Debido al profundo impacto que la alta inflación está dejando en todos los sectores de la economía, casi todos los análisis y pronósticos esperan que a fin de año la cifra no sobrepase el dígito.

Este indicador, por ejemplo, es fundamental para definir el incremento del salario mínimo para el 2024, pero también para que muchos bienes y servicios no aumenten de valor, como los arriendos, por ejemplo.

Según la Encuesta Mensual de Expectativas del emisor, las proyecciones para la inflación al cierre de 2023 indican que un 48,6 % de los analistas anticipa que estaría en un rango entre el 9,5 % y el 10 %, mientras que un 5,4 % prevé un rango entre el 10 % y el 10,5 %. Por otro lado, un significativo 45,9 % de los encuestados apunta a un rango entre el 9 % y el 9,5 %, según explicó el Banco de la República.

Expectativas

Las expectativas para la inflación en octubre, o lo que queda de octubre, son igualmente diversas. El 47,2 % de los expertos espera que se ubique entre el 0,3 % y el 0,4 %, mientras que el 33,3 % prevé un rango entre 0,4 % y 0,5 %. El 16,7 % restante de los analistas anticipa un dato entre el 0,2 % y el 0,3 %. La variabilidad en estas proyecciones refleja la incertidumbre en torno a la evolución de la inflación en el corto plazo, a pesar de que la diferencia de estos pronósticos sea mínima

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Mirando hacia el futuro, las perspectivas para la inflación en 2024 también presentan una amplia gama de opiniones. Un 30,6 % de los expertos cree que la inflación se mantendrá entre el 5 % y el 5,5 %, mientras que un 38,8 % prevé un rango entre el 6 % y el 7 %. En un tono más optimista, un 13,9 % sostiene que la inflación se situará entre el 4 % y el 4,5 %.

Cabe destacar que, a pesar de que el país experimenta un crecimiento económico estable, las previsiones de organismos internacionales, como el Fondo Monetario Internacional, sugieren que la inflación en Colombia podría alcanzar el 11.4 % en 2023 y luego disminuir al 5.2 % en 2024. Además, se debe considerar el impacto potencial del fenómeno climático de El Niño en la economía, con inundaciones en algunos países y sequías en otros, lo que podría generar desafíos adicionales.

Riesgos

En este contexto, los riesgos para la inflación en Colombia están vinculados a múltiples factores, como un posible recrudecimiento de El Niño, los efectos del precio de la gasolina en el costo de vida y las implicaciones que el conflicto en Oriente Medio podría tener en los precios internacionales del petróleo.

Otro aspecto crucial del panorama económico en Colombia es la evolución de las tasas de interés. La tasa de intervención del Banco de la República es un instrumento fundamental para controlar la inflación y mantener la estabilidad financiera.

En agosto de 2023, la Junta Directiva del Banco de la República decidió no modificar la tasa de intervención, lo que generó expectativas. Según la Encuesta de Expectativas Mensuales del Emisor, se prevé que la tasa de intervención sea del 13,25 % en septiembre y del 12,50 % en diciembre. Para septiembre de 2024, los analistas anticipan una tasa de intervención del 8,50 %.

Por otra parte, en septiembre se completaron seis meses con descensos consecutivos en la inflación anual, luego de que en marzo llegara a su pico. Esta registró una variación de 10,99 %, un resultado inferior en 45 puntos básicos con respecto a septiembre de 2022 (11,4 %) y su nivel más bajo en más de un año.

Precios

Frente a sus pares, la inflación en Colombia se ha reducido a un ritmo más lento, ya que el crecimiento en los precios, y por ende el ajuste de la política monetaria, fue posterior. Sin embargo, sigue la misma tendencia a la baja, por lo que no debe ser un motivo de preocupación.

Aquí hacemos énfasis en el comportamiento de la inflación núcleo. La inflación núcleo excluye los alimentos y los energéticos, pues estos rubros generalmente presentan conductas bastante volátiles y excluirlos nos permite observar el comportamiento de la demanda interna de la economía. Para septiembre, esta presentó una variación anual de 9,8%, después de haber exhibido variaciones de dos dígitos desde febrero 2023. En los últimos meses, se ha venido moderando, lo que evidencia los efectos sobre la demanda de la política monetaria contractiva del Banco de la República.

El Banco ha sido enfático en su mensaje de mantener la tasa en terreno real positivo, para seguir reduciendo la inflación hasta su rango meta. Ante la caída en la inflación núcleo y la inflación total, se podría dar cabida a recortes de la tasa de política monetaria hacia finales de 2023.

Intereses

Según la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas del Banco de la República (EME) para septiembre, el promedio de los encuestados espera un recorte de 25 puntos básicos en la reunión de octubre, situando la tasa de intervención en 13 % para este mes. Para diciembre de 2023, la media de los analistas espera un recorte de 50 puntos.

De todos modos, Anif indica que “de cara al cierre del año se generan algunas preocupaciones, por lo que será importante seguir monitoreando el comportamiento de la inflación de ciertas divisiones, de tal manera que no se pierda el trabajo que viene ejecutando el Banco de la República. Una de ella son los alimentos y bebidas no alcohólicas, que mantienen una inflación de dos dígitos y parece ser que la tendencia bajista se empieza a revertir”.

Así mismo, es importante dar seguimiento al precio de los arriendos, dado su crecimiento sostenido y el efecto regresivo que tiene sobre los hogares. De igual manera, se deberá tener en cuenta los precios de la electricidad que, si bien han mantenido una fuerte tendencia a la baja, podrían verse afectados con la llegada del fenómeno de El Niño.

Anif: aumento del salario no debe ser mayor a 9%

El presidente de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif), Mauricio Santa María, advirtió que el aumento del salario mínimo para 2024 no debería subir más de un 9 %.

“Decir que va a subir el salario mínimo en dos dígitos, cuando todos esperamos que la inflación del año entrante y de este año sea de un dígito, es una propuesta que no se compadece con la realidad”, explicó Santa María.

Además, dijo que es prácticamente imposible de negociar, pues el Gobierno colombiano aspira a que la inflación en 2023 sea de 9,2 %, a la que habría que agregarle el número que resulte de medir la productividad total en Colombia en este complejo año, cuyo promedio estimado hasta ahora sería de 1,5 %.

Santa María también aseguró que hay que tener precaución sobre la discusión de la reforma laboral, que también puede incidir en los efectos macroeconómicos del próximo año.

“No sabemos si la reforma laboral se aprobará o no, pero si es así, va a ser muy perjudicial para el empleo y la formalidad”, señaló.