet Singh, de la organización Action Aid International. 

"Los países ricos incumplen sus obligaciones, aún si dan pequeños pasos en la buena dirección", agregó el activista indio.

"El texto propuesto esencialmente no conduce a resultados para las poblaciones y el Planeta", consideró Asad Rehman, de Amigos de la Tierra/AFP.