LA DISMINUCIÓN de los créditos para vivienda, que varios bancos ya comenzaron a implementar para acelerar la demanda, es uno de los factores que muchos colombianos ya están aprovechando con el giro de remesas que este año están creciendo.
A juicio de analistas esta puede ser una de las explicaciones en el incremento desde el año pasado de las remesas, que envían esos recursos a sus familias para adquirir o ayudar a comprar vivienda.
De acuerdo con las estadísticas del Banco de la República, en junio se registraron ingresos por US $1.017 millones, mientras en el semestre se presentó acumulado de US $5.627 millones, es decir el 15,47% más que en el mismo periodo de 2023, cuando llegaron US $4.873 millones.
Asimismo, al hacer un contraste frente al mismo mes del 2023 se presentó un aumento del 29,8%, es decir, US $233 millones, cuando hace un año fueron de US $783 millones. Al comparar frente a mayo pasado, cuando se había convertido en la cifra histórica más alta, se vio un aumento del 5,9%, pues los ingresos sumaron US $960 millones.
Más incrementos
En declaraciones del analista e investigador de la Universidad del Rosario, Henry Amorocho, dijo a EL NUEVO SIGLO, que “en el caso de las remesas, este ha sido un renglón muy favorable en los dos últimos años en Colombia y también porque hace muy buen tiempo es muy favorable para la economía. El año pasado después del descalabro de la falta de ejecución del presupuesto en más de un 30% de inversión pública que no se ejecutó y la baja de la inversión privada tan considerable junto a ese descalabro de la baja de ventas en la vivienda, la baja en el comercio, las remesas tuvieron un comportamiento histórico y lo fundamental es que este año van a subir por lo menos un 13%”.
Indica que “el año pasado estuvimos en US $10.000 millones y este año vamos a estar en US $11.000 millones. Es una cifra bastante importante. Eso medido en pesos colombianos son $44 billones, nada más y nada menos que 3 puntos del producto interno bruto”.
Considera el analista que “sin duda esos recursos van a ser el colchón para que el poco crecimiento que haya este año, de aproximadamente entre el 1% y 1,1%, en muy buena parte depende del comportamiento del sector externo y en este caso de las remesas. Entonces con US $11.000 millones aproximadamente en 2024, las remesas le van a dar dinámica al crecimiento y van a cerrar el bache que ha dejado la inversión privada por las altas tasas de interés y todavía por la incertidumbre económica que de todas maneras ataca el clima de los negocios”.
El director de Investigaciones Económicas de Corficolombiana, César Pabón, dijo a los medios que las cifras son una gran noticia y destaca el impacto en la economía, pues en apenas cinco años esos ingresos prácticamente se han duplicado y este año estarán acercándose a los $45 billones (unos US $10.500 millones) frente a unos $23 billones en el año 2019.
Los hogares
Consideró que las remesas impulsan el consumo y el crecimiento e impacta positivamente a los hogares más vulnerables. “En las cifras de pobreza monetaria se muestra que los grandes impulsores de los hogares más vulnerables son los ingresos laborales y los de transferencias de hogares, que en otras palabras son remesas”.
A su vez, Édgar Jiménez, profesor de Finanzas y coordinador del Laboratorio Financiero de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, dijo que lo que está pasando con las remesas es sinónimo de un mayor número de colombianos trabajando en el exterior no solo en actividades operativas, sino calificadas. El académico también coincide en que la baja de tasas hipotecarias anima a quienes tienen ese interés para comprar esas viviendas.