La ingeniería de protección contra incendios es un sector que cuenta con más de 150 años de desarrollo a nivel mundial. En Colombia, su crecimiento ha estado ligado a la iniciativa de diferentes organizaciones que se han unido con el fin de formalizar el quehacer y concientizar a la ciudadanía sobre la importancia de estar preparados y protegidos ante una emergencia con fuego.
“La protección contra incendios es una disciplina integral que abarca muchos campos de la ingeniería. En Colombia, anteriormente solo existía una asociación de rociadores automáticos, pero la protección debe ir mucho más allá y contar con detección, evacuación, iluminación de emergencia, señalización, resistencia al fuego de la estructura, cultura ciudadana y sobre todo, ética por parte de los expertos que la ejercen”, afirma José Joaquín Álvarez, miembro de la Sociedad Colombiana de Ingenieros.
Por esta razón, tras cuatro años de consolidación, el Gremio de Protección contra incendios (Anraci) se ha encargado de propiciar espacios donde se discutan los avances que ha tenido el sector en el país y se analicen los retos que deberá afrontar el sector en su tarea de preservar la vida y reducir las pérdidas materiales ocasionadas por los incendios.
“En Colombia, desde el origen de ANRACI se ha visto el interés de las entidades por capacitarse y mantenerse actualizadas en la normativa vigente. Lo que, a su vez, genera conciencia en las personas y permite hacer un llamado al Estado para crear políticas nacionales que garanticen educación, inversión y cultura de la protección contra incendios en el país”, dice Hugo Ignacio Torres Bahamón, director ejecutivo de ANRACI. Estos espacios de diálogo han permitido a su vez, contar con la visión de expertos internacionales de México, Estados Unidos y Brasil, quienes aportan la experiencia de sus países en cuanto a diseño e implementación de sistemas de protección contra incendios en espacios con altos niveles de riesgo.
Por ejemplo, para David Caipa, especialista mexicano, es indispensable que los aeropuertos y proyectos de metro en el país cuenten con sistemas de detección de humo que garanticen la reacción oportuna de la ciudadanía ante un siniestro. “Por ser espacios con alto flujo de personas es fundamental la instalación de sistemas de detección temprana que generen una alarma previa antes de la emergencia y así, tener la posibilidad de actuar acorde a los protocolos de seguridad”, afirma Caipa.