Se estima que el desarrollo del hidrógeno le permitirá a Colombia la reducción de entre 2,5 y 3 millones de toneladas de CO2 en la próxima década, lo que contribuye al cumplimiento de las metas de la COP21 de alcanzar la carbono neutralidad en 2050.
En este sentido, algunas compañías se han sumado a la labor ambiental del país, como es el caso de la compañía de gas y energía Promigas, que firmó ayer un acuerdo para promover la movilidad eléctrica con hidrógeno en Colombia con la compañía japonesa Sumitomo Corporation Andes, sumándose de esta manera a la puesta en marcha en marzo del piloto de producción de hidrógeno verde para generar conocimiento y determinar el potencial de esta energía en el país.
El acuerdo se firmó este 18 de mayo en Tokio, Japón. Los presidentes de las compañías intercambiaron memorandos y oficializaron la alianza, en un evento que contó con la participación del embajador colombiano en ese país.
Cabe resaltar que, en esta alianza, Promigas aporta su experiencia y capacidades para desarrollar mercados de movilidad con nuevos energéticos, como lo hizo en Colombia en los años 80 y 90 con GNV para vehículos livianos, y en los últimos años con GNV para carga pesada y con LNG en Perú, así como sus crecientes capacidades en investigación, desarrollo e innovación en gases renovables.
Por su parte, Sumitomo Corporation aporta su experiencia global para desarrollar mercados en energía e infraestructura y su trayectoria en la cadena de valor del hidrógeno a través de varias de las compañías de su portafolio.
Asimismo, la alianza contempla en sus primeras fases la colaboración en el desarrollo de estudios para determinar oportunidades y retos que presenta la producción, distribución, comercialización y uso del hidrógeno para movilidad vehicular eléctrica en Colombia y Perú, ambos mercados con amplio potencial en la próxima década y en el cual las compañías esperan ser protagonistas.
Cabe recordar que el pasado mes de marzo el presidente de la República, Iván Duque, en compañía del ministro de Minas y Energía, Diego Mesa, inauguraron los dos primeros proyectos piloto de hidrógeno de bajas emisiones en Colombia, siendo Ecopetrol y Promigas las empresas líderes de estas iniciativas.
Proyectos piloto
Uno de los pilotos es el electrolizador de Ecopetrol en Reficar, el cual tiene una potencia de 53,2 kw y permitirá probar el potencial uso de agua en los procesos y la estabilidad en la producción de esta tecnología.
El segundo es el proyecto piloto exploratorio de producción de hidrógeno verde y blending con gas natural en redes de transporte y distribución, ubicado en la Estación Heroica de Promigas.
Entre tanto, se estima que el desarrollo del hidrógeno le permitirá a Colombia la reducción de entre 2,5 y 3 millones de toneladas de CO2 en la próxima década, lo que contribuye al cumplimiento de las metas de la COP21 de alcanzar la carbono neutralidad en 2050.
Por su parte, el piloto de Ecopetrol se viene ejecutando desde hace dos meses y utiliza aguas industriales de la refinería para producir diariamente 20 kg de hidrógeno verde de alta pureza (99,999%). Esta prueba permitirá recopilar información sobre la operación, mantenimiento, confiabilidad y escalabilidad de las tecnologías utilizadas. Al finalizar el piloto en la refinería, se continuará con otras pruebas en las operaciones del Grupo Ecopetrol.
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El objetivo principal es evaluar la viabilidad técnica y ambiental, así como el desempeño de la generación de hidrógeno verde en la Refinería de Cartagena. También servirá para conocer el impacto en el uso de insumos como el agua y la potencia eléctrica. El hidrógeno verde producido en el piloto servirá para mejorar la calidad de los combustibles que se producen en la refinería, para lo cual se usa actualmente hidrógeno gris.
Sin duda alguna la lucha contra el calentamiento global ocasionado por la emisión de Gases de Efecto Invernadero (GEI) se ha convertido en una prioridad internacional. Los Acuerdos de París de 2015 recogen la necesidad de mantener el calentamiento global muy por debajo de los 2ºC. En este sentido, la Contribución Determinada a Nivel Nacional de Colombia compromete una reducción de emisiones del 51% en 2030 respecto al escenario de referencia, con el objetivo de alcanzar el carbono neutralidad hacia mediados de siglo.
Hoja de ruta
En la presentación de la hoja de ruta de hidrógeno verde, hace algunas semanas, el Ministerio de Minas y Energía, resaltó la importancia de Colombia al estar ubicada en un enclave geográfico estratégico. “En primer lugar, Colombia es el nexo de unión entre América Central y América de Sur, teniendo fronteras y, por tanto, redes de transporte, distribución y comercio con otros cinco países. Presenta una red eléctrica interconectada con países vecinos que se extenderá en la próxima década con una interconexión adicional con Ecuador y una nueva línea con Panamá”, se puede leer en el documento.
Además, Colombia se ubica entre dos océanos, posición que la sitúa como nodo de comercio marítimo y exportación. Colombia cuenta con 10 zonas portuarias, siendo Cartagena en el Caribe y Buenaventura en el Pacífico, los puertos de mayor relevancia. La mayoría de los puertos cuentan con una infraestructura desarrollada para la importación/exportación de crudo y gas, que pude reacondicionarse para el transporte y almacenamiento de hidrógeno y derivados.
Por todo lo anterior, nuestro país podría convertirse en un hub logístico de hidrógeno, abasteciendo a los países cercanos tanto por mar como por tierra. Además, los costos competitivos esperados para el hidrógeno de bajas emisiones en Colombia favorecerán la exportación de hidrógeno hacia otros mercados de gran demanda, impulsando a su vez el comercio de otros productos en toda la cadena de valor del hidrógeno.
Demanda
En la actualidad, el hidrógeno a nivel global se consume como materia prima en diversas actividades industriales como la refinación, la industria química o la siderurgia. De hecho, en Colombia la demanda anual de hidrógeno, estimada en 150 kt, se produce mediante reformado de gas natural (hidrógeno gris) y se consume principalmente en las refinerías. El resto de la demanda se distribuye entre la producción de fertilizantes y otros usos industriales menores, utilizándose en muchos casos hidrógeno electrolítico producido con electricidad de la red.
Sin embargo, el hidrógeno de bajas emisiones se presenta como un nuevo vector energético clave en la transformación y descarbonización de la economía colombiana. En primer lugar, el hidrógeno y sus derivados ofrecen oportunidades para la modernización y el desarrollo de múltiples aplicaciones industriales, además de sustituir a los combustibles fósiles en otros sectores como el transporte o la generación eléctrica. A nivel internacional, Colombia formará parte de un nuevo mercado energético que abarca tanto los países cercanos de Latinoamérica como los grandes focos de demanda de hidrógeno de bajas emisiones en otros continentes, contribuyendo así a su apertura internacional.