Las fuerzas del régimen sirio llevaron a cabo 214 ataques químicos contra la oposición desde 2011, según una ONG siria.
En un comunicado emitido el miércoles, la Red Siria de Derechos Humanos (SNHR) dijo que estos ataques se cobraron la vida de al menos 1.421 personas.
Un total de 187 niños y 244 mujeres se encontraban entre las víctimas, dijo la ONG.
El informe fue divulgado en el primer aniversario del ataque químico hecho por el régimen en la ciudad de Khan Sheikhoun, en la provincia noroccidental de Idlib, en el que más de 100 personas murieron y cientos resultaron heridas.
El régimen sirio ha llevado a cabo 11 ataques químicos desde el ataque de Khan Sheikhoun, según la ONG.
En 2017, un panel de investigación de la ONU concluyó que las fuerzas del régimen sirio fueron responsables del ataque con gas sarín en Khan Sheikhoun.
Países contra el uso de armas químicas
Este miércoles, una declaración conjunta de los ministros de Relaciones Exteriores del Reino Unido, Francia, Alemania y Estados Unidos condenó el "uso de armas químicas por cualquier persona y en cualquier lugar".
"Hoy marca un año desde el ataque atroz en la ciudad de Khan Sheikhoun, donde las fuerzas de Assad liberaron gas sarín con consecuencias trágicas para cientos de hombres, mujeres y niños", dijo el comunicado.
La declaración conjunta de ministro de Exteriores británico, Boris Johnson, y sus homólogos francés y alemán, Jean-Yves Le Drian y Heiko Maas, así como John Sullivan, secretario adjunto de Estado de EEUU, indicó: “Por más de siete largos años no ha habido tregua en las atrocidades cometidas por el régimen sirio [...] en flagrante violación del derecho internacional".
"El sufrimiento que ha sido infligido al pueblo sirio por el régimen de Assad y sus patrocinadores es abominable", expresa el comunicado.
Recordando que las investigaciones internacionales ordenadas por el Consejo de Seguridad de la ONU encontraron al régimen de Assad "responsable del uso de gas venenoso en cuatro ataques separados", la declaración dijo que Rusia reaccionó "utilizando el veto del Consejo de Seguridad para cerrar la investigación", en lugar de cumplir su promesa de garantizar que Siria abandonaría todas sus armas químicas.
"Cada vez que se usa un arma química, socava el consenso mundial en contra de su empleo", dijo.
Siria está en medio de una devastadora guerra civil desde marzo de 2011, cuando el régimen de Bashar al-Assad tomó medidas enérgicas contra las protestas en favor de la democracia, con una ferocidad inesperada.
Funcionarios de la ONU dicen que cientos de miles de personas han muerto en el conflicto.