EL SECTOR de la construcción en Colombia sigue registrando un comportamiento débil, en los primeros meses de este año. Según un análisis del Bancolombia, con datos del DANE, las obras civiles han continuado mostrando resultados negativos, debido principalmente a la falta de impulso en el desarrollo de proyectos vinculados a las carreteras. Esto, sumado a la débil demanda de viviendas, evidencia las dificultades que enfrenta la actividad constructora en general.
En el primer trimestre de este año, el indicador de producción de obras civiles se contrajo 14,9 % anual, con 3 de los 5 subsectores en terreno negativo. Esto se puede atribuir a un cambio de institucionalidad que aún no ha logrado reactivar los proyectos, pero donde, por el lado positivo, se anticipa una mayor dinámica en los próximos meses con la reanudación de los proyectos 4G y 5G y la aprobación del Plan de Desarrollo.
En este mismo sentido, las ventas de vivienda alcanzaron 8654 unidades, cifra 62 % menor al registrado para el mismo período de 2022 (VIS -66,2 % anual, y no VIS - 50,2 % anual), niveles críticos dados los elevados niveles de tasas de interés y el lento avance de los subsidios del programa "Mi Casa Ya".
Así, el deterioro de las ventas de vivienda consolida una tendencia que ha impactado el desempeño general de la actividad constructora con los altos precios y el nivel de créditos han tenido un impacto considerable.
La tasa media ponderada de adquisición de vivienda se situó al cierre de abril en 18 %, esto es 10 puntos básicos menos frente al mes anterior, y registra un incremento de 940 puntos básicos desde que se inició el ciclo alcista de tasas en octubre de 2021, lo que representa un ajuste menos proporcional que el aumento de la tasa de intervención del Banco de la República. Se espera que esta tasa llegue a su tope y comience a estabilizarse en línea con la expectativa de una pronta pausa por parte del Banco.
Materiales
Por consiguiente, también se ha percibido debilidad en demanda por materiales de construcción. En particular, los despachos de cemento reflejaron una caída de 7,52 %, al igual que la producción de cemento, que mostró un registro 8,11 % inferior al del año anterior.
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En abril, el sondeo de intención de compra de vivienda de Fedesarrollo revela que la disposición a comprar vivienda sigue en cifras negativas (-50,1 %), y que se sigue profundizando respecto al período anterior, llegando casi a los niveles más críticos de la pandemia, mostrando el bajo apetito por adquirir vivienda en las condiciones actuales del entorno.
Por su parte, la tasa media para construcción de vivienda escaló hasta 18 %, acumulando un alza de 1400 puntos básicos respecto al año pasado. Esto implica un alza más que proporcional a la registrada por la tasa de referencia, una tendencia que, al igual de las tasas de adquisición, podría estabilizarse en los próximos meses por la expectativa del fin del ciclo alcista por parte del Banco de la República.
Cartera
Con corte a abril, la cartera de vivienda de los establecimientos de crédito mantiene su dinamismo a pesar de desacelerarse frente a los últimos registros, al crecer 10,9 % anual. Así, se confirma cómo las condiciones ácidas del entorno han llevado a crecimientos cada vez menores, una situación que se mantendría mientras las tasas permanezcan en altos niveles.
En cuanto a los desembolsos de crédito al constructor, observamos en marzo un monto de COP $1,09 billones y 932 desembolsos. Aumentan así 12 % anual los montos y 10 % los desembolsos. Esta modalidad de crédito se mantiene dinámica tras la ralentización observada a finales de 2022. Sin embargo, esperaríamos ver una moderación en el ritmo de desembolsos en los próximos meses.