Perspectivas. Así se mueve un ‘tiburón’ para invertir | El Nuevo Siglo
Miguel Mc Allister ha cofundado varias compañías, entre ellas Domicilios.com, MUY y Merqueo.
Cortesía
Domingo, 4 de Septiembre de 2022
Redacción Economía

A finales del siglo XX y en los albores de los años 2000, una tendencia empresarial empezó a especular con los precios de las nuevas empresas que innovaban en el área de las TIC, la computación y, sobre todo, el internet.

La burbuja puntocom, como se conoció a este periodo entre 1997 y 2001, fue esa gran explosión de empresas de internet que alcanzaron valorizaciones estratosféricas y que terminaron dejando en quiebra a más de uno. Sin embargo, de allí surgieron grandes compañías que hoy en día son ejemplos de exitosos emprendimientos: Google, Yahoo, eBay y Amazon, por nombrar algunos.

Pero no solo eso, también les abrió el camino a esas empresas que, al estilo de Steve Jobs y Apple, parecen surgir en el garaje de una casa. Pocos años después del estallido de la burbuja surgen las primeras “startups” y con ellas toda la dinámica empresarial moderna, las apps y los unicornios (emprendimientos que logran valorizarse en más de US$1.000 millones) que se conocen hoy en día.

Los ejemplos

Facebook, Twitter y Uber son algunos ejemplos de ideas que se elevaron como palmera y que aún siguen creciendo.

Ha sido tanto su auge que, hoy en día, inversionistas expertos, emprendedores exitosos y empresarios millonarios han decidido apoyar las ideas más innovadoras y prometedoras del mercado.

Con esa idea fue que el Canal Sony trajo al país “Shark Tank”, o el Tanque de Tiburones, como se les llama a estos cazadores de negocios. El exitoso programa, que ya lleva varias temporadas, contará en esta ocasión con Miguel Mc Allister, el cofundador y CEO de Merqueo, quien también ayudó a crear otras exitosas apps como Domicilios.com y la cadena de comidas MUY.

Mc Allister, quien empezó a programar desde sus 12 años y lleva un largo recorrido en el mundo de las startups, cambia su rol, promoviéndose hasta el grado de ‘tiburón’.

Así que ahora su labor será olfatear las mejores oportunidades de negocio, para ayudar a potenciarlas y convertirse, más allá de un animal de caza, en un “ángel inversionista”.

Mc Allister habló con EL NUEVO SIGLO y explicó qué es lo que un inversor y acelerador de emprendimientos busca. 

Seguridad

Para el nuevo 'tiburón', lo más importante a la hora de vender una idea a un inversionista es transmitir seguridad en el producto o servicio que se está ofreciendo.

“Mi esposa, por ejemplo, es emprendedora y hay una cosa que siempre le digo: yo creo que lo más importante en un emprendedor es que le transmita a la gente que lo va a lograr sin necesidad de que nadie más lo ayude, o sea, que lo va a lograr”, explicó Miguel.

Además, añade que “hay una gran diferencia, por ejemplo, si un emprendedor dice: ‘hola, Juan, ¿cómo estás? Estoy emprendiendo, me gustaría saber qué opinas tú de esto, si me puedes ayudar con esto’, y entonces luego voy a donde un proveedor y le digo: ‘me encantaría a través de ustedes si podría llegar a hacer esto’… lo que se expresa, lo que da a entender, es que si un emprendedor necesita de muchas cosas para lograrlo, de muchas personas o de muchas aprobaciones, se siente que está buscando aprobación, que está tratando de ponerse en los hombros de otra persona para lograr las cosas, y eso no es bueno”, detalla Mc Allister.


Le puede interesar: Perspectivas. Revender gasolina dejó de ser "negocio" en Maracaibo


Por el contrario, cree que se deben mostrar con seguridad los logros y beneficios que generará el proyecto; más que pedir ayuda, invitar a sus inversionistas a unirse a un proyecto, ya de por sí, exitoso.

“Si llegan y te dicen: ‘oiga, yo estoy trabajando en esto, mi misión es esta, hoy estoy en esto, el próximo me voy a dedicar a esto, y esto, y adicionalmente voy a levantar una plata para lograr esto; ese es mi proyecto, me encantaría que estuviera’ y ya. Esa es una invitación a hacer parte de una gran visión, más que decir: ‘ustedes son la pata que me falta para lograr hacer mi negocio’”, señaló.

Visión

“Entonces creo que es tener una visión arrolladora, que uno sienta que uno no es fundamental, sino que esta persona lo va a lograr conmigo o sin mí”, dice el CEO de Merqueo.

En su opinión, es fundamental que el emprendedor ya tenga claro cuáles son los pasos a seguir, y no llegue a esperar qué soluciones le dan.

“Yo creo que es lo que separa muchísimo a los emprendedores. Uno lo ve en ‘Shark Tank’, llegan y te dicen como: ‘este es mi peach y con la ayuda de ustedes podría llegar a Estados Unidos, con la ayuda suya podría entrar a poder distribuir el producto, entonces tú sabes mucho de marketing y me puedes ayudar’. No, uno no quiere eso”, corrobora. “Lo que pienso de inmediato es: ‘entonces usted me quiere es poner a trabajar”, cuenta entre risas.

“Uno lo que quiere escuchar es: ‘este es mi proyecto, la verdad es que voy a lograr todo esto y me encantaría contar con ustedes como inversionistas y que me acompañen en este camino”, puntualiza el nuevo 'tiburón'.

Ejecutar, más allá de idear

El último gran consejo es que, más allá de solo tener una gran idea, es poder llevarla a cabo.

Mc Allister cuenta que es de suma importancia el lograr ideas, pero que esto nace de la necesidad y de la cotidianidad.

“Uno en la universidad hace tres cosas: estudiar, rumbear y comer, pedir domicilios […] cuando creamos domicilios.com, no nos interesaba meternos en el tema de la rumba, ni el trago. Nosotros para pedir domicilios usábamos las páginas amarillas, y allí tú no sabías ni siquiera qué pedías; entonces comenzamos con eso: una página mostrando los platos que se pedían, luego el menú, los precios, hasta llegar al botón de pedir domicilios; todo es un proceso, pero nace de la cotidianidad”, relató.

Pero allí es donde se diferencia el emprendedor exitoso, del que no. “Muchas veces eso separa a los ejecutores, de la gente que tiene ideas solamente”.

“Porque quien tiene ideas es como: ‘solamente necesito que me dejen ir a este banco, yo les propongo esto y entonces ese es mi negocio’. ¡No!, el banco no lo necesita, si se tiene una idea, y eso es lo común, se tiende a pensar en sus ideas como: ‘voy, le cuento esto a alguien y eso pasa’, versus el: ‘vamos a hacer esta cosa, voy a contratar a esta persona, vamos a lograr, esto luego es el paso uno, este es el dos, el tres y el cuatro, luego hacemos esto, salimos, empezamos a exportar y en cinco años vamos a ser la empresa más grande del mundo’; eso es lo que se necesita”, comentó.

Así que pide que más que solo ideas, se ejecuten, se tenga un plan claro, que sea un motor que jalone y no una carga más que llevar.