EL opositor venezolano Edmundo González Urrutia desacató una citación de la corte suprema, en un proceso convocado para "certificar" la cuestionada elección en la que fue proclamado vencedor el presidente Nicolás Maduro.
González, representante de la líder inhabilitada María Corina Machado, denunció fraude y asegura tener las pruebas que demuestran que ganó los comicios del 28 de julio.
"Si acudo a la Sala Electoral (del Tribunal Supremo de Justicia, TSJ) en estas condiciones estaré en absoluta vulnerabilidad por indefensión y violación del debido proceso, y pondré en riesgo no solo mi libertad sino, lo que es más importante, la voluntad del pueblo venezolano", subrayó el opositor de 74 años en un comunicado en redes sociales.
La audiencia en el TSJ se celebró sin González Urrutia. Una silla vacía con su nombre fue mostrada en la televisión estatal. "Es importante que conste en acta su incomparecencia y que no acata la citación", dijo la presidenta del tribunal, Caryslia Rodríguez, que ya antes había advertido de "consecuencias" en caso de inasistencia.
Maduro acudió la semana pasada al TSJ, acusado de servir al chavismo, para pedirle "certificar" la elección a través de un proceso que académicos y dirigentes políticos consideran improcedente.
Ya González faltó a una primera audiencia convocada con todos los candidatos.
La oposición publicó en un sitio web copias de más del 80% de las actas que aseguran prueban el triunfo de González Urrutia. El chavismo desestima la validez de esos documentos.
Maduro "ha dicho públicamente (...) que si no comparezco incurriré en responsabilidades legales, y que, si comparezco y consigna copias de las actas de escrutinio, también habrá graves responsabilidades penales. ¿Es ese un procedimiento imparcial y respetuoso del debido proceso? ¿Estoy condenado por anticipado?”, cuestionó González Urrutia.
El mandatario pidió cárcel para él y Machado y la fiscalía abrió una investigación penal contra ambos por "incitación a la insurrección" después de que pidieran apoyo a la Fuerza Armada.
El Consejo Nacional Electoral (CNE), acusado de tener línea oficialista, proclamó vencedor a Maduro con el 52% de los votos, aunque no publicó el detalle del escrutinio alegando su sistema fue jaqueado.
El anuncio trajo protestas en todo el país que dejaron al menos 24 muertos, según un balance publicado el martes por organizaciones de derechos humanos.
Maduro -citado en el TSJ para el viernes- ha dicho que van más de 2.200 detenidos, que serán trasladados a cárceles de seguridad máxima.
La oposición desconoció el resultado, al igual que Estados Unidos, la Unión Europea y países de América Latina como Chile, cuyo presidente Gabriel Boric dijo este miércoles no tener dudas de que Maduro intenta "cometer un fraude".
"Si no, hubiera mostrado las famosas actas. ¿Por qué no lo han hecho? Si hubieran ganado, claramente, hubieran mostrado las actas", dijo Boric en una declaración en el palacio de La Moneda, en Santiago.
"Quiero ser claro. Chile no reconoce el triunfo autoproclamado de Maduro. No confiamos además en la independencia ni en la imparcialidad de las actuales instituciones en Venezuela", indicó el izquierdista mandatario, al tiempo que supeditó cualquier reconocimiento a la verificación de los datos por parte de "organismos internacionales independientes”.
Otros representantes de la coalición opositora sí acataron el llamado del TSJ: el gobernador del estado de Zulia, Manuel Rosales, antiguo rival del fallecido presidente Hugo Chávez y representante del partido Un Nuevo Tiempo; y José Luis Cartaya, del partido MUD, Mesa de la Unidad Democrática, que luego fue sustituido por la actual Plataforma Unitaria.
También Simón Calzadilla, del Movimiento por Venezuela (MPV), que apoyó a González. "Estamos reclamando respeto al voto (...), al resultado electoral del 28 de julio", dijo a los periodistas Rosales, que exigió al CNE "la publicación de las actas definitivas".
"Ningún partido político sabe ni siquiera, 11 días después del proceso electoral, cuál fue la votación que sacó", reclamó por su parte Calzadilla. "Si el CNE no ha publicado (...), le expresábamos al TSJ que no entendíamos qué hacíamos aquí".