
Dominio abismal, aluvión de ocasiones y un jarro de agua fría final. El PSG cayó 1-0 ante un irreconocible Liverpool, rescatado por Harvey Elliott, ayer en el Parque de los Príncipes en la ida de octavos de la Liga de Campeones, en la que también ganaron Barcelona, Bayern e Inter.
El martes en Anfield se definirá la eliminatoria entre dos de los equipos dominadores en Europa, el líder de la Premier League y el gran ‘capo’ del fútbol francés.
Salvador de su equipo con una ración de grandes paradas, el brasileño Alisson Becker también fue protagonista en el gol de los Reds. En el 87 jugó con precisión en largo, el uruguayo Darwin Núñez amortiguó el balón ganando a Marquinhos y combinó con Elliott, certero para marcar con un tiro cruzado.
Antes del gol, una exhibición del PSG, imparable en 2025 -15 triunfos y un empate-, que perdió su primer partido del año en el peor momento.
Lo hizo todo bien el equipo de Luis Enrique salvo encontrar la portería inglesa. Con 54 goles marcados -18 de Ousmane Dembélé- desde el 1 de enero, se atascó en el ‘día D’.
Y eso que hasta el fatídico minuto 87 había encontrado la manera de anular a Mohamed Salah gracias a un imperial Nuno Mendes. El ‘Faraón’, 30 goles y 22 pases decisivos en 39 partidos este curso, fue invisible en el Parque de los Príncipes.
Un repaso a las estadísticas resulta doloroso para los parisinos: 70,5% de posesión, 27 disparos y 10 entre los tres palos; 29,5%, 2 y 1 para los Rojos.
En la primera parte el líder del campeonato francés llegó a celebrar un gol, marcado por su fichaje de Khvicha Kvaratskhelia, pero la acción fue anulada por un ligero fuera de juego.
Además, Bradley Barcola pensó que había obtenido un penal y una tarjeta roja para el también internacional francés Ibrahima Konaté, pero el árbitro no señaló la jugada.
En el Parque de los Príncipes el repaso del PSG fue tremendo, sin premio en el marcador durante los 90 minutos debido a su desacierto ya la inspiración de Alisson.
Por otra parte, el Barcelona tomó una ligera ventaja al imponerse 1-0 al Benfica en Lisboa, aunque la eliminatoria se decidirá el próximo martes en Montjuic.
El tanto del brasileño Raphinha en el 61 concedió el triunfo a los azulgranas, pese a que una entrada a destiempo de Pau Cubarsí sobre el griego Vangelis Pavlidis en el minuto 22 de juego, que el árbitro sancionó con roja directa, les dejó con diez jugadores en el campo durante gran parte de la velada.
Los alumnos de Hansi Flick salieron dormidos en los primeros compases del choque. No se había cumplido el primer minuto ya punto estuvo el equipo luso de marcar. Pavlidis ganó un balón aéreo, que le cayó a Kerem Akturkoglu para rematar cruzado, pero el polaco Wojciech Szczesny sacó una mano prodigiosa para enviar un córner.
Conforme transcurrían los minutos, los catalanes fueron entrando en el juego hasta que, en el 14, tuvieron su mejor oportunidad en la primera mitad. El polaco Robert Lewandowski llegó a rematar a bocajarro tras un pase de Raphinha raso al punto de penal, pero el arquero ucraniano Anatoli Trubin despejó el disparo y, luego, le negó el tanto a Lamine Yamal.
Asimismo, el Bayern de Múnich se adelantó 3-0 al Bayer Leverkusen, con doblete de Harry Kane, en el pulso 100% alemán de los octavos de final de la Liga de Campeones pero sufrió la lesión de su emblemático arquero Manuel Neuer.
Kane fue de nuevo ‘Hurrikane’. Abrió y cerró el triunfo de los suyos, primero con un remate de cabeza en el 8, a centro de Michael Olise y luego transformando un penal en el 75.
El otro tanto del Bayern fue un regalo del arquero Matej Kovar, al que se le escurrió de las manos un balón que Jamal Musiala no desaprovechó (54).
La noche para olvidar del Leverkusen la hornilla la expulsión del defensa francés Nordi Mukiele poco después de la hora de juego (62).
Finalmente, Inter de Milán mostró su mejor cara para ganar 2 a 0 en su visita al Feyenoord, dejando a los italianos a un paso de cuartos.
El duelo del martes de la próxima semana en el estadio Giuseppe Meazza de la capital lombarda se presenta de entrada cómoda para un Inter que vendió la victoria en Róterdam gracias a un remate acrobático del francés Marcus Thuram (minuto 38) y un tanto del argentino Lautaro Martínez (50), bien asistido en el área por el polaco Piotr Zielinski.
La victoria pudo haber sido más amplia para el líder de la Serie A, pero Zielinski cayó en el 65 un penal, adivinado por el arquero Timon Weullenreuther.
Pese a ese fallo, el Inter huele a cuartofinalista ante un Feyenoord que en el playoff de este torneo dio una de las sorpresas al eliminar precisamente al vecino y rival de los ‘nerazzuri’, el Milán.