LA CÁMARA Colombiana de Construcción (Camacol) presentó tres propuestas claves como estrategias de reactivación para el sector.
Una de las medidas destacadas es la eliminación del requisito del Sisbén en el proceso de solicitud de créditos, señalando que este trámite adicional desanima a las personas a solicitar subsidios de vivienda en Colombia.
La propuesta es argumentada por la entidad bajo el estudio realizado con Coordenada Urbana de Camacol en donde identificaron que el 31% de los hogares manifestaron haber renunciado por cambios asociados a la reducción del monto del subsidio como consecuencia de la clasificación del Sisbén.
Por su parte, el 30% de los hogares manifestaron haber renunciado por demoras en la asignación del subsidio, mientras que el 23% lo hizo por demoras en el proceso de realización y publicación del resultado de la encuesta Sisbén IV.
Sin garantías
Frente a esto el presidente de la Cámara Colombiana de Construcción, Guillermo Herrera indicó que, “lo que podemos concluir es que la implementación del no ha sido garantía ni aportado ni ha hecho mayor aporte a las condiciones de focalización del programa. En cambio, sí explica el 30% de los desistimientos de Vivienda que para este año son alrededor de 99.000 viviendas de interés social a las que renunciaron sus compradores”.
Otra propuesta se centra en garantizar la suficiencia de subsidios del programa “Mi Casa Ya”, proyectando que para el 2024 se necesitarán 72.000 subsidios solo para cubrir las entregas de las obras en curso, lo que implica mantener la disponibilidad de recursos.
La revisión realizada por el Departamento Nacional de Planeación generó cambios en la información y reclasificación de hogares, afectando a cerca de 236.867 que ahora quedarían por fuera del programa. Se propone un periodo de transición efectivo y revisar la posibilidad de eliminar el Sisbén como criterio de focalización.
Otra iniciativa sugiere retomar las coberturas a la tasa para Viviendas de Interés Social (VIS) adicionales a las de “Mi Casa Ya”, así como las temporales de No VIS. Además, se destaca la importancia de avanzar en procedimientos y reglamentación, así como impulsar la reactivación desde las regiones.
El presidente de Camacol reiteró la disposición del gremio para colaborar con el Ministerio de Vivienda y otras entidades en el diseño e implementación de nuevas estrategias.
Estas medidas buscan, no solo revitalizar el sector de la construcción, sino también generar empleo formal, en beneficio de los hogares colombianos.
Año gris
El año 2023 no ha sido fácil para miles de familias colombianas que esperaban una vivienda digna y formal, esto por cuenta del complejo panorama que ha afrontado la industria de la construcción de edificaciones.
De acuerdo con las cifras de Coordenada Urbana de Camacol, entre enero y noviembre de 2023 las ventas de vivienda de interés social (VIS) registraron contracciones del 50,9%. Durante el año se han dejado de vender un total de 103.000 VIS y No VIS. La caída en ventas representa una pérdida en inversión de los hogares en vivienda cercana a los $ 19 billones.
El impacto también se refleja en la contracción de las iniciaciones, que durante 2023 caen 30,1% en el segmento VIS y 22,6% en la No VIS, representando el inicio de obra de 49.906 unidades menos frente al 2022, que, además, son indicios de menos metros cuadrados en proceso de construcción y menor demanda de mano de obra para el 2024. También preocupa que en los últimos 12 meses 38.000 hogares han desistido de la compra de su vivienda lo que representa un crecimiento de 72,7% frente al registro del año anterior. El 78,4% de las unidades desistidas fueron VIS (29.800), con lo cual el segmento incrementó el volumen de renuncias en 109,4%.
La revisión realizada por el Departamento Nacional de Planeación generó cambios en la información y reclasificación de hogares, afectando a cerca de 236.867 que ahora quedarían por fuera del programa. Se propone un periodo de transición efectivo y revisar la posibilidad de eliminar el Sisbén como criterio de focalización.
Otra iniciativa sugiere retomar las coberturas a la tasa para Viviendas de Interés Social (VIS) adicionales a las de “Mi Casa Ya”, así como las temporales de No VIS. Además, se destaca la importancia de avanzar en procedimientos y reglamentación, así como impulsar la reactivación desde las regiones.
El presidente de Camacol reiteró la disposición del gremio para colaborar con el Ministerio de Vivienda y otras entidades en el diseño e implementación de nuevas estrategias.
Estas medidas buscan, no solo revitalizar el sector de la construcción, sino también generar empleo formal, en beneficio de los hogares colombianos.
Año gris
El año 2023 no ha sido fácil para miles de familias colombianas que esperaban una vivienda digna y formal, esto por cuenta del complejo panorama que ha afrontado la industria de la construcción de edificaciones.
De acuerdo con las cifras de Coordenada Urbana de Camacol, entre enero y noviembre de 2023 las ventas de vivienda de interés social (VIS) registraron contracciones del 50,9%. Durante el año se han dejado de vender un total de 103.000 VIS y No VIS. La caída en ventas representa una pérdida en inversión de los hogares en vivienda cercana a los $ 19 billones.
El impacto también se refleja en la contracción de las iniciaciones, que durante 2023 caen 30,1% en el segmento VIS y 22,6% en la No VIS, representando el inicio de obra de 49.906 unidades menos frente al 2022, que, además, son indicios de menos metros cuadrados en proceso de construcción y menor demanda de mano de obra para el 2024. También preocupa que en los últimos 12 meses 38.000 hogares han desistido de la compra de su vivienda lo que representa un crecimiento de 72,7% frente al registro del año anterior. El 78,4% de las unidades desistidas fueron VIS (29.800), con lo cual el segmento incrementó el volumen de renuncias en 109,4%.