Las economías de Estados Unidos con 5,2% y China con 8,8% estarán en los primeros lugares en 2019, de acuerdo a un análisis privado. De acuerdo con Craig Burelle, vicepresidente y analista de estrategias macroeconómicas en Loomis Sayles, filial de Natixis Investment Managers, estos dos países son las mayores potencias económicas del mundo y representan el 40% de la actividad económica global a nivel de PIB. Pese a que China podría estar ralentizándose, estos dos motores deberían impulsar el crecimiento hacia delante en los trimestres venideros.
En su informe, el experto destacó que “hay pruebas de una presión inflacionaria moderada dentro de las economías desarrolladas y emergentes, pero en nuestra opinión este nivel de inflación ligeramente más alto no es una amenaza para la expansión”.
“Estados Unidos está entrando en una fase madura del ciclo de crédito, mientras que la mayoría del resto de países se encuentra en una posición mucho más temprana. Los países podrían progresar en la fase de expansión durante largos períodos de tiempo, especialmente si el crecimiento y la inflación se mantienen estables”, explicó.
Negociaciones
Sostiene Burelle, que la economía global sigue estando muy vinculada al comercio y las cadenas de suministro complejas. Las negociaciones comerciales y los aranceles han entorpecido en cierta manera el comercio global pero no esperamos alteraciones en el comercio que puedan cambiar de manera significativa la previsión de crecimiento global.
“Una modesta aceleración de la actividad comercial en China podría ser muy beneficiosa para los mercados emergentes, especialmente si el tono del discurso comercial se suaviza en el futuro este año”, resaltó.
De otro lado, dice que el mayor impulso en la economía de EU en relación con el resto del mundo debería mantener a la Reserva Federal (FED) en la senda actual hacia unos tipos de interés a corto plazo más altos, mientras que otros bancos centrales de mercados desarrollados siguen siendo más acomodaticios”.
Respecto al crédito, dice que “a excepción de EU y unos pocos mercados emergentes, las condiciones de crédito a nivel global parecen bastante estables. En EU las condiciones de crédito se han vuelto menos acomodaticias a medida que los tipos reales de los fondos federales se acercan al terreno positivo”.
Activos
Asegura el analista, que “los diferenciales de los bonos de alto rendimiento de EU han sido fuertes con el apoyo del excelente crecimiento de los beneficios empresariales y la importante demanda de clase de activos por parte de los inversores. No es probable que decaiga la demanda dadas las estables previsiones a nivel nacional y los relativamente ventajosos rendimientos de la clase de activos”.
Asimismo, los diferenciales de bonos con grado de inversión de EU han retrocedido, pero siguen reflejando el entorno operativo positivo. La clase de activos debería ofrecer un importante diferencial de rentabilidad en bonos del tesoro a lo largo de los siguientes trimestres.
Las valoraciones de los mercados emergentes habían mejorado en cierta medida antes de las recientes rectificaciones, pero se ha restaurado la prima de riesgo. Pese a que vemos valor en la clase de activos, esperamos otro catalizador que desencadene una tendencia duradera.
Dice el experto, que “parece que el fuerte impulso económico de EU en relación con la mayoría de países va a mantenerse. Por lo tanto, esperamos más subidas de tipo de la Reserva Federal mientras que los bancos centrales de otras economías desarrolladas mantienen políticas monetarias acomodaticias”.
“Esperamos que el dólar estadounidense se mantenga firme durante los próximos trimestres, teniendo en cuenta el crecimiento y los diferenciales de tipos de interés. Sin embargo, hay un riesgo poco probable pero de alto impacto de que la Reserva Federal nos sorprenda con un tono más conciliador, que no tiene valoración actualmente en la mayoría de mercados”.