La seguridad en las transacciones, los cargos con cero costos, además de la optimización del tiempo, son solo algunas de las razones por las que muchos colombianos han decidido migrar a la banca digital.
En este sentido, el sistema financiero tradicional de nuestro país y las nuevas entidades digitales apuestan a invertir en tecnología para el lanzamiento de productos innovadores, entre los que se destacan varias aplicaciones que se convirtieron en la ‘billetera’ de muchos usuarios.
Eugenia Rodríguez, de 61 años, es una ciudadana que se dedica a la venta de productos por catálogo y decidió abrirle las puertas a la era digital.
“Muchas de mis clientes me preguntaban si me podían pagar por transferencia y yo les decía que no, porque no contaba con estos aplicativos y además no tenía cuenta en un banco. Después de darme cuenta de que para ellas era más fácil transferirme la plata por una aplicación, decidí pedirle ayuda a mi hijo, él me descargo la app y ahora la mayoría de mis clientes me pagan por ahí”, comentó. “Me ha parecido muy útil y me sirve mucho para mi negocio”, agregó.
Antes del auge de estos aplicativos, las transferencias de dinero, los pagos de créditos o productos financieros, las compras en locales de comercio, como restaurantes y supermercados, eran muy limitados, pues solo existían dos opciones para el pago: con tarjeta débito y crédito o en efectivo.
Ahora el sistema financiero decidió ampliar la oferta tecnológica, y cualquier persona con celular e internet puede pagar en diferentes comercios, teniendo en cuenta que no todos los usuarios están bancarizados o pueden obtener una tarjeta de crédito, ya sea porque son trabajadores informales, por sus ingresos o, en la mayoría de los casos, por tener reportes negativos ante centrales de riesgo.
Sin lugar a dudas, la pandemia también aceleró esta digitalización, ya que debido al confinamiento que se dio durante varios meses, los colombianos tuvieron que hacer la transición de lo análogo a lo digital y empezar a pagar sus créditos, servicios y hasta las deudas con amigos, por aplicaciones que permiten hacer envíos de dinero de una forma ágil y segura.
En ese mismo sentido, Andrés Vásquez, experto en banca digital, afirmó que “el uso de la banca digital se vio impulsada por la pandemia debido a las medidas restrictivas de circulación y el mismo cuidado que las personas están teniendo en este momento a la hora de hacer trámites y pagos. La coyuntura nos adelantó tres años en la adopción de este tipo de servicios”.
“En mi negocio (un local de ropa) es muy usual el pago de mercancía, ya sea por medio de plataformas digitales o también con datáfono, que funciona con una aplicación en el celular que hace todo el procedimiento para hacer el pago”; así comenzó a contar Sebastián Méndez, de 26 años, su experiencia con el tema digital en su establecimiento.
De otro lado, relató que en su comercio, ubicado en un barrio al sur de Bogotá, el pago con estas aplicaciones es muy frecuente y “trae muchas ventajas, porque no se maneja plata en efectivo y así no hay ningún riesgo de robo; además, la plata llega rápido”.
También aclaró que es importante la verificación de las transacciones, pues, según él, ha sabido de casos en los que los ‘compradores’ le presentan al comercio una foto en donde se evidencia que hicieron el pago por el producto, pero en realidad es de otra compra, lo que quiere decir que algunos delincuentes podrían usar este tipo de opción para llevarse mercancía sin pagar.
Le puede interesar: Perspectivas. Las dos ministras inamovibles de Duque
“Hasta que no se haga efectiva la transferencia en la aplicación, no se debe entregar la mercancía”, recomendó el comerciante.
“Hay personas que no están acostumbradas a manejar estas plataformas y se confían y piensan que ya les hicieron el pago; por ejemplo, hacen una compra de $500 mil y resultan pagando $50 mil o $5 mil y hay una pérdida de la mercancía al no verificar bien que el pago se haya realizado”, comentó Méndez.
Múltiples ventajas
“Las aplicaciones resultan ser un canal digital con innumerables ventajas para sus usuarios. Todo lo que los consumidores pueden hacer desde un establecimiento físico, lo pueden completar desde la aplicación. Por lo general estas plataformas son muy fáciles de utilizar y en menos de tres minutos se puede realizar cualquier operación o transacción”, afirmó José Mantilla, vicepresidente de Tigo, refiriéndose al uso de las aplicaciones móviles.
En otro sentido, según la Cámara de Comercio de Bogotá dentro de los beneficios que ofrece este tipo de canales se encuentra la posibilidad de contar con una plataforma disponible las 24 horas del día, evitar costos adicionales por transacciones y comisiones, mantener seguros todos los movimientos, la facilidad, accesibilidad y tener la posibilidad de organizar las finanzas, incluyendo metas de ahorro establecidas y gastos controlados.
Arturo Torres, de 62 años, es otro comerciante que siente que se ha beneficiado con este tipo de tecnologías. “Yo vendo tapetes, toallas y limpiones por toda Bogotá y esas aplicaciones me parecen excelentes porque uno no necesita llevar plata en efectivo y es una buena opción para mí, porque uno puede pagar cualquier cosa. En mi caso, yo pago algunos servicios y el arriendo”.
“En un principio era difícil porque uno piensa que esas cosas son para los jóvenes, pero mi hijo me descargó la aplicación en el celular y me enseñó cómo funciona, y desde ese momento la uso seguido”, comentó el señor Arturo.
Desde otra perspectiva, el hecho de que los ciudadanos no bancarizados ahora usen los servicios de aplicaciones ha permitido que, de alguna manera, este tipo de transacciones sean visibles para los bancos y eso a su vez permite un mayor control tributario de las operaciones.
Ahorro y seguridad
Otro aspecto importante que ha llegado con las nuevas aplicaciones es el ahorro, pues varias entidades financieras incorporaron opciones o ‘bolsillos’, en donde las personas pueden guardar su dinero, sin cobro por comisiones y de una forma organizada y segura.
De otro lado, la seguridad es un aspecto fundamental y más si se trata de cuidar el dinero; por eso, estas aplicaciones se han convertido en una gran opción para comerciantes, amas de casa, conductores, entre otros, pues ya no es necesario tener exclusivamente dinero en efectivo para transacciones cotidianas, como pagar el taxi, comprar en cualquier supermercado, hacer recargas en el celular, enviar dinero, entre otras, lo que evita de algún modo los robos o ser víctima de billetes falsos.